Jalisco
Reconocen incumplimiento de Norma Oficial en el Caisame
Aseguran que urge una ampliación del inmueble para otorgar un mejor servicio, aunque aún no les otorgan el presupuesto
GUADALAJARA, JALISCO.- Desde sus inicios, el Centro de Atención Integral de Salud Mental (Caisame) de Estancia Breve, del Instituto de Salud Mental (Salme) de la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ), opera con infraestructura insuficiente, debido a “las prisas” con las que se construyó, aseguró su director, Eduardo Valle Ochoa.
Por ello, no cuenta con las adecuaciones ideales para la atención y hospitalización de hombres y mujeres, así como de menores de edad.
Y aunque sus áreas se encuentran separadas, el Caisame no cumple en la totalidad con la Norma Oficial 025, que indica que los pacientes con enfermedades mentales deben ser atendidos de manera separada.
Ayer, EL INFORMADOR denunció que el instituto estaba violando dicha norma, debido a que se atienden a niños y adultos en un mismo lugar.
El Caisame de Estancia Breve cuenta con un área de hospitalización de 10 camas, denominada Unidad de Cuidados Inmediatos (UCI), en donde normalmente se mantienen de cuatro a seis niños que llegan ahí para ser estabilizados en un momento de crisis de ansiedad, depresión o ideación suicida.
“La necesidad a veces de internar a un niño es inminente, y es más el beneficio que el riesgo que se tiene de atender a todos ahí, porque en realidad ellos no conviven con los adultos y están vigilados”, indicó Valle Ochoa.
“Sí metemos a la UCI a adultos, pero sólo duran 24 horas, para después pasarlos al área de hospital; ahí puede haber de todo y ahí ya no entran los menores”.
Mantienen vigilancia en los menores
En entrevista por separado, uno de los paidopsiquiatras (especialistas en niños) del Caisame, Óscar Zúñiga Partida, señaló que el personal médico y psicólogos cuidan 100% la integridad de los niños, y si alguna ocasión se considera que no es prudente que un menor esté internado, mejor se manda a su casa. Sin embargo, muchos de los pequeños llegan con pensamientos suicidas y es mejor mantenerlos en observación.
En un recorrido, en el área de UCI se encontraban adultos en algún tipo de terapia, pero también estaba presente un niño, con la supervisión de una psicóloga, quien lo interrogaba.
Las áreas comunes, como el comedor o espacios al aire libre, sí pueden compartirse por hombres y mujeres, porque provoca que el paciente sociabilice y aprenda a convivir y respetar a sus compañeros pacientes.
—¿Sí se viola la norma o no?
—Si así lo quiere decir, sí, por falta de infraestructura, y porque el hospital así se creó desde un inicio; el proyecto inició, pero quedó trunco por falta de dinero. Quedó el proyecto a la mitad, la administración anterior no hizo ninguna gestión.
—¿Si un niño convive con un adulto enfermo mental, no se contamina?
—En términos emocionales no, porque los pacientes que ingresan, tenemos criterios de internamiento, entre depresión, ansiedad o trastorno bipolar, difícilmente recibimos gente con esquizofrenia, esos se van a Caisame de Estancia Prolongada.
Urge aterrizar dos proyectos
Para que los niños no convivan en un área con adultos, la única forma de impedirlo es seguir gestionando el proyecto de un área de atención exclusiva para niños y adolescentes, así como la ampliación y remodelación del Caisame, de lo cual ya se cuenta con los proyectos ejecutivos. Para realizar ambos, se necesitarían de 25 a 30 millones de pesos, subrayó Valle Ochoa.
Parte del objetivo de la remodelación tiene que ver con que los enfermos hombres deben estar separados de las mujeres, además de la construcción de consultorios para que los psiquiatras y psicólogos tengan un espacio para otorgar sus consultas de manera más privada.
También tendría un salón de usos múltiples, jardines y área de visitas.
Normalmente, el índice ocupacional en camas del Caisame es de 80 por ciento.
El segundo proyecto consiste en crear una unidad de niños y adolescentes, con una capacidad de 20 camas (10 para niños y 10 para niñas), y se gestionó al ver el incremento en la demanda de atención hospitalaria en niños y adolescentes.
