Jalisco
En aumento, sanciones a centros contra adicciones
Este año la meta es realizar 500 verificaciones a estos establecimientos para cerciorarse de que cumplan con la norma en materia de salud
GUADALAJARA, JALISCO (28/JUL/2013).- El director de Regulación Sanitaria de la Secretaría de Salud Jalisco, Celso Montiel Hernández, mencionó que en 2011 fueron 311 las verificaciones en centros de rehabilitación para adicciones, que arrojaron cinco sanciones económicas de 150 salarios mínimos (nueve mil 714 pesos) y nueve amonestaciones; para el siguiente año aumentaron las verificaciones a 397, que dieron como saldo sólo 15 amonestaciones, y en 2013 van ocho sanciones económicas y seis amonestaciones en tan sólo 128 verificaciones resultantes del primer trimestre.
“Tuvimos una reunión con las asociaciones que operan estos centros con el fin de que conozcan los lineamientos. Hemos mejorado con las nuevas actas de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), lo que nos permite nuevas verificaciones para evaluar la falta de atención médica, porque algunos centros no tienen programas de tratamiento, les hacen falta manuales de procedimiento, además de registrar el hacinamiento”, indicó sobre las mejoras de las verificaciones y las omisiones recurrentes.
El funcionario prevé que terminen, en el presente año, con 500 verificaciones, con el fin de reforzar e incrementar la exigencia al cumplimiento de los criterios normativos de la salud. En lo que va de este control han incurrido en faltas, en su mayoría, centros de rehabilitación de Guadalajara y Zapopan.
Al mismo tiempo, compartió que no han cerrado ningún centro en los últimos tres años, porque no han encontrado violaciones que apunten a esto.
“Los centros amonestados tienen un promedio de cinco a 30 días para mejorar sus condiciones, dependiendo el tipo de observaciones hechas, si vemos que está poniendo en riesgo la vida de una persona, se clausura inmediatamente”, refirió el funcionario.
El Consejo Estatal Contra las Adicciones en Jalisco (CECAJ) actúa de manera que realiza visitas ordinaras de supervisión y seguimiento a los criterios de calidad de la normatividad; se procura una por semestre y éstas arrojan tanto sanciones como amonestaciones para los establecimientos. Además el área de Regulación Sanitaria de cada región realiza visitas de verificación.
Asimismo, las entidades que participan en la revisión y certificación de los centros de rehabilitación son el CECAJ, que establece parámetros, normas y reglamentos para controlar estos lugares, además, otorga becas para jóvenes con adicciones, diplomados, talleres y programas que encaminan a profesionalizar y dar una mejor atención a los usuarios; Regulación Sanitaria, que verifica la legitimidad de las acciones; Protección Civil en los protocolos de seguridad, y direcciones de padrones y reglamentos de los 125 municipios del Estado.
Para atender quejas y comentarios que pueden ayudar a clausurar los centros fuera de norma, el funcionario pidió a la población reportarlos al teléfono 30305000, extensión 35376, al área de Regulación Sanitaria de la Secretaría de Salud Jalisco.
EL DATO
Sin licencia
El CECAJ considera centros clandestinos a los establecimientos que no cuentan con permiso municipal y/o aviso de funcionamiento.
SABER MÁS
¿Quién emite los permisos?
El Ayuntamiento es la primera autoridad que emite el permiso para cualquier tipo de actividades que se brindan a los ciudadanos, entre ellas las de tratamiento; después, el establecimiento debe dar aviso a la Secretaría de Salud sobre su apertura, a lo cual la dependencia emite un documento llamado “Aviso de Funcionamiento y Aviso de Responsable Médico”; el CECAJ y el CENADIC previa evaluación, emiten el reconocimiento por cumplimiento a la normatividad vigente. Quien tiene la facultad de clausurar son los ayuntamientos y Regulación Sanitaria.
MARCO NORMATIVO
La Norma Oficial Mexicana NOM-028-SSA2-1999 para la prevención, tratamiento y control de las adicciones, detalla en su apartado “Tratamientos”, que son cuatro los modelos para intervenir en las adicciones:
“El modelo profesional ofrece diferentes servicios de atención, a través de consulta externa, urgencias y hospitalización, y está manejado por profesionales de la salud”.
“El modelo de ayuda mutua es ofrecido por agrupaciones de adictos en recuperación, cuyo propósito fundamental es apoyar al adicto en la resolución de su problema. Los programas de ayuda mutua más comúnmente utilizados tienen su fundamento en los llamados ‘Doce Pasos de A. A.’, que utilizan diferentes agrupaciones. Con este modelo se trata de incidir tanto en la conducta como en los problemas existenciales y emocionales del adicto. Subyace la idea de pertenecer a un grupo y practicar los “Doce Pasos”, se caracteriza por no ofrecer servicios profesionales de atención”.
“El modelo mixto deberá ofrecer servicios profesionales de tratamiento y de ayuda mutua en diversos establecimientos, tales como: clínicas, comunidades terapéuticas y casas de medio camino”.
“Otros modelos alternativos son aquellos que brindan servicios de tratamiento a través de diversas técnicas y métodos sin poner en riesgo la integridad física y psicológica de la o el usuario”.
