Jalisco
Precursores químicos, a la mano de narcolaboratorios
En la Aduana de Guadalajara se han detectado cargamentos de drogas que salieron desde Singapur con destino a Juanacatlán
GUADALAJARA, JALISCO (02/ENE/2012).- En 2011, los puertos de Lázaro Cárdenas, Michoacán, y de Manzanillo, Colima, ambos cercanos a Jalisco, se consolidaron como los dos puntos de introducción más importantes de precursores químicos al país, una sustancia base para la industria de las drogas sintéticas que se ha alojado principalmente en las entidades del Pacífico.
Ambos concentran cerca de 90% del volumen de precursores químicos que pudieron ser detectados por las aduanas del país, según los registros que proporciona el Servicio de Administración Tributaria (SAT). Por ello, ambos puertos se reconocen como piezas clave para sostener la producción de drogas sintéticas localizada básicamente en una triada de entidades de Sinaloa, Jalisco y Michoacán, de acuerdo con informes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
En el caso particular de Jalisco, las autoridades estadounidenses han advertido que su cercanía con el Puerto de Manzanillo, a sólo 120 kilómetros de distancia uno de otro, y comunicados mediante una desarrollada infraestructura carretera, está representando un factor fundamental para nutrir de los compuestos químicos a los narcolaboratorios del Estado dedicados principalmente a la síntesis de metanfetaminas.
Sólo en el Puerto de Manzanillo el SAT reporta 23% de todos los precursores químicos de los que pudo saber en su llegada al país, lo que hace, por lo tanto, al de Lázaro Cárdenas (a 500 kilómetros de Guadalajara), en Michoacán, la gran puerta a nivel nacional para el arribo del insumo, con 67% de todas las sustancias embargadas por el Gobierno federal y las cuales ascendieron a las mil 200 toneladas en 2011 a lo largo del territorio mexicano.
De todas las aduanas donde se dieron “detecciones relevantes” en 2011 (así clasifica el SAT el embargo de mercancía cuando se trata de drogas, arma o dinero), la de Guadalajara es la que arroja los números más pobres tratándose de estas sustancias para la fabricación de drogas de laboratorio, con sólo .061 toneladas (61 kilógramos), junto a la de Cancún, y sus 20 pastillas aseguradas.
Los hallazgos en la Aduana de Guadalajara se dieron con cargamentos que provenían de Bangladesh, que junto a la India, se encuentra entre los productores de precursores más importantes a nivel internacional, según el Informe Mundial sobre las Drogas 2011, de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés).
Y otros que tenían como origen a Dubai, Emiratos Árabes Unidos y Guangzhou, China (ambos con dirección a la capital de Jalisco), además de Singapur, al otro lado del mundo, desde donde había salido un cargamento que tenía como destino el Municipio de Juanacatlán.
En este municipio hay un antecedente importante, pues fue ahí donde la Secretaría de Seguridad Pública de Jalisco desmanteló el 7 de agosto de 2008 el narcolaboratorio que considera, hasta ahora, el más grande en el Estado por su capacidad de producción y donde se encontraron con cinco toneladas de químicos para la elaboración de drogas sintéticas.
La UNODC advierte en su informe global sobre el aprovechamiento que están haciendo las organizaciones criminales de la transportación marítima, y la necesidad de ajustar a estas exigencias los controles portuarios que podrían irse volviendo cada vez más incapaces de detener el flujo de este tipo de sustancias:
“La eliminación de las barreras comerciales en muchas partes del mundo no sólo ha facilitado el traslado de bienes ilícitos, también ha dado lugar a una interacción más estrecha entre organizaciones criminales de diferentes lugares y culturas. En el año de 2009, muchas fronteras de los países se volvieron más translúcidas debido a los acuerdos internacionales de comercio”.
Y añade: “En particular, el uso de la transportación marítima y los puertos por parte de los traficantes ha sido identificado como una amenaza clave emergente. Los traficantes están capitalizando el incremento global del comercio a través de rutas marítimas. En 2009 sólo una diminuta fracción de los más de 400 millones de contenedores que fueron embarcados en todo el mundo fueron inspeccionados. Hay indicios de que los traficantes de drogas están utilizando la transportación marítima con mucha más intensidad de lo que actualmente se piensa. El tráfico de drogas a través de los puertos marítimos internacionales debe ser estudiado con mayor profundidad, junto al establecimiento de mecanismos de monitoreo y control”.
