La Romería, una celebración que renueva a la comunidad

GUADALAJARA, JALISCO (12/OCT/2016).- Armando González Escoto asegura que, desde una perspectiva sociológica, la Romería tiene un fuerte sentido identitario. Afirma a las personas en el presente y les da certeza de futuro. Los hace sentirse parte de una comunidad integrada y les permite manifestarse en un ambiente multitudinario a través de la música, el canto, la danza, la oración, el aplauso y la aclamación.

González Escoto, autor del libro “La Romería de Zapopan, patrimonio cultural intangible”, explica que esta celebración religiosa da a las comunidades participantes fortaleza y aliento para arrostrar las dificultades.

“En cierta medida, es una celebración que anualmente renueva a la comunidad y le ayuda a enfrentar el momento presente, particularmente cuando se vuelve difícil, complicado, inseguro. La sociedad vive sometida a presiones muy fuertes: económicas, sociales, familiares y políticas”.

El escritor acentúa que este evento nació como una acción de gracias por la protección que la Virgen de Zapopan daba a la población por las lluvias, principalmente en la metrópoli.

“Esto ocurre en los primeros años. Estamos hablando de 1691, 1695, 1720, 1724, 1734 y los siguientes años. Imperaba mucho el aspecto de la gratitud por la visita de la Virgen en tiempo de lluvia. Conforme la sociedad fue creciendo y volviéndose compleja, todos estos elementos se iban uniendo hasta integrar lo que es hoy”.

Además, recuerda que desde su inicio la Romería atrajo a los comerciantes. El recorrido comenzaba en Guadalajara las 04:00 horas y se desarrollaba por el camino antiguo de Zoquipan durante más de tres horas.

“Muchos comerciantes se establecieron desde el principio para ofrecer alimentos a quienes iban o a quienes volvían. Desde fines del siglo XVIII dio origen a una gran feria en Zapopan. Había corridas de toros, peleas de gallos, palenque, fiestas, restaurantes en las plazas y todo tipo de juegos mecánicos y distracciones. Esa feria fue muy célebre”.

Fray Juan Pablo Rodríguez, miembro de la comunidad de la Basílica de Zapopan, apunta que la tarea evangelizadora de la Virgen se realiza en la metrópoli con gran éxito, pero también por otros Estados y hasta en el extranjero.

“Ahora la gente viene y la acompaña de regreso a su casa. Es importante este hecho de decir: ‘Nosotros nos hacemos uno con la Virgen… y vamos a estar con ella’”.

CLAVES

"La Generala", desde 1821...

Independencia. El 13 d ejunio de 1821, Pedro Celestino Negrete proclamó de forma pacífica la Independencia de la Nueva Galicia en San Pedro Tlaquepaque. Ese mismo día la Virgen de Zapopan arribó a la Catedral.

Actas. El Acervo Histórico del Archivo Municipal de Guadalajara cuenta con los libros de actas de Cabildo de ese año, cuando a raíz de esta acción la imagen obtuvo el título de Generala de Armas de la Nueva Galicia.

Operativo zapopano, sin cambios

El presidente de Zapopan, Pablo Lemus, informa que, debido a los buenos resultados obtenidos en 2015, la organización de la Romería 2016 se realizará sin cambios de fondo. “Estamos sosteniendo el mismo modelo del año pasado con una fuerza operativa muy similar a la que tuvimos el año pasado. El número de comerciantes que se van a establecer también son los mismos”.

Lemus comenta que intentaron emitir de forma anticipada 900 permisos para comerciantes. Sin embargo, como 60% vive en otros estados, entre hoy y mañana se entregarán las autorizaciones.

Destacó que, para evitar aglomeraciones que afecten el recorrido, unos 600 vendedores se establecerán por Ávila Camacho y el resto por Américas. También se mantendrán las desviaciones en Patria y Américas, Sofía Camarena y Jacarandas.

Armando González Escoto asegura que los responsables de la Romería de 2015 cometieron graves errores que se explican por el cambio de la ruta. “Hubo situaciones que no previeron adecuadamente, sobre todo el encajonamiento que se da entre la Glorieta Colón y Plaza Patria, donde además tuvieron que sustraer un carril a la gente para darlo al Hospital San Francisco, de acuerdo con lo que ordena Protección Civil”. Agrega que las autoridades no previeron que al mandar a todos los danzantes por delante desprotegieron al conjunto de personas que venían detrás de la Virgen de Zapopan.

Salud

Por primera vez en el evento religioso se montará el Puesto Médico Avanzado, que cuenta con 16 camas y equipo de terapia intensiva para la atención de fieles. El modulo estará en las inmediaciones de la Catedral Metropolitana, informa la Secretaría de Salud.

La Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios explicó que mil establecimientos serán supervisados. El Consejo para la Prevención de Accidentes tendrá a 24 personas. Además, se dispondrá de ambulancias y tres vehículos de intervención rápida.

TELÓN DE FONDO

El significado de las danzas

En 2010, este medio de comunicación publicó un reportaje en el que Reneé de la Torre Castellanos, académica del Centro de Investigación y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), resaltó que las danzas que participan en la Romería, además de alegrar la celebración, son actos devocionales que sirven para agradecerle a la Virgen de Zapopan su protección y su ayuda.

“También los danzantes se asumen como guardianes de la Virgen. Es una especie de ‘ejército’ que está ahí para proteger que no haya ningún atentado a la imagen de ella”.

Por eso “hay danzas mestizas urbanas, aztecas, concheras, los que parecen apaches, pero también hay los que están ligados a los pueblos indígenas y que recrean el folclor de Jalisco, como es la danza de los tastoanes, que es propia de Jalisco. También está la de los Sonajeros de Tuxpan, que es una manifestación del pueblo indígena que quedó dentro del Sur de Jalisco y que tiene una cantidad de fiestas y tiene su propia danza”.

Además de ser una manifestación de alegría, la danza tiene un significado bélico y hasta chamánico. Durante la Conquista se impuso que, a través de la danza, se escenificará el triunfo de los frailes católicos y los conquistadores. “Detrás de eso se mantuvieron muchos significados indígenas que son una especie de simulacro, igual que lo que es la Virgen de Guadalupe. Detrás de ella se mantiene el significado de Tonatzin. Detrás de las danzas concheras, aunque están totalmente urbanizadas y mestizadas, hay muchos elementos de tradiciones otomíes. No solamente es una imposición, sino una resistencia cultural que se ha mantenido trozos de lo que fueron las tradiciones indígenas, pero ninguna completa porque son 500 años de imposiciones católicas”.

TESTIMONIOS

Un cuarto de siglo como danzante de la Virgen

Leonardo Aguayo MArtínez tiene 66 años de edad, pero desde hace 25 danza para la Virgen de Zapopan.

Empezó a hacerlo por devoción y porque Danza Cuitláhuac, el grupo al que pertenece, llegó a La Tuzanía. Fue de los primeros que se integró. Al principio se le dificultó agarrar el hilo de los pasos, pero mejoró con la práctica.

Tiene cuatro trajes, aunque trae puesto uno que lo hizo poco a poco. Presume su penacho, que tiene algunas plumas que cuestan más de 150 pesos. Para que no se dañen, cada año las retira y las guarda en bolsas de plástico.

Los ensayos de Danza Cuitláhuac iniciaron en agosto. El último se llevó a cabo a las 21:00 horas del 10 de octubre en el Centro Social de La Tuzanía. Los danzantes eran, en su mayoría, jóvenes y niños. Allí, envuelto por el ruido de los tambores y por el chasquido de los reatazos, Leonardo resalta que comenzará a danzar a la 01:00 horas de hoy y terminará cinco o seis horas más tarde en la Basílica de Zapopan.

Cuando termina la Romería se siente más cansado por la desvelada que por el desgaste físico. Le alegra ver danzas nuevas y jóvenes participantes. Cuenta que se mantiene en forma gracias a que corre tres o cuatro veces a la semana. Durante el recorrido le pide a la Virgen que todos lleguen con bien.

"Todo debe ser por devoción"

Jimena Plasencia tiene 34 años y desde hace cinco danza en la Romería. “Todo debe ser por devoción, por fe, y lo hacemos para acompañar a la Virgen”. Recuerda: “me acerco por una manda, una petición que le haces a la Virgen, y si te la concede, pues tú le ofreces algo. Yo le ofrecí hacer mi recorrido danzando, y aunque no se me cumplió... de todas maneras lo hice”.

Cada año cambia su vestuario, “porque cada año hago un agradecimiento diferente, ya no hago peticiones nada más, sino agradecimientos”. Su vestido lo diseña ella misma, lo dibuja, lo lleva a la costurera y de ahí a pintar.

Jimena cuenta que su vestuario lleva pintado lo que significa para ella la danza de este año. “El año pasado hice un pedimento en mi traje, por la desaparición de mi esposo. Y regresó, no con vida, pero regresó. En la procesión del año pasado yo lo sentí en todo momento, como él hacía antes”.

Asegura que también ha pedido por un asunto legal que ya se está resolviendo, y por la salud de una prima, que ha mejorado. “Cada paso que yo doy, cada gota de sudor, cada ampolla de mis pies, es de agradecimiento a la Virgen, por seguir aquí”.

Y añade: “Me canso más en un ensayo que en la procesión. La fe te hace llegar”.

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