Jalisco
Involucrar a la sociedad, “Vacuna” contra la corrupción
El secretario de salud insta a los padres de familia a crear conciencia en los jóvenes para no combinar alcohol con volante
GUADALAJARA, JALISCO (11/SEP/2010).- Para tener un mayor efecto de la Ley de Consumo Responsable de Alcohol, es relevante que más actores sociales se sumen a la causa y coadyuven en disminuir los accidentes automovilísticos y muertes, sobre todo ente los jóvenes, asegura el secretario de Salud en Jalisco,
Alfonso Petersen Farah.
Se trata de invitar a organismos de la sociedad civil para que se sumen como autoridad moral, y de “contraloría social”, para cuidar que la aplicación de la ley se haga como se tiene contemplado.
Contrario a lo que se ha dicho, en el sentido de que la aplicación de multas más severas a aquellos que cometan una infracción vial y rebasen los límites establecidos de alcohol en la sangre promoverá más la corrupción, Petersen Farah manifestó que la ley no se prestará para ello, siempre y cuando se involucre a la población en general.
“Me parece que aquí esta la ‘vacuna’ para evitar la corrupción, derivada de una contraloría social, donde representantes de la sociedad civil están participando en esto”.
También se espera que los padres de familia tengan injerencia en el tema, debido a que son responsables de que sus hijos no tomen y manejen. Lo importante, añadió, es que se les inculquen valores, les brinden las herramientas necesarias para que tengan mayor conciencia del peligro que implica combinar el alcohol con el volante.
Señaló que se trata de una ley visionaria, que ha sido criticada positivamente por representantes de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), y de la cual se espera que, por sí sola, ayude a disminuir en al menos 20% los percances viales, defunciones, así como lesiones y discapacidades.
Se trata de invitar a organismos de la sociedad civil para que se sumen como autoridad moral, y de “contraloría social”, para cuidar que la aplicación de la ley se haga como se tiene contemplado.
Contrario a lo que se ha dicho, en el sentido de que la aplicación de multas más severas a aquellos que cometan una infracción vial y rebasen los límites establecidos de alcohol en la sangre promoverá más la corrupción, Petersen Farah manifestó que la ley no se prestará para ello, siempre y cuando se involucre a la población en general.
“Me parece que aquí esta la ‘vacuna’ para evitar la corrupción, derivada de una contraloría social, donde representantes de la sociedad civil están participando en esto”.
También se espera que los padres de familia tengan injerencia en el tema, debido a que son responsables de que sus hijos no tomen y manejen. Lo importante, añadió, es que se les inculquen valores, les brinden las herramientas necesarias para que tengan mayor conciencia del peligro que implica combinar el alcohol con el volante.
Señaló que se trata de una ley visionaria, que ha sido criticada positivamente por representantes de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), y de la cual se espera que, por sí sola, ayude a disminuir en al menos 20% los percances viales, defunciones, así como lesiones y discapacidades.