Jalisco
Exige Greenpeace declaratorias sanitaria y ambiental por contaminación
Debido al alto grado de contaminación que padecen los habitantes de El Salto y Juanacatlán por el río Santiago
GUADALAJARA, JALISCO.- Por el alto grado de contaminación que padecen los habitantes de El Salto y Juanacatlán por el río Santiago,
Greenpeace exige que se emita una declaratoria de riesgo sanitario y ambiental.
Alejandro Olivera, coordinador de la campaña de Océanos y Costas de Greenpeace sostuvo que estas medidas deben ser emitidas por la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) pero antes las autoridades estatales y federales deben reconocer el problema.
“Creemos que por el grado de contaminación y peligrosidad del río es necesario declarar un riesgo sanitario y una emergencia ambiental; en el caso de riesgo sanitario es la Cofepris quien debe de declarar esto, es la responsable, y que sucede la misma cuestión en las playas.
“Hay riesgos sanitarios que comprometen la salud de los bañistas, comprometen la salud de los habitantes y la gente nunca está informada de parte de las autoridades adecuadamente”.
El experto aseguró que a nivel nacional el 54% de las aguas residuales municipales se vierten a cuerpos de agua como arroyos, ríos y mares sin ningún tratamiento, al tiempo que el 85% de las aguas industriales tampoco son tratadas: “Alrededor de 165 mil 400 litros por segundo de aguas negras llegan a algún ecosistema o van a parar al mar”.
Insistió en que lo que se está viviendo en los municipios de El Salto y Juanacatlán por donde pasa el contaminado Río Santiago merece la declaratoria de estas dos contingencias.
“El primer paso que debería tomar el Gobierno federal y estatal es reconocer la contaminación a los niveles realmente tóxicos y peligrosos en los que están y declarar emergencia ambiental y riesgo sanitario”, subrayó.
Hasta el momento no existe en México ningún antecedente de declaratoria de riesgo sanitario y ambiental en alguna zona o río contaminado.
Durante el recorrido del Río Santiago tiene el punto de mayor polución en la confluencia de El Salto y Juanacatlán.
EL INFORMADOR/ EVELYN ÁGUILA
Alejandro Olivera, coordinador de la campaña de Océanos y Costas de Greenpeace sostuvo que estas medidas deben ser emitidas por la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) pero antes las autoridades estatales y federales deben reconocer el problema.
“Creemos que por el grado de contaminación y peligrosidad del río es necesario declarar un riesgo sanitario y una emergencia ambiental; en el caso de riesgo sanitario es la Cofepris quien debe de declarar esto, es la responsable, y que sucede la misma cuestión en las playas.
“Hay riesgos sanitarios que comprometen la salud de los bañistas, comprometen la salud de los habitantes y la gente nunca está informada de parte de las autoridades adecuadamente”.
El experto aseguró que a nivel nacional el 54% de las aguas residuales municipales se vierten a cuerpos de agua como arroyos, ríos y mares sin ningún tratamiento, al tiempo que el 85% de las aguas industriales tampoco son tratadas: “Alrededor de 165 mil 400 litros por segundo de aguas negras llegan a algún ecosistema o van a parar al mar”.
Insistió en que lo que se está viviendo en los municipios de El Salto y Juanacatlán por donde pasa el contaminado Río Santiago merece la declaratoria de estas dos contingencias.
“El primer paso que debería tomar el Gobierno federal y estatal es reconocer la contaminación a los niveles realmente tóxicos y peligrosos en los que están y declarar emergencia ambiental y riesgo sanitario”, subrayó.
Hasta el momento no existe en México ningún antecedente de declaratoria de riesgo sanitario y ambiental en alguna zona o río contaminado.
Durante el recorrido del Río Santiago tiene el punto de mayor polución en la confluencia de El Salto y Juanacatlán.
EL INFORMADOR/ EVELYN ÁGUILA
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