Para saber
De mayo de 2008 a la fecha se han tenido alrededor de 150 internamientos de niños y adolescentes, siendo las patologías más frecuentes los trastornos de conducta y depresión con intento suicida.
Por ello, no cuenta con las adecuaciones ideales para la atención y hospitalización de hombres y mujeres, así como de menores de edad.
Y aunque sus áreas se encuentran separadas, el Caisame no cumple en la totalidad con la Norma Oficial 025, que indica que los pacientes con enfermedades mentales deben ser atendidos de manera separada.
Ayer, EL INFORMADOR denunció que el instituto estaba violando dicha norma, debido a que se atienden a niños y adultos en un mismo lugar.
El Caisame de Estancia Breve cuenta con un área de hospitalización de 10 camas, denominada Unidad de Cuidados Inmediatos (UCI), en donde normalmente se mantienen de cuatro a seis niños que llegan ahí para ser estabilizados en un momento de crisis de ansiedad, depresión o ideación suicida.
“La necesidad a veces de internar a un niño es inminente, y es más el beneficio que el riesgo que se tiene de atender a todos ahí, porque en realidad ellos no conviven con los adultos y están vigilados”, indicó Valle Ochoa.
“Sí metemos a la UCI a adultos, pero sólo duran 24 horas, para después pasarlos al área de hospital; ahí puede haber de todo y ahí ya no entran los menores”.
Mantienen vigilancia en los menores
En entrevista por separado, uno de los paidopsiquiatras (especialistas en niños) del Caisame, Óscar Zúñiga Partida, señaló que el personal médico y psicólogos cuidan 100% la integridad de los niños, y si alguna ocasión se considera que no es prudente que un menor esté internado, mejor se manda a su casa. Sin embargo, muchos de los pequeños llegan con pensamientos suicidas y es mejor mantenerlos en observación.
En un recorrido, en el área de UCI se encontraban adultos en algún tipo de terapia, pero también estaba presente un niño, con la supervisión de una psicóloga, quien lo interrogaba.
Las áreas comunes, como el comedor o espacios al aire libre, sí pueden compartirse por hombres y mujeres, porque provoca que el paciente sociabilice y aprenda a convivir y respetar a sus compañeros pacientes.
—¿Sí se viola la norma o no?
—Si así lo quiere decir, sí, por falta de infraestructura, y porque el hospital así se creó desde un inicio; el proyecto inició, pero quedó trunco por falta de dinero. Quedó el proyecto a la mitad, la administración anterior no hizo ninguna gestión.
—¿Si un niño convive con un adulto enfermo mental, no se contamina?
—En términos emocionales no, porque los pacientes que ingresan, tenemos criterios de internamiento, entre depresión, ansiedad o trastorno bipolar, difícilmente recibimos gente con esquizofrenia, esos se van a Caisame de Estancia Prolongada.
Urge aterrizar dos proyectos
Para que los niños no convivan en un área con adultos, la única forma de impedirlo es seguir gestionando el proyecto de un área de atención exclusiva para niños y adolescentes, así como la ampliación y remodelación del Caisame, de lo cual ya se cuenta con los proyectos ejecutivos. Para realizar ambos, se necesitarían de 25 a 30 millones de pesos, subrayó Valle Ochoa.
Parte del objetivo de la remodelación tiene que ver con que los enfermos hombres deben estar separados de las mujeres, además de la construcción de consultorios para que los psiquiatras y psicólogos tengan un espacio para otorgar sus consultas de manera más privada.
También tendría un salón de usos múltiples, jardines y área de visitas.
Normalmente, el índice ocupacional en camas del Caisame es de 80 por ciento.
El segundo proyecto consiste en crear una unidad de niños y adolescentes, con una capacidad de 20 camas (10 para niños y 10 para niñas), y se gestionó al ver el incremento en la demanda de atención hospitalaria en niños y adolescentes.
Para saber
De mayo de 2008 a la fecha se han tenido alrededor de 150 internamientos de niños y adolescentes, siendo las patologías más frecuentes los trastornos de conducta y depresión con intento suicida.
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