Jalisco
Reinventarse, única opción para circos
Con la entrada en vigor de la restricción para el uso de animales en Guadalajara, el espectáculo deberá dar un giro
GUADALAJARA, JALISCO (19/OCT/2014).- “En este lado de las gradas está ¡la familia soledad!”, exclama el cómico. Las carcajadas de apenas 40 personas se ahogan en una carpa con capacidad para mil 300 espectadores. “Del otro lado están los sobrevivientes del Titanic”, insiste Walter, “El Rey de los Payasos”, quien no sabe si reír o llorar, y su escape es hacer mofa de su propio drama.
En las gradas se pueden contar cuatro decenas de personas, pero en taquilla se registró la venta de tan sólo 20 entradas con promoción de 2x1. Fue una de las últimas funciones de circo con animales en Guadalajara.
Para el empresario Walter Fuentes, esta pobre convocatoria es la ruina de su empresa, cuya temporada en este municipio llegó a su fin para siempre, si no reinventa su espectáculo.
Desde ayer ya no puede presentar su espectáculo con elefantes, dromedarios, tigres y ponis en su propio predio —famoso por ser promocionado por años como “La Normal, La Normal, La Normal”—, conforme a las reformas que se hicieron en septiembre a los reglamentos de Espectáculos y Sanitario de Control y Protección a los Animales en Guadalajara.
Al preguntarle qué va a hacer, Walter, hijo de Jesús Fuentes, fundador del Circo Unión, reconoce que no lo tiene claro. “¿Qué voy hacer? No sabemos, somos cirqueros, somos ignorantes de las leyes. Nuestra educación está labrada bajo la carpa de un circo, no entiendo bien, tenemos que esperar, no sabemos qué va a pasar”.
Hasta este año había 450 circos en México, de los cuales al menos 15 medianos y pequeños ya cerraron por la prohibición del uso de animales en los actos circenses en 12 estados de la República, según datos del Frente de Lucha por la Defensa del Circo Tradicional Mexicano.
Armando Gaona, quien representa a este movimiento, afirma que esta medida puso en riesgo el sustento de 15 mil familias que dependen de esta actividad económica. Los circos mexicanos generan 40 mil empleos directos y otros 60 mil indirectos, refiere.
“Son más de 500 empleos los que se han perdido en los últimos dos meses. Con esta campaña de desprestigio que se está haciendo de los circos han decrecido las taquillas en un 60 a 70 por ciento”.
Este negocio puede dejar de ser rentable con las reformas aprobadas si los circos no renuevan sus espectáculos. En cambio, hay circos como el Rolex que se resisten a cambiar sus actos con animales, y éste contempla hacer giras en los lugares de México permitidos, además en Estados Unidos, Centro y Sudamérica para lograr su supervivencia.
En las gradas se pueden contar cuatro decenas de personas, pero en taquilla se registró la venta de tan sólo 20 entradas con promoción de 2x1. Fue una de las últimas funciones de circo con animales en Guadalajara.
Para el empresario Walter Fuentes, esta pobre convocatoria es la ruina de su empresa, cuya temporada en este municipio llegó a su fin para siempre, si no reinventa su espectáculo.
Desde ayer ya no puede presentar su espectáculo con elefantes, dromedarios, tigres y ponis en su propio predio —famoso por ser promocionado por años como “La Normal, La Normal, La Normal”—, conforme a las reformas que se hicieron en septiembre a los reglamentos de Espectáculos y Sanitario de Control y Protección a los Animales en Guadalajara.
Al preguntarle qué va a hacer, Walter, hijo de Jesús Fuentes, fundador del Circo Unión, reconoce que no lo tiene claro. “¿Qué voy hacer? No sabemos, somos cirqueros, somos ignorantes de las leyes. Nuestra educación está labrada bajo la carpa de un circo, no entiendo bien, tenemos que esperar, no sabemos qué va a pasar”.
Hasta este año había 450 circos en México, de los cuales al menos 15 medianos y pequeños ya cerraron por la prohibición del uso de animales en los actos circenses en 12 estados de la República, según datos del Frente de Lucha por la Defensa del Circo Tradicional Mexicano.
Armando Gaona, quien representa a este movimiento, afirma que esta medida puso en riesgo el sustento de 15 mil familias que dependen de esta actividad económica. Los circos mexicanos generan 40 mil empleos directos y otros 60 mil indirectos, refiere.
“Son más de 500 empleos los que se han perdido en los últimos dos meses. Con esta campaña de desprestigio que se está haciendo de los circos han decrecido las taquillas en un 60 a 70 por ciento”.
Este negocio puede dejar de ser rentable con las reformas aprobadas si los circos no renuevan sus espectáculos. En cambio, hay circos como el Rolex que se resisten a cambiar sus actos con animales, y éste contempla hacer giras en los lugares de México permitidos, además en Estados Unidos, Centro y Sudamérica para lograr su supervivencia.
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