CRÓNICA
Una vida transformada
Hace 10 años mostraba la otra cara de la moneda. Benito Berdeja actualmente trabaja en una clínica profesional de rehabilitación de adicciones ubicada en la colonia Las Pintitas, su tarea: auxiliar administrativo y cotitular de admisiones de este centro.
La vida le cambió por completo gracias a un centro como para el que ahora labora. Las drogas y el alcohol lo habían atrapado; sin embargo, hoy conoce lo que es la tranquilidad y la abstinencia; y sobretodo el poder de un “no”.
Su trabajo es en lo más recóndito de Guadalajara, ahí se encuentra el centro que brinda tratamiento en adicciones, en específico a quienes sufren por alcoholismo, drogadicción, juego patológico (ludopatía), así como codependencia, bulimia y anorexia, depresión y ansiedad.
Un terregal de camino para llegar a los 10 mil metros de terrenos de la clínica. En una pared de la recepción presumen sus diplomas y certificaciones que los acreditan como un centro en regla y que ofrece ayuda profesional. Una vez dentro, la paz y la tranquilidad es notoria.
El sitio cuenta con un comedor para unas 50 personas, habitaciones separadas por género, cada una para dos personas, y con lo necesario para una estadía de 45 días (duración aproximada del tratamiento), instalaciones deportivas, una cúpula donde se ofrecen pláticas a todos los pacientes, además de cuartos especiales para terapia individual; es decir, están totalmente aislados y fuera de la realidad.
Sin embargo, lo más curioso en la clínica no es la tranquilidad que se vive una vez dentro, sino una tumba a medio patio.
Berdeja comenta que al término de la terapia, cada uno de los pacientes internados acude a la cripta con una hoja de papel donde escriben todas las cosas malas que quisieran alejar de su vida; esto es parte de una tradición de la clínica que ha llevado a través de los años, y que en su momento le ayudó a Benito.
LA VOZ DEL EXPERTO
Falta transparencia
César Pérez Verónica (director del Cepad)
“La Secretaría de Salud Jalisco necesita informar a la sociedad si estos centros actúan de acuerdo con los protocolos que establece la norma en términos de tratamiento y adaptación”, afirmó el director ejecutivo del Centro de Justicia para la Paz y el Desarrollo (Cepad), César Pérez Verónica.
Sobre los centros privados que operan al margen de la norma NOM-028-SSA2-1999, señaló que es una violación de parte de la autoridad, “ya que permiten, en el momento de no hacer revisiones, a los particulares que abran centros de supuesta atención, quienes violan los derechos son las autoridades por no garantizar la integridad de los internos”.
Enfatizó que hay mucha necesidad entre los familiares de los adictos para que éstos superen su enfermedad, y al verse rebasada la autoridad en Salud (Secretaría) por atender las dependencias, las familias recurren a estos centros donde no brindan información de los tratamientos y ni siquiera permiten visitas.
“Tuvimos una reunión con las asociaciones que operan estos centros con el fin de que conozcan los lineamientos. Hemos mejorado con las nuevas actas de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), lo que nos permite nuevas verificaciones para evaluar la falta de atención médica, porque algunos centros no tienen programas de tratamiento, les hacen falta manuales de procedimiento, además de registrar el hacinamiento”, indicó sobre las mejoras de las verificaciones y las omisiones recurrentes.
El funcionario prevé que terminen, en el presente año, con 500 verificaciones, con el fin de reforzar e incrementar la exigencia al cumplimiento de los criterios normativos de la salud. En lo que va de este control han incurrido en faltas, en su mayoría, centros de rehabilitación de Guadalajara y Zapopan.
Al mismo tiempo, compartió que no han cerrado ningún centro en los últimos tres años, porque no han encontrado violaciones que apunten a esto.
“Los centros amonestados tienen un promedio de cinco a 30 días para mejorar sus condiciones, dependiendo el tipo de observaciones hechas, si vemos que está poniendo en riesgo la vida de una persona, se clausura inmediatamente”, refirió el funcionario.
El Consejo Estatal Contra las Adicciones en Jalisco (CECAJ) actúa de manera que realiza visitas ordinaras de supervisión y seguimiento a los criterios de calidad de la normatividad; se procura una por semestre y éstas arrojan tanto sanciones como amonestaciones para los establecimientos. Además el área de Regulación Sanitaria de cada región realiza visitas de verificación.
Asimismo, las entidades que participan en la revisión y certificación de los centros de rehabilitación son el CECAJ, que establece parámetros, normas y reglamentos para controlar estos lugares, además, otorga becas para jóvenes con adicciones, diplomados, talleres y programas que encaminan a profesionalizar y dar una mejor atención a los usuarios; Regulación Sanitaria, que verifica la legitimidad de las acciones; Protección Civil en los protocolos de seguridad, y direcciones de padrones y reglamentos de los 125 municipios del Estado.
Para atender quejas y comentarios que pueden ayudar a clausurar los centros fuera de norma, el funcionario pidió a la población reportarlos al teléfono 30305000, extensión 35376, al área de Regulación Sanitaria de la Secretaría de Salud Jalisco.