El flujo de mercancías en el Puerto de Manzanillo es de tal magnitud que sólo de enero a octubre de 2011 repo rta el movimiento de un millón 458 mil 912 contenedores, y de mil 545 buques; el de Lázaro Cárdenas, por su parte, informa hasta el mes de julio de 500 mil 718 contenedores y 970 buques.
El 2% de los precursores que se intentaron ingresar al país, pero no por los puertos de Lázaro Cárdenas y Manzanillo, se difumina en las aduanas (además de la de Guadalajara y Cancún) de Ensenada, Baja California, con 65 toneladas; Ciudad Hidalgo, en Chiapas y frontera con Guatemala, con 43.8 toneladas; Veracruz, con 22 toneladas, y el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, con 5.1 toneladas.
Con las mil 200 toneladas embargadas de precursores químicos por las aduanas de México, provenientes primordialmente de países asiáticos como China y Corea del Sur, podrían haberse producido alrededor de 798 toneladas de metanfetaminas, siguiendo estimaciones de la UNODC.
FRASE
"El uso de la transportación marítima y los puertos por parte de los traficantes ha sido identificado como una amenaza clave emergente. Los traficantes están capitalizando el incremento global del comercio a través de rutas marítimas"
Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.
DATO
El embargo
Mil 200 toneladas embargadas de precursores químicos por las aduanas de México, provenientes primordialmente de países asiáticos, como China y Corea del Sur.
PARA SABER
Flujo en Manzanillo
El flujo de mercancías en el Puerto de Manzanillo es de tal magnitud que sólo de enero a octubre de 2011 se reportó el movimiento de un millón 458 mil 912 contenedores y de mil 545 buques.
REGISTRO NACIONAL
Sinaloa y Jalisco encabezan aseguramientos
La triada de las entidades que componen Sinaloa, Jalisco y Michoacán, en el Pacífico mexicano, concentran 91% de todos los narcolaboratorios detectados y desmantelados por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a través de las labores de vigilancia que implementa en todo el territorio del país.
Así lo demuestran las cifras que presenta en el documento “Logros obtenidos por el Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos en el combate al Narcotráfico y la Delincuencia Organizada durante 2011”, donde la Sedena informa haber desactivado 192 de estos laboratorios para la producción de drogas sintéticas, metanfetaminas básicamente.
El Estado cuyos números demuestran la mayor industria de droga sintética es Sinaloa, donde se encontraron 77 de estos centros en el transcurso del año y que representa 40% de todos los hallados a nivel nacional, seguido por Jalisco, con 63 laboratorios o 33% de los mismos, y en tercer lugar está Michoacán, con 34 puntos de producción o 17% de todo el país.
Como se informó desde el 21 de noviembre en este diario, a la cantidad de laboratorios en Jalisco puestos fuera de operación por la Sedena, deben sumarse otros seis de estos en los que intervino la Secretaría de Seguridad Pública, Prevención y Readaptación Social y la Armada de México (Secretaría de Marina).
Jalisco, por lo tanto, termina el año con 69 de estas instalaciones que requieren inversiones que van de los cuatro a los siete millones de pesos, con una capacidad para sintetizar entre 15 y 20 kilogramos de metanfetaminas cada semana (un kilogramo de metanfetamina puede costearse en 15 mil dólares en los Estados Unidos).
Antes de 2007, ninguna autoridad tiene registros de la existencia de narcolaboratorios en Jalisco, así lo demuestran los archivos de la Sedena, la Armada y le Secretaría de Seguridad estatal de la última década, antes de ese punto de inflexión el rol que jugaba la Entidad en la producción de drogas ilegales estaba enfocada en la marihuana y, en una mucho menor medida, en la amapola.
