Jalisco

Reclaman plan preventivo para baches en Guadalajara

El Ayuntamiento destina 15 millones de pesos para que las cuadrillas tapen los hoyos en calles tapatías durante 2012

GUADALAJARA, JALISCO (14/JUL/2012).- La llegada de las lluvias es vista con reservas en las ciudades, sobre todo para quienes circulan en bicicleta, motocicleta, automóvil… Todos los años es lo mismo. Autoridades rebasadas por las lluvias, cuadrillas de bacheo insuficientes y hasta ciudadanos que, a manera de protesta, lo toman como una forma de intervenir artísticamente. Todo por los baches.

En febrero pasado, el alcalde interino de Guadalajara, Francisco Ayón, informó que para este año se cuenta con 15 millones de pesos para el programa de bacheo para este municipio. El director de Servicios Municipales del Ayuntamiento tapatío, Bernardo Gutiérrez, confirmó que durante la temporada de lluvias la carpeta asfáltica se ve dañada, principalmente en la zona de Oblatos, Olímpica y Cruz de Sur.

Sin embargo, de acuerdo con sus estadísticas, la repavimentación de calles primarias hecha por la actual administración ha logrado reducir hasta en 40% los baches en la ciudad. “En el 2010 había una cuadrilla a la semana en la Avenida Washington, pasamos 56 veces por ahí. Hoy esa avenida está repavimentada y las cuadrillas nos las llevamos a vialidades secundarias o calles en colonias en específico”.

En lo que va de 2012, el Ayuntamiento tapatío ha tapado 58 mil 262 hoyos en el pavimento, lo que representa 82 mil 580 metros cuadrados, siendo los meses de junio, julio, agosto y septiembre los que, históricamente, marcan lo que denominamos como temporada de baches.

Pero para Édgar Vallín, miembro del colectivo “Adopta un Bache”, la estrategia del Ayuntamiento es correctiva y no es la más eficaz. “Nos cuesta de nuestros impuestos y no soluciona el problema que tenemos, por eso los baches existen y siguen aquí. No se ha podido implementar un plan preventivo que en realidad solucione el problema”.

Vallín explica que el trabajo del Ayuntamiento se limita al “calavereo”. “Es ir a llevar material soluble al bache, taparlo, que dure un mes o dos, y se vuelva a destapar, en lugar de hacer un reencarpetado de forma correcta para poder, no solamente evitar que el bache nazca, sino que se prevenga que surja nuevamente”.

Critican uso de crédito para reencarpetado

Pese al crédito por mil 100 millones de pesos que solicitó el otrora alcalde tapatío (hoy gobernador electo) Aristóteles Sandoval Díaz, para repavimentar ciertas arterias de la metrópoli, algunas calles de Guadalajara son “intransitables” y el crecimiento de este padecer es “incontrolable”.

Para Édgar Vallín tal descontrol nace desde que el monto solicitado se destinó a avenidas “clave”, en el marco de los Juegos Panamericanos y se desatendieron calles de paso constante, en otras colonias.

“Guadalajara no sólo son avenidas vistosas”, lamenta el miembro del colectivo “Adopta un Bache”, a la par que invita al Ayuntamiento al diálogo debido a que el colectivo ha adquirido experiencia luego de discutir ideas con contratistas que trabajan para la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, y quienes a su vez, asegura, les han explicado que la millonaria inversión pudo haber tenido un mejor cauce.

Con mil 100 millones de pesos, dice, podrían haberse adquirido al menos tres máquinas “de las que trabajan en Londres”, y que aseguran un bacheo exitoso, y garantizado hasta por dos años. Ello habría incidido en una inversión “recuperable”, a razón de que los trabajos de bacheo no tendrían la misma constancia.

En lugar de eso, lamenta que la calidad de las calles tapatías sea tal, que requieran activarse las cuadrillas y sugiere asesoría ciudadana hacia la autoridad.

HOYOS TAPADOS
Calles de Guadalajara

2012

(hasta el 13 de julio)

58 mil 262 baches tapados en 82 mil 580 metros cuadrados.

2011: 144 mil 391.

2010:
185 mil.

2009:
Sin dato.

2008:
220 mil 220.

ZONAS CONFLICTIVAS

Oblatos, Olímpica y Cruz del Sur.

CUADRANTE CRÍTICO


Norte: Circunvalación Oblatos.

Sur: Avenida Revolución.

Poniente: Calzada Independencia.

Oriente: Avenida Malecón.

FUENTE:
Dirección de Servicios Públicos Municipales.

CRÓNICA
Concreto vapuleado


Mirar de frente y con atención, por el parabrisas, resulta insuficiente. Inevitablemente las llantas entrarán en uno, dos o muchos más de los inmensos baches de la Perla Tapatía.

Da igual si es una calle privada o una avenida concurrida. El constante paso de las moles de acero y el agua del temporal alimentan las cada vez más grandes fracturas de la carpeta de rodamiento.

La llave entra en la ranura de encendido y el motor del auto ruge, aunque con miedo, por el futuro incierto que le depara a su suspensión. El recorrido inicial sobre la Calzada Lázaro Cárdenas, desde la calle Roble y rumbo a la Carretera a Chapala, es relativamente simple sobre la —no obstante, imperfecta— llamada “vía rápida”.

El destino: Fuelle. Es una de las vialidades que mayores reportes por mal estado recibe este medio, y que a decir de los lectores, requiere intervención inmediata. El panorama al acercarse a esa calle involucra a no pocos vehículos de carga, y el acostumbrado paso de unidades del transporte público.