EL DATO
Sin licencia
El CECAJ considera centros clandestinos a los establecimientos que no cuentan con permiso municipal y/o aviso de funcionamiento.
SABER MÁS
¿Quién emite los permisos?
El Ayuntamiento es la primera autoridad que emite el permiso para cualquier tipo de actividades que se brindan a los ciudadanos, entre ellas las de tratamiento; después, el establecimiento debe dar aviso a la Secretaría de Salud sobre su apertura, a lo cual la dependencia emite un documento llamado “Aviso de Funcionamiento y Aviso de Responsable Médico”; el CECAJ y el CENADIC previa evaluación, emiten el reconocimiento por cumplimiento a la normatividad vigente. Quien tiene la facultad de clausurar son los ayuntamientos y Regulación Sanitaria.
MARCO NORMATIVO
La Norma Oficial Mexicana NOM-028-SSA2-1999 para la prevención, tratamiento y control de las adicciones, detalla en su apartado “Tratamientos”, que son cuatro los modelos para intervenir en las adicciones:
“El modelo profesional ofrece diferentes servicios de atención, a través de consulta externa, urgencias y hospitalización, y está manejado por profesionales de la salud”.
“El modelo de ayuda mutua es ofrecido por agrupaciones de adictos en recuperación, cuyo propósito fundamental es apoyar al adicto en la resolución de su problema. Los programas de ayuda mutua más comúnmente utilizados tienen su fundamento en los llamados ‘Doce Pasos de A. A.’, que utilizan diferentes agrupaciones. Con este modelo se trata de incidir tanto en la conducta como en los problemas existenciales y emocionales del adicto. Subyace la idea de pertenecer a un grupo y practicar los “Doce Pasos”, se caracteriza por no ofrecer servicios profesionales de atención”.
“El modelo mixto deberá ofrecer servicios profesionales de tratamiento y de ayuda mutua en diversos establecimientos, tales como: clínicas, comunidades terapéuticas y casas de medio camino”.
“Otros modelos alternativos son aquellos que brindan servicios de tratamiento a través de diversas técnicas y métodos sin poner en riesgo la integridad física y psicológica de la o el usuario”.
CRÓNICA
Una vida transformada
Hace 10 años mostraba la otra cara de la moneda. Benito Berdeja actualmente trabaja en una clínica profesional de rehabilitación de adicciones ubicada en la colonia Las Pintitas, su tarea: auxiliar administrativo y cotitular de admisiones de este centro.
La vida le cambió por completo gracias a un centro como para el que ahora labora. Las drogas y el alcohol lo habían atrapado; sin embargo, hoy conoce lo que es la tranquilidad y la abstinencia; y sobretodo el poder de un “no”.
Su trabajo es en lo más recóndito de Guadalajara, ahí se encuentra el centro que brinda tratamiento en adicciones, en específico a quienes sufren por alcoholismo, drogadicción, juego patológico (ludopatía), así como codependencia, bulimia y anorexia, depresión y ansiedad.
Un terregal de camino para llegar a los 10 mil metros de terrenos de la clínica. En una pared de la recepción presumen sus diplomas y certificaciones que los acreditan como un centro en regla y que ofrece ayuda profesional. Una vez dentro, la paz y la tranquilidad es notoria.
El sitio cuenta con un comedor para unas 50 personas, habitaciones separadas por género, cada una para dos personas, y con lo necesario para una estadía de 45 días (duración aproximada del tratamiento), instalaciones deportivas, una cúpula donde se ofrecen pláticas a todos los pacientes, además de cuartos especiales para terapia individual; es decir, están totalmente aislados y fuera de la realidad.
Sin embargo, lo más curioso en la clínica no es la tranquilidad que se vive una vez dentro, sino una tumba a medio patio.
Berdeja comenta que al término de la terapia, cada uno de los pacientes internados acude a la cripta con una hoja de papel donde escriben todas las cosas malas que quisieran alejar de su vida; esto es parte de una tradición de la clínica que ha llevado a través de los años, y que en su momento le ayudó a Benito.
LA VOZ DEL EXPERTO
Falta transparencia
César Pérez Verónica (director del Cepad)
“La Secretaría de Salud Jalisco necesita informar a la sociedad si estos centros actúan de acuerdo con los protocolos que establece la norma en términos de tratamiento y adaptación”, afirmó el director ejecutivo del Centro de Justicia para la Paz y el Desarrollo (Cepad), César Pérez Verónica.
Sobre los centros privados que operan al margen de la norma NOM-028-SSA2-1999, señaló que es una violación de parte de la autoridad, “ya que permiten, en el momento de no hacer revisiones, a los particulares que abran centros de supuesta atención, quienes violan los derechos son las autoridades por no garantizar la integridad de los internos”.
Enfatizó que hay mucha necesidad entre los familiares de los adictos para que éstos superen su enfermedad, y al verse rebasada la autoridad en Salud (Secretaría) por atender las dependencias, las familias recurren a estos centros donde no brindan información de los tratamientos y ni siquiera permiten visitas.
Síguenos en