Jalisco
Urge terminar nueva sede de Biblioteca Pública del Estado
Los problemas para el almacenamiento y conservación de libros y documentos históricos, y los de la cimentación en las instalaciones, lo determinan
GUADALAJARA, JALISCO.- Es urgente terminar la nueva sede de la Biblioteca Pública del Estado de Jalisco “Juan José Arreola”, debido a los problemas para el almacenamiento y conservación de libros y documentos históricos, y a los “serios” problemas de cimentación que enfrentan sus actuales instalaciones, por haber sido construidas sobre los mantos freáticos del Agua Azul, reitera su director Juan Manuel Durán Juárez:
“Esos problemas de cimentación muy serios se vinieron estudiando y la torre tiene una serie de fracturas que nos obligó a dividir la biblioteca en dos sedes: nuestra sede que tenemos en Alcalde y esta sede de 16 de Septiembre. Tuvimos que desalojar tres pisos por recomendación de los expertos en estructuras”.
El director señala, que las dos sedes que actualmente albergan la Biblioteca, enfrentan la falta de insumos tecnológicos que permitan la prevención de accidentes e incendios, controlar las variaciones de temperatura así como de humedad, que los libros experimentan durante todo el año:
“Los papeles, el papel en general tiene que mantenerse a cierta temperatura, a cierta humedad para su conservación. La manera en que lo estamos haciendo (…) es tratando de que el menor número de personas trabajen en el piso, y se pueda con deshumificadores controlar la humedad y la temperatura tratando de aislar de exterior que también es un exterior que también es un exterior con una alta contaminación, entonces tratamos de mantener los pisos cerrados y que las variaciones de temperatura sean lo menos bruscas posibles”.
“Nosotros en esta biblioteca seguimos con un sistema de extintores, mientras que existen nuevos productos que si se incendia una zona específica por algún accidente o un corto inmediatamente estos productos caen sobre los acervos sin mojarlos, para apagar el fuego de manera localizada”.
Además, agrega Durán Juárez, la Biblioteca adquirió varios compromisos, como el pactado con el Fondo Álvarez del Castillo, y con el Fondo Paul Rivet, en el sentido de que dicho acervos serían almacenados en las nuevas instalaciones ubicadas en el Centro Cultural Universitario, donde se contará con los espacios adecuados para su debida conservación:
“Este es el fondo (Paul Rivet) que se formó en el Instituto Francés para América Latina, en la Ciudad de México, donde competimos con otra biblioteca, la Lerdo de Tejada de la Secretaría de Hacienda para traernos ese fondo a Jalisco. Finalmente en una donación del Gobierno de Francia, a través de su embajada en México, nos ha sido entregado este fondo y tenemos que alojarlo en el nuevo edificio”.
EL INFORMADOR / RAFAEL ZAPATA
“Esos problemas de cimentación muy serios se vinieron estudiando y la torre tiene una serie de fracturas que nos obligó a dividir la biblioteca en dos sedes: nuestra sede que tenemos en Alcalde y esta sede de 16 de Septiembre. Tuvimos que desalojar tres pisos por recomendación de los expertos en estructuras”.
El director señala, que las dos sedes que actualmente albergan la Biblioteca, enfrentan la falta de insumos tecnológicos que permitan la prevención de accidentes e incendios, controlar las variaciones de temperatura así como de humedad, que los libros experimentan durante todo el año:
“Los papeles, el papel en general tiene que mantenerse a cierta temperatura, a cierta humedad para su conservación. La manera en que lo estamos haciendo (…) es tratando de que el menor número de personas trabajen en el piso, y se pueda con deshumificadores controlar la humedad y la temperatura tratando de aislar de exterior que también es un exterior que también es un exterior con una alta contaminación, entonces tratamos de mantener los pisos cerrados y que las variaciones de temperatura sean lo menos bruscas posibles”.
“Nosotros en esta biblioteca seguimos con un sistema de extintores, mientras que existen nuevos productos que si se incendia una zona específica por algún accidente o un corto inmediatamente estos productos caen sobre los acervos sin mojarlos, para apagar el fuego de manera localizada”.
Además, agrega Durán Juárez, la Biblioteca adquirió varios compromisos, como el pactado con el Fondo Álvarez del Castillo, y con el Fondo Paul Rivet, en el sentido de que dicho acervos serían almacenados en las nuevas instalaciones ubicadas en el Centro Cultural Universitario, donde se contará con los espacios adecuados para su debida conservación:
“Este es el fondo (Paul Rivet) que se formó en el Instituto Francés para América Latina, en la Ciudad de México, donde competimos con otra biblioteca, la Lerdo de Tejada de la Secretaría de Hacienda para traernos ese fondo a Jalisco. Finalmente en una donación del Gobierno de Francia, a través de su embajada en México, nos ha sido entregado este fondo y tenemos que alojarlo en el nuevo edificio”.
EL INFORMADOR / RAFAEL ZAPATA
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