Jalisco

Instituto de la Juventud lleva servicios a colonias deprimidas

Uno de los objetivos del IMAJ es difundir información en las colonias sobre problemáticas sociales

GUADALAJARA, JALISCO.- El Instituto Municipal de Atención a la Juventud (IMAJ) de Guadalajara comenzó con la implementación de un programa denominado Barrio Adentro, con una mecánica muy similar al Lunes Contigo del Ayuntamiento tapatío, para acercar servicios en las colonias deprimidas del municipio.

El director general del IMAJ, César Ruvalcaba Gómez, señaló que la diferencia es que este programa pretende ser prestado por y para jóvenes, aunque la atención que se ofrece no discrimina en cuestión de edades, por lo que se dirige a la sociedad en general y con la participación de estudiantes de universidades a manera de servicio social.  

La primera edición se realizó en la colonia Balcones de Oblatos, el pasado 25 de marzo, donde se brindó atención a 340 personas. Los servicios de Barrio Adentro se catalogan de la siguiente manera: Nutrición, Salud y Bienes para la Mujer, Psicología y Trabajo Social, Prevención en Adicciones, Servicios Dentales, Asesoría Jurídica, Seguridad Pública, Taller de Defensa Personal, Bolsa de Trabajo, entre otros.

Uno de los objetivos del IMAJ es difundir información en las colonias sobre problemáticas sociales, como la violencia intrafamiliar, particularmente la dirigida a los niños, y las oportunidades de apoyo para las madres adolescentes.

Yo por eso no manejo

El IMAJ es la instancia coordinadora del programa Yo por eso no manejo, con el que la autoridad municipal busca hacer conciencia sobre los riesgos que implica conducir un automóvil bajo los efectos del alcohol.

El director general informó que de las 60 instituciones educativas previstas para ser visitadas con talleres y conferencistas, ya se realizaron estas actividades en 14, y cuando concluya el periodo vacacional comenzará la etapa en la que también se trabajará en 40 bares y antros para llegar directamente a la población objetivo.  

Para dar claridad al mensaje y alejarlo de la solemnidad que pudiera ahuyentar al mocerío, la interacción en los centros educativos que se visitan se fundamenta en actividades participativas, como a través de un simulador donde los estudiantes pueden subirse y conocer los efectos de avanzar a 30 kilómetros por hora con y sin cinturón de seguridad.

También se prestan lentes que alteran la vista de los usuarios y que permiten constatar en un estado sobrio las distorsiones que genera el alcohol sobre la percepción del espacio y distancia, de esta forma, los jóvenes se dan cuenta de las dificultades que esto genera incluso para seguir por una línea recta.
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