Jalisco

Guadalajara regula los negocios de micheladas

Los giros no podrán estar a menos de 150 metros de escuelas, templos, plazas, unidades deportivas o cualquier centro de concentración

GUADALAJARA, JALISCO (13/NOV/2010).- La Comisión de Gobernación, Reglamentos y Vigilancia de Guadalajara aprobó una modificación reglamentaria con la que crea una regulación para los giros conocidos como micheladas, los cuales no podrán estar cerca de escuelas, iglesias, hospitales u otros centros de concentración, como sucede actualmente.

Una laguna legal, explica el presidente de la Comisión, Eduardo Almaguer Ramírez, permite que las micheladas evadan las restricciones existentes para los giros restringidos, pues sus propietarios comienzan tramitando licencias para la venta de alimentos (como  loncherías, cenadurías, fondas, marisquerías, cocinas económicas, taquerías, restaurantes e incluso torterías), muy cerca de estos sitios de concentración, para luego pedir como licencia anexa la venta de cerveza.

Así, aunque hacen parecer que la venta de alimentos será su actividad comercial principal, en realidad se concentran en la venta de micheladas (bebida preparada con cerveza) en puntos que resultan atractivos para los estudiantes (clientes potenciales), lo que preocupa a los padres de familia, que como una necesidad sentida han solicitado en reiteradas ocasiones a la autoridad municipal que intervenga en esta problemática.

“Es un asunto muy importante y parte de un compromiso que asumió el gobierno de la ciudad porque es una demanda de los padres de familia, que este tipo de lugares no se establezcan cerca de los centros escolares, de los centros de trabajo. Con 25 ó 30 pesos los jóvenes tienen acceso prácticamente a alcoholizarse; nos hemos encontrado con muchísimos menores de edad en estos lugares desde los 12 años, por eso se han clausurado lugares porque había niños de 10 o nueve años consumiendo una michelada”.

Una vez que los cambios aprobados por la Comisión en el Reglamento para el Funcionamiento de Giros Comerciales, Industriales y de Prestación de Servicios sean ratificados en el pleno del Ayuntamiento, se incluirá en el catálogo de giros, junto al concepto de cervecería, el de micheladas. El artículo 57 quedará así: “Cervecería o micheladas es el establecimiento dedicado exclusivamente para la venta y consumo de cerveza o bebidas preparadas con base en ésta, acompañada de alimentos o botanas”. 

Para regular la localización de las micheladas, la fracción II del artículo 66 dirá: “Todos los giros con venta de bebidas alcohólicas, cualquiera que sea su graduación, anexos o principales, deberán ubicarse a una distancia mayor de 150 metros de escuelas, hospicios, hospitales, centros de culto religioso, cuarteles, fábricas, locales sindicales, unidades deportivas y otros centros de reunión pública o privada que determinen las autoridades municipales”.

Centros de apuesta

Esa misma comisión edilicia del Ayuntamiento está por concluir la dictaminación de lo que será un reglamento para los casinos o centros de apuestas remotas, que pretende ser la base legal para los nuevos cobros a esta actividad que vienen considerados en la Ley de Ingresos 2011.

Actualmente ni siquiera se contempla el giro de casino en la reglamentación municipal, por lo que se creará también. Los particulares obtienen un permiso de la Secretaría de Gobernación para la operación de estos centros, y luego piden una anuencia a la autoridad municipal. Almaguer Ramírez se muestra confiado en que las facultades del Ayuntamiento resultan suficientes para entrar en la regulación de esta actividad.

“Si bien los casinos son inversiones que desarrollan económicamente, que generan empleo y turismo regional, que no generan problemas de violencia, o de tapar cocheras como algunos giros restringidos, también es importante el problema de la afición al juego”.

La licencia de casino costará 283 mil pesos por año, más un pago de cinco mil pesos por cada máquina de juego. Con la regulación actual, los particulares operan con licencias de restaurante-bar, que les cuesta alrededor de 25 mil pesos y poco más de 200 pesos por máquina.

FRASE
Se han clausurado lugares porque había niños de 10 o nueve años consumiendo una michelada
Eduardo Almaguer Ramírez, regidor tapatío.

PIE

En la administración 2001-2003 surgió el concepto de micheladas en la ciudad, pero la licencia municipal era inexistente y los propietarios se ampararan con la venta de alimentos.
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