“Por eso están las calles como están”, expone un empleado de una refresquera próxima al lugar, quien pide no ventilar su nombre. Desde su óptica, el actuar de las autoridades en ese sitio es ineficiente, pues al ser paso obligado de tráileres de carga, el asfalto constantemente se estropeará, lo que “les traería a vuelta y vuelta”: una tarea poco atractiva, asegura, para quienes se hallan en la función pública.

El recorrido es, ciertamente, accidentado. Los que antes eran baches hoy tienen condición de pozos que demandan pericia a los conductores.

Tráfico constante, semáforos en rojo a cada calle recorrida, accidentes ocasionales, patrullas o ambulancias que demandan paso inmediato al hacer sonar sus sirenas, son parte del obligado padecer diario del automovilista metropolitano. Pero es el temporal de lluvias y los baches que éste provoca son lo que, indudablemente, mayor molestia genera al ciudadano.

1, 2, 3
Para reclamar


Reunir todas las pruebas posibles (fotografías, video, testigos y presupuesto del daño).

Acudir a la sindicatura municipal, cuya demanda vaya dirigida al Ayuntamiento y a la Dirección de Obras Públicas del Municipio.

Presentar la demanda con una credencial de elector antes de 15 días de pasado el suceso.

Cobra daños a su auto
“Yo le gané al Ayuntamiento”

Luis Ernesto Magno es la prueba de que, con paciencia, las pruebas más difíciles se pueden volver fáciles y chuscas. Él es uno de los pocos ciudadanos que, a causa de los baches, demandó al Ayuntamiento de Guadalajara para que le pagara. Dieciocho meses después del percance, recibió su cheque por 12 mil pesos: “Si los ciudadanos permitimos que sean indulgentes, y no hacemos nada al respecto, nos van a seguir viendo la cara”.

Abogado de profesión, este trabajador de la Universidad de Guadalajara cuenta que en septiembre de 2009 circulaba por Avenida Vallarta y, al dar vuelta a la derecha por Simón Bolívar “cayó” en un hoyo.

Pasaron 18 meses para que el ayuntamiento le liberara un cheque por la cantidad solicitada, el deducible de impuesto del total de la compostura. “Cuando te basas en la ley de responsabilidad patrimonial y te pones en la postura de que sufres un daño por un servicio mal dado, como son las calles del municipio, pues es difícil que pierdas”.

¿Qué hizo Luis para ganar? Esperar y no tolerar “Si todos tiráramos la toalla sería una posición muy cómoda para el Gobierno”. Ahora, su caso, cree que es arquetípico, “para que se pueda meter presión y vea el Gobierno que le puede salir muy caro, si no arreglan las calles”.

CLAVES
El método eficaz


El secretario de la Academia de Vías Terrestres del Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías (CUCEI), de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Jaime Ramírez Huaracha, explica paso por paso el método más certero para asegurar que las labores de bacheo no tengan réplica en, al menos, un año.

1 Delimitar la zona dañada, recortando toda el área hundida y verificar que se incide en todo el bache.

2 Proteger la zona con señalamiento visible para evitar percances con vehículos motorizados, ciclistas o peatones.

3
Recortar el asfalto deteriorado y escarificar la zona.

4 Retirar todo el material de consistencia inapropiada, cuidando que tampoco haya humedad.

5 Evitar implementar estas acciones cuando llueve o hay encharcamientos próximos; en caso de que así suceda, esperar a que el área se ventile.

6 Si hay tuberías cerca, verificar que no haya fugas de agua. En caso de que así sea, reportarlas para que se reparen de inmediato, pues ello impediría éxito en el bacheo.

7 Rellenar el hueco que quedó con arena apropiada, grava y un poco de cal, de ser necesario.

8 Compactar el terreno para que el material de reposición tome una consistencia similar al encarpetado.

9 Vaciar el asfalto caliente y verificar que éste se halle a nivel exacto, para que permita continuidad con la superficie de rodamiento.

10 El asfalto debe aplicarse cuando se halla caliente, aunque también hay aditivos especiales que permiten colocarlo en frío.

LOS 10*
Dónde está el más grande


Fuelle y Lázaro Cárdenas.

Chapultepec de Montenegro hasta Hidalgo.

La calle 32 e Industria.

La calle 2 entre calle 13 y el camino a Siderúrgica.

Inglaterra, atrás de la aceitera.

Colón y Natividad Macías.

Avenida Patria y 8 de Julio.

Juan Manuel entre Enrique Díaz y Federalismo.

Corregidora entre Pensador Mexicano y Avenida Revolución.

Aldama, entre la 50 y la 60.

*Denuncias de lectores, vía Facebook y Twitter.

"ADOPTA UN BACHE"
¿Cómo nace el colectivo?


Luego de que un ciclista se accidentara por causa de un bache que se hallaba en la calle Mexicaltzingo, en su cruce con las calles Rayón y Escorza, y que le costó miles de pesos en hospitalización al lastimarse la clavícula, varios de sus amigos se unieron e implementaron un método de crítica que involucraba “adornar” los baches, para que éstos tuvieran distinción en las calles, y así evitar accidentes tanto para automovilistas, como ciclistas y peatones, y reducir la probabilidad de caer en ellos.

A raíz de su nacimiento, el movimiento “Adopta un Bache” ha ganado fuerza y ha tenido presencia en la Ciudad de México e incluso se ha aliado con un colectivo similar que existe en Puerto Rico y Perú, donde “nació una hermandad” con los “Baches Abiertos de América Latina”.
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