Advertencia
El 6 de abril de 2011, durante la XXVIII Conferencia Internacional para el Control de las Drogas (IDEC), el titular de la Secretaría de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, advertía sobre el incremento en la generación de este tipo de drogas sintéticas:
“El auge de las anfetaminas (a este grupo pertenecen las metanfetaminas) y sus derivados impone nuevos retos para la comunidad internacional, pues sus rutas son más cortas y la materia prima necesaria para su producción es, en muchos casos, legal y de fácil acceso”, y agregaba desde una perspectiva internacional: “A pesar de que, por sus métodos de producción, es más difícil realizar estimaciones sobre el mercado de anfetaminas, se calcula que, hace apenas un par de años, se produjeron más de 160 toneladas, con un número de consumidores que, en su rango más alto, se estima cercano a los 53 millones de personas”.
Geografía y localización
La accesibilidad a los insumos químicos para la producción de drogas sintéticas de la que habla García Luna, en el caso de Jalisco se combina con otros factores y condiciones particulares que favorecen esta industria legal y que han sido señalados antes por el Consulado General de los Estados Unidos en Guadalajara:
Su geografía y localización, con extensas zonas rurales donde se vuelve complejo la detección de los laboratorios y su cercanía con el Puerto de Manzanillo que, como ya se vio, es el segundo acceso más importante de precursores químicos a nivel nacional; el nivel de desarrollo de su infraestructura, con una red carretera que beneficia la transportación de los compuestos químicos que desembarcan en aquel puerto de Colima y el Aeropuerto Internacional “Miguel Hidalgo”, en el cual, sin embargo, la detección de dichas sustancias ha sido mínima; y el personal capacitado, pues reconoce que las organizaciones criminales pueden integrar a jóvenes profesionistas químicos e ingenieros que se forman en el Estado.
Entre las conclusiones de aquella XXVIII Conferencia Internacional para el Control de las Drogas, en la que participaron representantes de más de 100 países y presidida por México, García Luna informaba que se había llegado a un “acuerdo progresivo para homologar las legislaciones relativas al control de precursores químicos, al tiempo que también se plantea fortalecer las disposiciones que permitan una eficaz confiscación de recursos al crimen organizado”.
Todo ello, acotaba, porque “una preocupación general es el avance de las drogas sintéticas, tomando en cuenta las facilidades para su producción y distribución”.
Los puertos de Lázaro Cárdenas, en Michoacán, y de Manzanillo, en Colima, concentran 90% del volumen de precursores embargados por el Gobierno federal para impedir su uso en la producción de drogas sintéticas
Ambos concentran cerca de 90% del volumen de precursores químicos que pudieron ser detectados por las aduanas del país, según los registros que proporciona el Servicio de Administración Tributaria (SAT). Por ello, ambos puertos se reconocen como piezas clave para sostener la producción de drogas sintéticas localizada básicamente en una triada de entidades de Sinaloa, Jalisco y Michoacán, de acuerdo con informes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
En el caso particular de Jalisco, las autoridades estadounidenses han advertido que su cercanía con el Puerto de Manzanillo, a sólo 120 kilómetros de distancia uno de otro, y comunicados mediante una desarrollada infraestructura carretera, está representando un factor fundamental para nutrir de los compuestos químicos a los narcolaboratorios del Estado dedicados principalmente a la síntesis de metanfetaminas.
Sólo en el Puerto de Manzanillo el SAT reporta 23% de todos los precursores químicos de los que pudo saber en su llegada al país, lo que hace, por lo tanto, al de Lázaro Cárdenas (a 500 kilómetros de Guadalajara), en Michoacán, la gran puerta a nivel nacional para el arribo del insumo, con 67% de todas las sustancias embargadas por el Gobierno federal y las cuales ascendieron a las mil 200 toneladas en 2011 a lo largo del territorio mexicano.
De todas las aduanas donde se dieron “detecciones relevantes” en 2011 (así clasifica el SAT el embargo de mercancía cuando se trata de drogas, arma o dinero), la de Guadalajara es la que arroja los números más pobres tratándose de estas sustancias para la fabricación de drogas de laboratorio, con sólo .061 toneladas (61 kilógramos), junto a la de Cancún, y sus 20 pastillas aseguradas.
