Jalisco
Muere “Chato”, el gorila del Zoológico Guadalajara
Hacía un mes que comenzaba a presentar problemas de salud al mostrar una parálisis tanto del brazo como de la pierna izquierda
GUADALAJARA, JALISCO.- El pasado 28 de noviembre, por la madrugada, murió uno de los animales más distintivos del Zoológico Guadalajara: llevaba por nombre “Chato”, el gorila que por décadas fuera una de las principales atracciones en el parque de la Barranca de Huentitán.
Según datos proporcionados por David Espinoza Avilés, jefe de la clínica del Zoológico Guadalajara, hacía un mes que “Chato” comenzaba a presentar problemas de salud al mostrar una parálisis tanto del brazo como de la pierna izquierda.
Tras elaborarle diversos estudios con el apoyo de especialistas, el resultado inicial fue isquemia transitoria, que antecede a un trombo en el cerebro del animal. Sin embargo, a pocos días de haberle iniciado una terapia de tratamiento, el gorila mejoró y recuperó su movilidad, aunque no se podía tener el diagnóstico completo, pues padecía un problema cardiovascular grave que le ocasionaba diferentes patologías cardíacas y complicaciones en diferentes órganos, como los riñones y la tiroides.
“Chato” llegó al Zoológico Guadalajara en 1989, y se le calculaba una edad aproximada de 29 años. “Nosotros lo considerábamos como un adulto mayor, en promedio un animal de éstos en cautiverio llega a vivir hasta 45 años (...) Según los registros de muertes de gorilas que se tienen, el 70% de ellos mueren a causa de patologías cardíacas, esto se debe a que el tejido del corazón se vuelve fibroso. El animal estuvo vigilado las 24 horas durante su mes de enfermedad, luchamos para sacarlo adelante, y a pesar de sus mejoras transitorias, el diagnóstico no era alentador”.
Hoy, “Chato” deja un vacío grande entre la comunidad del Zoológico Guadalajara. Queda en su lugar la que fuera su pareja, “Chencha”, y dos crías que dejó en su estancia en el parque. Se tiene contemplado adquirir un ejemplar más, aunque el asunto está en planes. Cabe señalar que se logró extraer semen del gorila y se ha pensado en inseminar con él a otra hembra.
Según datos proporcionados por David Espinoza Avilés, jefe de la clínica del Zoológico Guadalajara, hacía un mes que “Chato” comenzaba a presentar problemas de salud al mostrar una parálisis tanto del brazo como de la pierna izquierda.
Tras elaborarle diversos estudios con el apoyo de especialistas, el resultado inicial fue isquemia transitoria, que antecede a un trombo en el cerebro del animal. Sin embargo, a pocos días de haberle iniciado una terapia de tratamiento, el gorila mejoró y recuperó su movilidad, aunque no se podía tener el diagnóstico completo, pues padecía un problema cardiovascular grave que le ocasionaba diferentes patologías cardíacas y complicaciones en diferentes órganos, como los riñones y la tiroides.
“Chato” llegó al Zoológico Guadalajara en 1989, y se le calculaba una edad aproximada de 29 años. “Nosotros lo considerábamos como un adulto mayor, en promedio un animal de éstos en cautiverio llega a vivir hasta 45 años (...) Según los registros de muertes de gorilas que se tienen, el 70% de ellos mueren a causa de patologías cardíacas, esto se debe a que el tejido del corazón se vuelve fibroso. El animal estuvo vigilado las 24 horas durante su mes de enfermedad, luchamos para sacarlo adelante, y a pesar de sus mejoras transitorias, el diagnóstico no era alentador”.
Hoy, “Chato” deja un vacío grande entre la comunidad del Zoológico Guadalajara. Queda en su lugar la que fuera su pareja, “Chencha”, y dos crías que dejó en su estancia en el parque. Se tiene contemplado adquirir un ejemplar más, aunque el asunto está en planes. Cabe señalar que se logró extraer semen del gorila y se ha pensado en inseminar con él a otra hembra.
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