Jalisco
La desigualdad sigue siendo flagelo en México: especialistas
En una conferencia en el Museo de la Ciudad, hablan sobre varias políticas que ayudarían a tener un país más igualitario
GUADALAJARA, JALISCO (08/DIC/2015).- Para poder eliminar la desigualdad que impera en el país, es necesario crear un auténtico estado social que garantice el acceso a los servicios básicos desde un enfoque de derechos para todos.
Además, se requiere de una política fiscal progresiva y una distribución más justa de la riqueza, concluyó la confederación internacional Oxfam México, en voz de su representante, Ricardo Fuentes Nieva, durante la conferencia "Nuestra Ciudad Desigual: Factores globales y locales de la desigualdad", en el Museo de la Ciudad.
"Lo que está pasando es que en los esquemas tan desiguales alrededor del mundo, están las personas de súper élite, quienes pueden distorsionar las reglas económicas y políticas a su favor; en México, las telecomunicaciones son mucho más caras que en cualquier otro país de la OCDE".
Fuentes Nieva participó en la conferencia junto a especialistas del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), Universidad de Guadalajara y la asociación Jalisco Cómo Vamos.
Señaló que focalizar el gasto en educación, salud y en el acceso a servicios básicos, infraestructuras y escuelas, así como fortalecer el nivel de compra del salario mínimo y mejorar la transparencia y rendición de cuentas, serían políticas públicas que ayudarían a tener un país más igualitario en todos los niveles.
Por su parte, el coordinador de Investigación de Jalisco Cómo Vamos, Francisco Núñez de la Peña, habló del último estudio realizado por la asociación, en 2014, en el que, entre otras cosas, se preguntó a casi dos mil 400 personas del área metropolitana, acerca de cuál considera que es la peor injusticia en nuestra sociedad.
La respuesta número uno fue la discriminación, seguida de la inseguridad, la corrupción, el gobierno y la desigualdad.
En la mayoría de las preguntas, las respuestas dependieron mucho del nivel socioeconómico de las personas. Sin embargo, en el tema de la seguridad, tanto personas con bajo nivel socioeconómico como personas con un mayor nivel adquisitivo, coincidieron en que es uno de los temas más importantes a tratar.
Necesario, tener un abordaje particular en la economía
El profesor investigador del ITESO, Luis Ignacio Román Morales, destacó que otro de los flagelos que contribuyen a la desigualdad, es la manera en que se abordan los tipos y condiciones del empleo en México, así como los criterios para el salario mínimo.
"Lo que estamos haciendo es hacer un doble discurso en cuanto a la informalidad; decimos, quitemos a los que están en la calle, pero no decimos nada de lo que debería de ser el salario mínimo o las condiciones de trabajo de las trabajadoras domésticas remuneradas".
Mencionó que no se puede hacer un abordaje generalizado de la economía, pues todos tienen diferentes condiciones, como el sector informal, con la generación de riqueza desde los hogares, donde entran los ambulantes; la economía del trabajo informal, en donde están los agricultores de subsistencia, las trabajadoras domésticas remuneradas y los trabajadores informales en el sector formal, como aquellos que laboran sin prestación alguna en empresas.
"Es muy curioso que cuando se hable de combatir la informalidad, estemos pensando casi en la lógica del comerciante ambulante, pero no estamos pensando en los otros millones de personas que sí son funcionales a una economía tan desigual como la mexicana".
EL INFORMADOR / THAMARA VILLASEÑOR
Además, se requiere de una política fiscal progresiva y una distribución más justa de la riqueza, concluyó la confederación internacional Oxfam México, en voz de su representante, Ricardo Fuentes Nieva, durante la conferencia "Nuestra Ciudad Desigual: Factores globales y locales de la desigualdad", en el Museo de la Ciudad.
"Lo que está pasando es que en los esquemas tan desiguales alrededor del mundo, están las personas de súper élite, quienes pueden distorsionar las reglas económicas y políticas a su favor; en México, las telecomunicaciones son mucho más caras que en cualquier otro país de la OCDE".
Fuentes Nieva participó en la conferencia junto a especialistas del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), Universidad de Guadalajara y la asociación Jalisco Cómo Vamos.
Señaló que focalizar el gasto en educación, salud y en el acceso a servicios básicos, infraestructuras y escuelas, así como fortalecer el nivel de compra del salario mínimo y mejorar la transparencia y rendición de cuentas, serían políticas públicas que ayudarían a tener un país más igualitario en todos los niveles.
Por su parte, el coordinador de Investigación de Jalisco Cómo Vamos, Francisco Núñez de la Peña, habló del último estudio realizado por la asociación, en 2014, en el que, entre otras cosas, se preguntó a casi dos mil 400 personas del área metropolitana, acerca de cuál considera que es la peor injusticia en nuestra sociedad.
La respuesta número uno fue la discriminación, seguida de la inseguridad, la corrupción, el gobierno y la desigualdad.
En la mayoría de las preguntas, las respuestas dependieron mucho del nivel socioeconómico de las personas. Sin embargo, en el tema de la seguridad, tanto personas con bajo nivel socioeconómico como personas con un mayor nivel adquisitivo, coincidieron en que es uno de los temas más importantes a tratar.
Necesario, tener un abordaje particular en la economía
El profesor investigador del ITESO, Luis Ignacio Román Morales, destacó que otro de los flagelos que contribuyen a la desigualdad, es la manera en que se abordan los tipos y condiciones del empleo en México, así como los criterios para el salario mínimo.
"Lo que estamos haciendo es hacer un doble discurso en cuanto a la informalidad; decimos, quitemos a los que están en la calle, pero no decimos nada de lo que debería de ser el salario mínimo o las condiciones de trabajo de las trabajadoras domésticas remuneradas".
Mencionó que no se puede hacer un abordaje generalizado de la economía, pues todos tienen diferentes condiciones, como el sector informal, con la generación de riqueza desde los hogares, donde entran los ambulantes; la economía del trabajo informal, en donde están los agricultores de subsistencia, las trabajadoras domésticas remuneradas y los trabajadores informales en el sector formal, como aquellos que laboran sin prestación alguna en empresas.
"Es muy curioso que cuando se hable de combatir la informalidad, estemos pensando casi en la lógica del comerciante ambulante, pero no estamos pensando en los otros millones de personas que sí son funcionales a una economía tan desigual como la mexicana".
EL INFORMADOR / THAMARA VILLASEÑOR
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