Los hallazgos en la Aduana de Guadalajara se dieron con cargamentos que provenían de Bangladesh, que junto a la India, se encuentra entre los productores de precursores más importantes a nivel internacional, según el Informe Mundial sobre las Drogas 2011, de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés).
Y otros que tenían como origen a Dubai, Emiratos Árabes Unidos y Guangzhou, China (ambos con dirección a la capital de Jalisco), además de Singapur, al otro lado del mundo, desde donde había salido un cargamento que tenía como destino el Municipio de Juanacatlán.
En este municipio hay un antecedente importante, pues fue ahí donde la Secretaría de Seguridad Pública de Jalisco desmanteló el 7 de agosto de 2008 el narcolaboratorio que considera, hasta ahora, el más grande en el Estado por su capacidad de producción y donde se encontraron con cinco toneladas de químicos para la elaboración de drogas sintéticas.
La UNODC advierte en su informe global sobre el aprovechamiento que están haciendo las organizaciones criminales de la transportación marítima, y la necesidad de ajustar a estas exigencias los controles portuarios que podrían irse volviendo cada vez más incapaces de detener el flujo de este tipo de sustancias:
“La eliminación de las barreras comerciales en muchas partes del mundo no sólo ha facilitado el traslado de bienes ilícitos, también ha dado lugar a una interacción más estrecha entre organizaciones criminales de diferentes lugares y culturas. En el año de 2009, muchas fronteras de los países se volvieron más translúcidas debido a los acuerdos internacionales de comercio”.
Y añade: “En particular, el uso de la transportación marítima y los puertos por parte de los traficantes ha sido identificado como una amenaza clave emergente. Los traficantes están capitalizando el incremento global del comercio a través de rutas marítimas. En 2009 sólo una diminuta fracción de los más de 400 millones de contenedores que fueron embarcados en todo el mundo fueron inspeccionados. Hay indicios de que los traficantes de drogas están utilizando la transportación marítima con mucha más intensidad de lo que actualmente se piensa. El tráfico de drogas a través de los puertos marítimos internacionales debe ser estudiado con mayor profundidad, junto al establecimiento de mecanismos de monitoreo y control”.
El flujo de mercancías en el Puerto de Manzanillo es de tal magnitud que sólo de enero a octubre de 2011 repo rta el movimiento de un millón 458 mil 912 contenedores, y de mil 545 buques; el de Lázaro Cárdenas, por su parte, informa hasta el mes de julio de 500 mil 718 contenedores y 970 buques.
El 2% de los precursores que se intentaron ingresar al país, pero no por los puertos de Lázaro Cárdenas y Manzanillo, se difumina en las aduanas (además de la de Guadalajara y Cancún) de Ensenada, Baja California, con 65 toneladas; Ciudad Hidalgo, en Chiapas y frontera con Guatemala, con 43.8 toneladas; Veracruz, con 22 toneladas, y el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, con 5.1 toneladas.
Con las mil 200 toneladas embargadas de precursores químicos por las aduanas de México, provenientes primordialmente de países asiáticos como China y Corea del Sur, podrían haberse producido alrededor de 798 toneladas de metanfetaminas, siguiendo estimaciones de la UNODC.
FRASE
"El uso de la transportación marítima y los puertos por parte de los traficantes ha sido identificado como una amenaza clave emergente. Los traficantes están capitalizando el incremento global del comercio a través de rutas marítimas"
Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.
DATO
El embargo
Mil 200 toneladas embargadas de precursores químicos por las aduanas de México, provenientes primordialmente de países asiáticos, como China y Corea del Sur.
PARA SABER
Flujo en Manzanillo
El flujo de mercancías en el Puerto de Manzanillo es de tal magnitud que sólo de enero a octubre de 2011 se reportó el movimiento de un millón 458 mil 912 contenedores y de mil 545 buques.
REGISTRO NACIONAL
Sinaloa y Jalisco encabezan aseguramientos
La triada de las entidades que componen Sinaloa, Jalisco y Michoacán, en el Pacífico mexicano, concentran 91% de todos los narcolaboratorios detectados y desmantelados por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a través de las labores de vigilancia que implementa en todo el territorio del país.
