Jalisco
Van por cortina alta en El Zapotillo
La inundación de Temacapulín será decisión de la Federación; el Gobierno estatal no pugnará por modificar el proyecto
GUADALAJARA, JALISCO (04/ABR/2013).- El criterio técnico se impone, y la necesidad de más agua para más habitantes en el Área Metropolitana de Guadalajara, también. El Gobierno del Estado decidió dejar en manos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) la decisión final sobre el futuro de la comunidad de Temacapulín y de ninguna manera intercederá para que la altura de la Presa El Zapotillo disminuya: el proyecto a defender por parte de las autoridades estatales será de 105 metros, lo cual implica que la inundación de ese poblado sigue dentro de la agenda.
La decisión, expone el titular de la Comisión Estatal del Agua (CEA), José Luis Hernández Amaya, se basa en acercar más líquido potable a los habitantes de esta metrópoli, a fin de abatir en el corto plazo el rezago que padece, de tres metros cúbicos por segundo. Insistir en la disminución de la altura en la cortina del embalse, explica, significa perder más de la mitad del almacenamiento, lo que irá en detrimento de la cantidad que aprovechen los tres beneficiados: la ciudad de Guadalajara, Los Altos de Jalisco y la ciudad de León, en Guanajuato.
Así, es prácticamente un hecho que los habitantes de Temacapulín serán reubicados y el poblado quedará bajo el agua. La delegación local de Conagua tendría que confirmarlo definitivamente, pero su titular, José Elías Chedid Abraham, se ha rehusado a tratar cualquier tema desde su primer y último diálogo con la prensa. Lo único que el delegado federal ha dicho es que el director general de esa instancia, David Korenfeld Federman, vendría a Jalisco para platicar con el gobernador Aristóteles Sandoval, práctica que ya ha sostenido con varios gobernadores del país.
En fechas previas se habló de construir presas “intermedias” entre el municipio de Cañadas de Obregón (donde se construye El Zapotillo) y la derivadora de El Purgatorio (que bombeará el agua del Río Verde y la Presa El Salto a la ciudad). El plan, expone Hernández Amaya, sí es la edificación de un embalse más en el poblado de Acatic, pero éste de ninguna manera afectará la altura del proyecto que incidirá directamente en la vida de los habitantes de “Temaca”.
De acuerdo con el funcionario estatal, la preservación de los pueblos es un tema que difiere de las metas trazadas desde el ámbito técnico. Esta semana se entrevistará con las autoridades de la Conagua. A ellas explicará la necesidad de extraer 5.6 metros cúbicos de El Zapotillo y lograr un almacenamiento de 911 millones de metros cúbicos. “De no ser así, (el líquido acumulado) bajaría mucho porque se almacenarían sólo 400 millones de metros cúbicos (…) Una disminución importante en el volumen. Ojalá que no lleguemos a ese escenario”.
La decisión, expone el titular de la Comisión Estatal del Agua (CEA), José Luis Hernández Amaya, se basa en acercar más líquido potable a los habitantes de esta metrópoli, a fin de abatir en el corto plazo el rezago que padece, de tres metros cúbicos por segundo. Insistir en la disminución de la altura en la cortina del embalse, explica, significa perder más de la mitad del almacenamiento, lo que irá en detrimento de la cantidad que aprovechen los tres beneficiados: la ciudad de Guadalajara, Los Altos de Jalisco y la ciudad de León, en Guanajuato.
Así, es prácticamente un hecho que los habitantes de Temacapulín serán reubicados y el poblado quedará bajo el agua. La delegación local de Conagua tendría que confirmarlo definitivamente, pero su titular, José Elías Chedid Abraham, se ha rehusado a tratar cualquier tema desde su primer y último diálogo con la prensa. Lo único que el delegado federal ha dicho es que el director general de esa instancia, David Korenfeld Federman, vendría a Jalisco para platicar con el gobernador Aristóteles Sandoval, práctica que ya ha sostenido con varios gobernadores del país.
En fechas previas se habló de construir presas “intermedias” entre el municipio de Cañadas de Obregón (donde se construye El Zapotillo) y la derivadora de El Purgatorio (que bombeará el agua del Río Verde y la Presa El Salto a la ciudad). El plan, expone Hernández Amaya, sí es la edificación de un embalse más en el poblado de Acatic, pero éste de ninguna manera afectará la altura del proyecto que incidirá directamente en la vida de los habitantes de “Temaca”.
De acuerdo con el funcionario estatal, la preservación de los pueblos es un tema que difiere de las metas trazadas desde el ámbito técnico. Esta semana se entrevistará con las autoridades de la Conagua. A ellas explicará la necesidad de extraer 5.6 metros cúbicos de El Zapotillo y lograr un almacenamiento de 911 millones de metros cúbicos. “De no ser así, (el líquido acumulado) bajaría mucho porque se almacenarían sólo 400 millones de metros cúbicos (…) Una disminución importante en el volumen. Ojalá que no lleguemos a ese escenario”.
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