Jalisco
Incrementan accidentes por pirotecnia en Guadalajara
Anualmente se atienden entre 200 y 250 nuevos pacientes por año en el Nuevo Hospital Civil
GUADALAJARA, JALISCO (25/DIC/2015).- Los fuegos artificiales se caracterizan en las fechas
decembrinas, quién no ha escuchado hablar de los buscapiés, culebras, luces de bengala, voladores, palmeras, palomas, palomitas y brujas, las cuales llegan a provocar quemaduras y cicatrices permanentes principalmente a los niños, por lo que en la actual temporada la demanda del servicio se incrementa hasta 300 por ciento en el Nuevo Hospital Civil de Guadalajara "Dr. Juan I. Menchaca", por lo que se debe evitar su uso para evitar tragedias.
Teresa de Jesús Chávez Velarde, pediatra adjunta del nosocomio y con 12 años de experiencia en el campo afirma que en la temporada invernal es cuando los menores de edad se exponen más, ya que se preparan más caldos, hace más frío, los familiares calientan mayor cantidad de agua para el baño y compran fuegos pirotécnicos y por ende se incrementa el número de pacientes con tema de quemaduras.
"En la época de calor hay pocos ingresos, pero los pacientes que quedan con secuelas se pueden ir haciendo las cirugías reparadoras en la etapa del verano que es cuando hay menos quemaduras, pero el invierno hay muchos pacientes, hasta el 300 por ciento de la capacidad del hospital se incrementa, la temporada en cuanto hace frío empezamos a llenar, tenemos capacidad de seis y hemos llegado a tener hasta 20 pacientes", comenta la especialista.
Chávez Velarde explica que las medidas de seguridad son fundamentales. "Los mexicanos somos hijos del no pasa nada, pero debemos extremar la seguridad, que no se hagan fogatas, que no quemen llantas porque en ambos casos terminan en tragedias y si van a comprar explosivos que sean seguros, seguros quiero decir que estén regulados, hay regulados, pero son más caros, los venden en sitios especiales y como la mayoría de los pacientes son de bajos recursos compran el más barato, el menos seguro pero el de más tragedias".
Anualmente se atienden entre 200 y 250 pacientes agudos por año en el Nuevo Hospital Civil, agudos significa que son pacientes nuevos, ya que el programa de quemaduras incluye desde el evento hasta que ya no requieren ninguna cirugía reparado o que los menores crecieron y se dieron de alta.
En los últimos tres años el Hospital Civil no había tenido casos de pacientes por quemadura secundaria de pólvora en menores de edad, sin embargo en los últimos 10 días llegaron dos menores de edad, el primero por una explosión en donde fallecieron algunos familiares y el otro caso un niño de Morelia que llegó con parte de sus dedos amputados.
"Las principales lesiones por pólvora son hasta una quemadura profunda de segundo grado o tercer grado que hace el fuego hasta la muerte, amputación en el caso de las 'palomitas' ya que las toman con la mano, hasta la amputación del miembro como le pasó al paciente de Morelia o hasta la muerte", señala Chávez Velarde.
EL DATO
El Nuevo Hospital Civil recibe anualmente entre 200 y 250 casos de pacientes nuevos por quemadura.
Recomendaciones
-Usar explosivos autorizados por la Secretaría de la Defensa Nacional.
-Comprar explosivos seguros, de los que están regulados.
-Evitar comprarlos en tianguis, tienditas y lugares sin autorización.
-No dejar solos a los niños cuando los van a usar.
-Evitar que los menores los coloquen en las bolsas de los pantalones, porque es cuando llegan a perder hasta la mano.
EL INFORMADOR / GUADALUPE TREWARTHA
Teresa de Jesús Chávez Velarde, pediatra adjunta del nosocomio y con 12 años de experiencia en el campo afirma que en la temporada invernal es cuando los menores de edad se exponen más, ya que se preparan más caldos, hace más frío, los familiares calientan mayor cantidad de agua para el baño y compran fuegos pirotécnicos y por ende se incrementa el número de pacientes con tema de quemaduras.
"En la época de calor hay pocos ingresos, pero los pacientes que quedan con secuelas se pueden ir haciendo las cirugías reparadoras en la etapa del verano que es cuando hay menos quemaduras, pero el invierno hay muchos pacientes, hasta el 300 por ciento de la capacidad del hospital se incrementa, la temporada en cuanto hace frío empezamos a llenar, tenemos capacidad de seis y hemos llegado a tener hasta 20 pacientes", comenta la especialista.
Chávez Velarde explica que las medidas de seguridad son fundamentales. "Los mexicanos somos hijos del no pasa nada, pero debemos extremar la seguridad, que no se hagan fogatas, que no quemen llantas porque en ambos casos terminan en tragedias y si van a comprar explosivos que sean seguros, seguros quiero decir que estén regulados, hay regulados, pero son más caros, los venden en sitios especiales y como la mayoría de los pacientes son de bajos recursos compran el más barato, el menos seguro pero el de más tragedias".
Anualmente se atienden entre 200 y 250 pacientes agudos por año en el Nuevo Hospital Civil, agudos significa que son pacientes nuevos, ya que el programa de quemaduras incluye desde el evento hasta que ya no requieren ninguna cirugía reparado o que los menores crecieron y se dieron de alta.
En los últimos tres años el Hospital Civil no había tenido casos de pacientes por quemadura secundaria de pólvora en menores de edad, sin embargo en los últimos 10 días llegaron dos menores de edad, el primero por una explosión en donde fallecieron algunos familiares y el otro caso un niño de Morelia que llegó con parte de sus dedos amputados.
"Las principales lesiones por pólvora son hasta una quemadura profunda de segundo grado o tercer grado que hace el fuego hasta la muerte, amputación en el caso de las 'palomitas' ya que las toman con la mano, hasta la amputación del miembro como le pasó al paciente de Morelia o hasta la muerte", señala Chávez Velarde.
EL DATO
El Nuevo Hospital Civil recibe anualmente entre 200 y 250 casos de pacientes nuevos por quemadura.
Recomendaciones
-Usar explosivos autorizados por la Secretaría de la Defensa Nacional.
-Comprar explosivos seguros, de los que están regulados.
-Evitar comprarlos en tianguis, tienditas y lugares sin autorización.
-No dejar solos a los niños cuando los van a usar.
-Evitar que los menores los coloquen en las bolsas de los pantalones, porque es cuando llegan a perder hasta la mano.
EL INFORMADOR / GUADALUPE TREWARTHA
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