Jalisco
Labor militar en La Primavera ha inhibido deslaves
Según Conafor, son cerca de 10 mil las obras que a la fecha han realizado los soldados en 195 hectáreas de ese cerro, los deslaves podrían haber sido mayores
ZAPOPAN, JALISCO (07/AGO/2012).- Gracias a las obras que efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) han realizado desde el pasado 28 de mayo, desastres de mayores dimensiones a las registradas este lunes por la madrugada en la colonia Arenales Tapatíos (próxima a la reserva forestal), han sido evitadas.
De acuerdo con la Comisión Nacional Forestal (Conafor), la desatención a las secuelas del incendio que se desató el 21 de abril en el pulmón metropolitano pudo verse traducida en taludes de mayores dimensiones, toda vez que la agresión de las llamas contra el arbolado aumenta la posibilidad de que un deslizamiento se presente desde sus partes más altas.
Jesús Manuel Aldana Márquez, enlace de Producción de Planta en esa dependencia federal, explica que, gracias a la oportuna intervención del Ejército Mexicano, las lluvias del presente temporal no han provocado deslaves desde el Cerro del Nejahuete: una de las partes más altas (se halla aproximadamente 500 metros arriba de los primeros asentamientos urbanos) y afectadas por la deflagración en La Primavera.
De haber obviado la construcción de “diques” o represas de piedra, así como la habilitación de pozos en puntos estratégicos para captar ceniza (un contaminante para la ciudad, pero una fuente de potasio para la flora del bosque), los deslaves habrían llegado con fuerza desde las partes altas, a diversos puntos de San Pedro Tlaquepaque, e incluso a zonas próximas a Puente Grande.
La dimensión de los daños en esta suposición, atina, difícilmente puede proyectarse, aunque el daño sería significativamente mayor.
Alrededor de 200 miembros de la Sedena aún permanecen en la zona. Un recorrido realizado por este medio permitió constatar los trabajos que se han realizado en los puntos de mayor dificultad para su acceso; los militares recorren los caminos sinuosos en vehículos todo terreno, y su “huella” en los espacios que han intervenido desde hace más de dos meses, resulta evidente.
Según Conafor, son cerca de 10 mil las obras que a la fecha han realizado los soldados en 195 hectáreas de ese cerro. Ello se traduce en “12 mil toneladas de tierra y cuatro millones de litros de agua” que se retendrán e infiltrarán, respectivamente, en cada episodio de lluvia. lo que traerá beneficios a cerca de 585 hectáreas.
“Las tareas se realizaron en el parteaguas de la Cuenca de El Ahogado, protegiendo las poblaciones de Venta del Astillero y Santa Ana, en el municipio de Zapopan.
Numeralia:
-149 barreras de piedra acomodada (ocho mil 10 metros lineales)
-9,457 zanjas trinchera (23 mil 875 metros lineales)
-302 presas de piedra en cárcavas (933.5 metros cúbicos)
-12 mil 170 metros cuadrados protegidos, en 10 caminos dentro del bosque.
EL INFORMADOR / ISAACK DE LOZA
De acuerdo con la Comisión Nacional Forestal (Conafor), la desatención a las secuelas del incendio que se desató el 21 de abril en el pulmón metropolitano pudo verse traducida en taludes de mayores dimensiones, toda vez que la agresión de las llamas contra el arbolado aumenta la posibilidad de que un deslizamiento se presente desde sus partes más altas.
Jesús Manuel Aldana Márquez, enlace de Producción de Planta en esa dependencia federal, explica que, gracias a la oportuna intervención del Ejército Mexicano, las lluvias del presente temporal no han provocado deslaves desde el Cerro del Nejahuete: una de las partes más altas (se halla aproximadamente 500 metros arriba de los primeros asentamientos urbanos) y afectadas por la deflagración en La Primavera.
De haber obviado la construcción de “diques” o represas de piedra, así como la habilitación de pozos en puntos estratégicos para captar ceniza (un contaminante para la ciudad, pero una fuente de potasio para la flora del bosque), los deslaves habrían llegado con fuerza desde las partes altas, a diversos puntos de San Pedro Tlaquepaque, e incluso a zonas próximas a Puente Grande.
La dimensión de los daños en esta suposición, atina, difícilmente puede proyectarse, aunque el daño sería significativamente mayor.
Alrededor de 200 miembros de la Sedena aún permanecen en la zona. Un recorrido realizado por este medio permitió constatar los trabajos que se han realizado en los puntos de mayor dificultad para su acceso; los militares recorren los caminos sinuosos en vehículos todo terreno, y su “huella” en los espacios que han intervenido desde hace más de dos meses, resulta evidente.
Según Conafor, son cerca de 10 mil las obras que a la fecha han realizado los soldados en 195 hectáreas de ese cerro. Ello se traduce en “12 mil toneladas de tierra y cuatro millones de litros de agua” que se retendrán e infiltrarán, respectivamente, en cada episodio de lluvia. lo que traerá beneficios a cerca de 585 hectáreas.
“Las tareas se realizaron en el parteaguas de la Cuenca de El Ahogado, protegiendo las poblaciones de Venta del Astillero y Santa Ana, en el municipio de Zapopan.
Numeralia:
-149 barreras de piedra acomodada (ocho mil 10 metros lineales)
-9,457 zanjas trinchera (23 mil 875 metros lineales)
-302 presas de piedra en cárcavas (933.5 metros cúbicos)
-12 mil 170 metros cuadrados protegidos, en 10 caminos dentro del bosque.
EL INFORMADOR / ISAACK DE LOZA
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