Jalisco
Falta convenio para rescatar cinco sitios arqueológicos afectados por El Zapotillo
La prospección arqueológica inició a principios de 2009 y concluyó en octubre del mismo año
GUADALAJARA, JALISCO.- El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) liberó desde noviembre el permiso para la construcción de la cortina de la Presa El Zapotillo. Falta realizar otro convenio para rescatar los cinco sitios arqueológicos detectados, con el propósito de tramitar posteriormente la autorización para la inundación de las cuatro mil 200 hectáreas que comprendería el embalse.
El área de la cortina se liberó porque en ese punto específico no encontraron vestigios, ya que es una zona encañonada.
“Es muy difícil que haya asentamientos en el fondo del río o en los riscos”, explica la arqueóloga Marisol Montejano, del Centro INAH Jalisco, quien estuvo a cargo del proyecto.
La prospección arqueológica inició a principios de 2009 y concluyó en octubre del mismo año. En total se recorrieron 20 mil hectáreas, con excepción del poblado de Temacapulín, ya que no autorizaron la entrada de los arqueólogos.
La liberación del permiso para comenzar las obras de la cortina incluye la restricción de realizar el salvamento de los cinco sitios arqueológicos, uno de ellos en el Cerro de La Gloria, en Temacapulín, Municipio de Cañadas de Obregón.
“Sabemos del sitio en Temacapulín por las referencias que tenemos desde 1980 de Román Piña Chan, que es uno de los personajes emblemáticos de la arqueología mesoamericana. Por ello, hasta que se rescaten los vestigios, la inundación está restringida”.
La arqueóloga explica que si las obras de la cortina tardan aproximadamente cuatro años, es el tiempo suficiente para planear la excavación de los asentamientos prehispánicos que se utilizaban como unidades habitacionales y que pertenecen al Epiclásico (450 al 900 después de nuestra era).
La Conagua ya inició las negociaciones con el Centro INAH Jalisco para planear los proyectos de salvamento, que incluirá excavaciones expansivas y sondeos con el objetivo de encontrar las actividades en las estructuras arqueológicas, qué función tenían los edificios, la ocupación, los periodos y, en general, “buscar la mayor evidencia posible que nos hable del modo de vida de esos tiempos”.
Aún se ignora cuándo iniciarán los trabajos, “porque sigue pendiente el tema de Temacapulín. Me refiero a que es un sitio que tiene que excavarse y la Conagua tiene que asegurar las condiciones para el equipo de excavación”.
El área de la cortina se liberó porque en ese punto específico no encontraron vestigios, ya que es una zona encañonada.
“Es muy difícil que haya asentamientos en el fondo del río o en los riscos”, explica la arqueóloga Marisol Montejano, del Centro INAH Jalisco, quien estuvo a cargo del proyecto.
La prospección arqueológica inició a principios de 2009 y concluyó en octubre del mismo año. En total se recorrieron 20 mil hectáreas, con excepción del poblado de Temacapulín, ya que no autorizaron la entrada de los arqueólogos.
La liberación del permiso para comenzar las obras de la cortina incluye la restricción de realizar el salvamento de los cinco sitios arqueológicos, uno de ellos en el Cerro de La Gloria, en Temacapulín, Municipio de Cañadas de Obregón.
“Sabemos del sitio en Temacapulín por las referencias que tenemos desde 1980 de Román Piña Chan, que es uno de los personajes emblemáticos de la arqueología mesoamericana. Por ello, hasta que se rescaten los vestigios, la inundación está restringida”.
La arqueóloga explica que si las obras de la cortina tardan aproximadamente cuatro años, es el tiempo suficiente para planear la excavación de los asentamientos prehispánicos que se utilizaban como unidades habitacionales y que pertenecen al Epiclásico (450 al 900 después de nuestra era).
La Conagua ya inició las negociaciones con el Centro INAH Jalisco para planear los proyectos de salvamento, que incluirá excavaciones expansivas y sondeos con el objetivo de encontrar las actividades en las estructuras arqueológicas, qué función tenían los edificios, la ocupación, los periodos y, en general, “buscar la mayor evidencia posible que nos hable del modo de vida de esos tiempos”.
Aún se ignora cuándo iniciarán los trabajos, “porque sigue pendiente el tema de Temacapulín. Me refiero a que es un sitio que tiene que excavarse y la Conagua tiene que asegurar las condiciones para el equipo de excavación”.
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