Jalisco

Policías y vecinos, en quienes menos confían los adolescentes

La encuesta se aplicó a más de 2.4 millones de niños, niñas y adolescentes de entre seis y 15 años de edad, quienes coinciden en tener mayor confianza en la familia y los maestros

GUADALAJARA, JALISCO (17/JUL/2012).- Los menores de edad desconfían más de sus vecinos y policías, de acuerdo con la Consulta Infantil y Juvenil 2012, realizada por el Instituto Federal Electoral (IFE).

La encuesta se aplicó a más de 2.4 millones de niños, niñas y adolescentes de entre seis y 15 años de edad, quienes coinciden en tener mayor confianza en la familia y los maestros.

“La familia es quien inspira más confianza, seguida por las maestras y los maestros. En general, la confianza en todos los actores va disminuyendo con la edad, con excepción de la familia, que se mantiene estable, y de las amistades, la cual crece en la adolescencia. En un análisis por sexo, en general, las niñas confían menos en los vecinos y en el Ejército, respecto de la confianza manifestada por los niños”.

Juan Luis, de 13 años, tiene mala suerte para los vecinos. Hace un año vivía en una colonia en Zapopan, pero la familia decidió cambiar de residencia por los problemas ocasionados por un vecino.

“Casi todas las noches había fiesta en la casa del vecino. Antes él vivía con su esposa y tres hijos, pero se divorció y agarró la fiesta. Todas las noches había música y relajo, y hasta en varias ocasiones fue golpeado por mujeres que lo visitaban. Le gritaban que las había engañado. Por eso nos cambiamos de casa, además, mi papá no confiaba en él”.

La familia de Juan Luis se mudó a otra vivienda en Parques del Auditorio. Sin embargo, persisten los problemas. “Ahora vivimos frente a una familia bien rara. De cuatro mujeres y tres hombres adultos (además de cinco niños de menos de tres años de edad), sólo dos trabajaban… pero a ratos. El resto se la pasa en la cochera y todo el día platican y se ríen hasta muy noche. Causan muchas molestias a los demás”.

El adolescente confirma la desconfianza hacia este tipo de vecinos, pues, dice, continuamente son visitados por motociclistas, quienes les exigen pagos.

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