Jalisco
Rebasada, unidad para indigentes
El albergue a cargo del IJAS tiene que adecuar espacios para recibir a personas en condición de calle
GUADALAJARA, JALISCO (25/DIC/2013).- Como cada invierto, la Unidad Asistencial para Indigentes (UAPI) es rebasada al recibir a más personas de las que tiene capacidad para atender, y para ello hacen uso de colchones, colchonetas y catres en los espacios que aún tienen disponibles.
El albergue, a cargo del Instituto Jalisciense de Asistencia Social ( IJAS), cuenta con 198 camas fijas que se ocupan casi al iniciar diciembre, después, tienen que adecuar otros espacios para recibir a personas en condición de calle que no tienen manera de resguardarse del frío ni de alimentarse adecuadamente.
Pero con todo y que la UAPI no tiene la capacidad para ofrecer lo mismo a todos, tampoco puede rechazar a los solicitantes dado que es una obligación del estado responder por este tipo de personas y procurar que acceda a alimentos y servicios de salud. De hecho, por negar el acceso a un indigente en 2011 la Comisión Estatal de Derechos Humanos le emitió una recomendación.
El problema de la falta de espacio en este albergue radica en que hay más ingresos que egresos, pues hay personas enfermas y sin familia que no tienen a donde ir, y dado que la UAPI abre permanentemente, se quedan de manera indeterminada.
"El 65% de los que ingresamos tiene problemas mentales, el resto no tiene e ingresa y está uno o dos días y se van porque trabajan limpiando vidrios, o barren. Los otros con su daño mental se quedan por mucho más tiempo y varía, desde dos meses, tres hasta un año hasta que mejora su condición física", explica el director del lugar, Arturo Sánchez Tejeda.
"Cuando ingresan indigentes con problemas psiquiátricos le pedimos apoyo al hospital psiquiátrico de Jalisco, cuando pueden, nos los admiten, cuando no se quedan ahí con nosotros. Como el 80 o 90% de personas que se quedan por su daño mental con nosotros deberían ser internados en los hospitales siquiátricos de Jalisco, pero la capacidad de esos también ya rebasó", lamenta.
La UAPI se encuentra en la calle Emilio Rabasa 1675, entre las calles 50 y 52, en la colonia Talpita de Guadalajara, y opera desde 1980.
Por su parte, el director del IJAS, Gabriel González Delgadillo, reconoce la deficiencia de espacio, pues la capacidad del albergue es para 198 personas acomodadas debidamente en camas y calcula que sólo en el Centro de Guadalajara y alrededores, hay aproximadamente 250 indigentes que necesitan los servicios.
EL INFORMADOR / VIOLETA MELÉNDEZ
El albergue, a cargo del Instituto Jalisciense de Asistencia Social ( IJAS), cuenta con 198 camas fijas que se ocupan casi al iniciar diciembre, después, tienen que adecuar otros espacios para recibir a personas en condición de calle que no tienen manera de resguardarse del frío ni de alimentarse adecuadamente.
Pero con todo y que la UAPI no tiene la capacidad para ofrecer lo mismo a todos, tampoco puede rechazar a los solicitantes dado que es una obligación del estado responder por este tipo de personas y procurar que acceda a alimentos y servicios de salud. De hecho, por negar el acceso a un indigente en 2011 la Comisión Estatal de Derechos Humanos le emitió una recomendación.
El problema de la falta de espacio en este albergue radica en que hay más ingresos que egresos, pues hay personas enfermas y sin familia que no tienen a donde ir, y dado que la UAPI abre permanentemente, se quedan de manera indeterminada.
"El 65% de los que ingresamos tiene problemas mentales, el resto no tiene e ingresa y está uno o dos días y se van porque trabajan limpiando vidrios, o barren. Los otros con su daño mental se quedan por mucho más tiempo y varía, desde dos meses, tres hasta un año hasta que mejora su condición física", explica el director del lugar, Arturo Sánchez Tejeda.
"Cuando ingresan indigentes con problemas psiquiátricos le pedimos apoyo al hospital psiquiátrico de Jalisco, cuando pueden, nos los admiten, cuando no se quedan ahí con nosotros. Como el 80 o 90% de personas que se quedan por su daño mental con nosotros deberían ser internados en los hospitales siquiátricos de Jalisco, pero la capacidad de esos también ya rebasó", lamenta.
La UAPI se encuentra en la calle Emilio Rabasa 1675, entre las calles 50 y 52, en la colonia Talpita de Guadalajara, y opera desde 1980.
Por su parte, el director del IJAS, Gabriel González Delgadillo, reconoce la deficiencia de espacio, pues la capacidad del albergue es para 198 personas acomodadas debidamente en camas y calcula que sólo en el Centro de Guadalajara y alrededores, hay aproximadamente 250 indigentes que necesitan los servicios.
EL INFORMADOR / VIOLETA MELÉNDEZ
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