Jalisco
Muere escolta baleado en presunto intento de asalto
Tras la agresión que sufrió el jueves pasado, el elemento de la Policía del Estado falleció en el Centro Médico de Occidente
GUADALAJARA, JALISCO.- Tras la
agresión de la cual fue víctima la noche del jueves pasado en la intersección de la calle Juan Palomar y Arias y la Avenida Vallarta, el escolta y agente estatal, Juan Antonio Nuño Aguirre, dejó de existir ayer por la madrugada.
A tres días de haber sido atacado, la herida de bala que le asestaron en la cabeza en un presunto intento de despojarlo de una lujosa camioneta, propiedad del Gobierno del Estado, terminó por privarlo de la vida.
Los primeros reportes sobre su condición tras el atentado ya mencionaban que estaba grave, pero había logrado evadir a la muerte por tres días, mientras era atendido en el Centro Médico de Occidente (CMO).
La Procuraduría de Justicia tomó conocimiento de su deceso al filo de las 09:30 de este domingo. El oficial caído estaba asignado al área de vigilancia de Casa Jalisco y pertenecía al grupo antimotines de la Policía del Estado.
La agresión que ocasionó su deceso ocurrió cuando se encontraba en una camioneta Mercedes Benz blanca, con el matriculado JHK-8023, circulando por el fraccionamiento Monraz, de Guadalajara, cuando un número aún no determinado de individuos se acercó a él y le disparó.
De acuerdo con las primeras versiones el agente habría sido víctima de un asalto, pues fue despojado del lujoso automotor, aunque eventualmente fue recuperado.
En el lugar se aseguró una pistola .9 milímetros con 10 cartuchos útiles, así como 12 cascajos: ocho, calibre .7.65 y cuatro del calibre .9. Aparentemente repelió la agresión.
Juan Antonio recibió un tiro que, de acuerdo con paramédicos de la Cruz Roja, entró del lado frontal izquierdo y se quedó alojado en su cráneo.
Al respecto, la Procuraduría de Justicia no ha confirmado ni negado el móvil de asalto como detonante de la agresión, pero el área de Homicidios Intencionales de la fiscalía se encuentra en las pesquisas que conduzcan con los responsables de su deceso.
EL INFORMADOR / Isaack de Loza
A tres días de haber sido atacado, la herida de bala que le asestaron en la cabeza en un presunto intento de despojarlo de una lujosa camioneta, propiedad del Gobierno del Estado, terminó por privarlo de la vida.
Los primeros reportes sobre su condición tras el atentado ya mencionaban que estaba grave, pero había logrado evadir a la muerte por tres días, mientras era atendido en el Centro Médico de Occidente (CMO).
La Procuraduría de Justicia tomó conocimiento de su deceso al filo de las 09:30 de este domingo. El oficial caído estaba asignado al área de vigilancia de Casa Jalisco y pertenecía al grupo antimotines de la Policía del Estado.
La agresión que ocasionó su deceso ocurrió cuando se encontraba en una camioneta Mercedes Benz blanca, con el matriculado JHK-8023, circulando por el fraccionamiento Monraz, de Guadalajara, cuando un número aún no determinado de individuos se acercó a él y le disparó.
De acuerdo con las primeras versiones el agente habría sido víctima de un asalto, pues fue despojado del lujoso automotor, aunque eventualmente fue recuperado.
En el lugar se aseguró una pistola .9 milímetros con 10 cartuchos útiles, así como 12 cascajos: ocho, calibre .7.65 y cuatro del calibre .9. Aparentemente repelió la agresión.
Juan Antonio recibió un tiro que, de acuerdo con paramédicos de la Cruz Roja, entró del lado frontal izquierdo y se quedó alojado en su cráneo.
Al respecto, la Procuraduría de Justicia no ha confirmado ni negado el móvil de asalto como detonante de la agresión, pero el área de Homicidios Intencionales de la fiscalía se encuentra en las pesquisas que conduzcan con los responsables de su deceso.
EL INFORMADOR / Isaack de Loza
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