Así lo demuestran las cifras que presenta en el documento “Logros obtenidos por el Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos en el combate al Narcotráfico y la Delincuencia Organizada durante 2011”, donde la Sedena informa haber desactivado 192 de estos laboratorios para la producción de drogas sintéticas, metanfetaminas básicamente.
El Estado cuyos números demuestran la mayor industria de droga sintética es Sinaloa, donde se encontraron 77 de estos centros en el transcurso del año y que representa 40% de todos los hallados a nivel nacional, seguido por Jalisco, con 63 laboratorios o 33% de los mismos, y en tercer lugar está Michoacán, con 34 puntos de producción o 17% de todo el país.
Como se informó desde el 21 de noviembre en este diario, a la cantidad de laboratorios en Jalisco puestos fuera de operación por la Sedena, deben sumarse otros seis de estos en los que intervino la Secretaría de Seguridad Pública, Prevención y Readaptación Social y la Armada de México (Secretaría de Marina).
Jalisco, por lo tanto, termina el año con 69 de estas instalaciones que requieren inversiones que van de los cuatro a los siete millones de pesos, con una capacidad para sintetizar entre 15 y 20 kilogramos de metanfetaminas cada semana (un kilogramo de metanfetamina puede costearse en 15 mil dólares en los Estados Unidos).
Antes de 2007, ninguna autoridad tiene registros de la existencia de narcolaboratorios en Jalisco, así lo demuestran los archivos de la Sedena, la Armada y le Secretaría de Seguridad estatal de la última década, antes de ese punto de inflexión el rol que jugaba la Entidad en la producción de drogas ilegales estaba enfocada en la marihuana y, en una mucho menor medida, en la amapola.
Advertencia
El 6 de abril de 2011, durante la XXVIII Conferencia Internacional para el Control de las Drogas (IDEC), el titular de la Secretaría de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, advertía sobre el incremento en la generación de este tipo de drogas sintéticas:
“El auge de las anfetaminas (a este grupo pertenecen las metanfetaminas) y sus derivados impone nuevos retos para la comunidad internacional, pues sus rutas son más cortas y la materia prima necesaria para su producción es, en muchos casos, legal y de fácil acceso”, y agregaba desde una perspectiva internacional: “A pesar de que, por sus métodos de producción, es más difícil realizar estimaciones sobre el mercado de anfetaminas, se calcula que, hace apenas un par de años, se produjeron más de 160 toneladas, con un número de consumidores que, en su rango más alto, se estima cercano a los 53 millones de personas”.
Geografía y localización
La accesibilidad a los insumos químicos para la producción de drogas sintéticas de la que habla García Luna, en el caso de Jalisco se combina con otros factores y condiciones particulares que favorecen esta industria legal y que han sido señalados antes por el Consulado General de los Estados Unidos en Guadalajara:
Su geografía y localización, con extensas zonas rurales donde se vuelve complejo la detección de los laboratorios y su cercanía con el Puerto de Manzanillo que, como ya se vio, es el segundo acceso más importante de precursores químicos a nivel nacional; el nivel de desarrollo de su infraestructura, con una red carretera que beneficia la transportación de los compuestos químicos que desembarcan en aquel puerto de Colima y el Aeropuerto Internacional “Miguel Hidalgo”, en el cual, sin embargo, la detección de dichas sustancias ha sido mínima; y el personal capacitado, pues reconoce que las organizaciones criminales pueden integrar a jóvenes profesionistas químicos e ingenieros que se forman en el Estado.
Entre las conclusiones de aquella XXVIII Conferencia Internacional para el Control de las Drogas, en la que participaron representantes de más de 100 países y presidida por México, García Luna informaba que se había llegado a un “acuerdo progresivo para homologar las legislaciones relativas al control de precursores químicos, al tiempo que también se plantea fortalecer las disposiciones que permitan una eficaz confiscación de recursos al crimen organizado”.
Todo ello, acotaba, porque “una preocupación general es el avance de las drogas sintéticas, tomando en cuenta las facilidades para su producción y distribución”.
Los puertos de Lázaro Cárdenas, en Michoacán, y de Manzanillo, en Colima, concentran 90% del volumen de precursores embargados por el Gobierno federal para impedir su uso en la producción de drogas sintéticas
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