Jalisco
Empresas locales, excluidas del proyecto de repavimentación
El Ayuntamiento pudo haber garantizado para la economía local alrededor de 55% de los mil 100 MDP que costará el proyecto, informa el CICEJ
GUADALAJARA, JALISCO (08/NOV/2010).- Debido a los términos y condiciones de la licitación pública que lanzó el
Ayuntamiento de Guadalajara para elegir a la empresa que se hará cargo de llevar a cabo el proyecto de repavimentación de 33 vialidades de la ciudad, la participación de empresas locales se dará sólo por la subcontratación que decida hacer la empresa de concreto ganadora, pero se esperan condiciones desventajosas.
Según el análisis que hace el Colegio de Ingenieros Civiles del Estado de Jalisco ( CICEJ), existen las condiciones para que la empresa de concreto que resulte ganadora busque mayores rendimientos implementando medidas de “protección”, como ofrecer muy alto el costo de su concreto, y muy bajo el pago de los servicios por las obras que subcontratará.
“A la hora de meter la licitación, como van a ser dos o tres (empresas) las que cumplan, obviamente que pueden proteger el precio del concreto, y dar unos precios para cambiar las líneas de agua potable y alcantarillado demasiado baratas”, señala el presidente del CICEJ, Gilberto Paredes Cárdenas.
Esto, prosigue, se agrava cuando se combina con la situación económica por la que pasan actualmente las constructoras en Jalisco, que frente a una reducida inversión en infraestructura (se acaban de perder dos mil 500 millones de pesos en la ampliación del BRT), se verán orillados a aceptar las condiciones que imponga la empresa de concreto ganadora de la licitación.
“Con la falta y la necesidad de trabajo muchísima gente aceptaría esas condiciones con tal de tener trabajo. Claro que es un problema muy fuerte, 70% de los ingenieros de Jalisco no tienen trabajo gracias a la situación política actual. Esta necesidad de trabajo que hay para 70% de los ingenieros va a provocar que a precios irrisorios contraten este tipo de obra, ése va a ser un problema muy grande”.
Si bien para las constructoras resultaría poco benéfica la interacción con la empresa de concreto que describe y avizora el CICEJ, “al Ayuntamiento no le perjudica, porque al final de cuentas toda la bronca la tendrá el de la empresa que lo ganaría”; el presidente del Colegio concluye, por lo tanto, sobre la vía que adoptó la autoridad para la realización del proyecto:
“No la vemos bien, porque esto va a limitar a muchísimos ingenieros constructores y a muchísimas empresas constructoras a ser contratistas de una empresa (de concreto) que va a poner las condiciones, y como ya sería un contrato individual las condiciones cambian, entonces en esto quedarán desprotegidas muchísimas empresas y muchísimos constructores por los contratos que se firmarán con las exigencias de la empresa que ganará esta licitación”.
El CICEJ le expresó a la Secretaría de Obras Públicas de Guadalajara hace un mes los puntos flacos que encontraba en su plan para llevar a cabo la renovación de las vialidades, la instancia municipal le habría argumentado entonces que, de esta manera, se esperaba un mayor control sobre la implementación de las acciones.
“Le decía”, narra el presidente del CICEJ su encuentro con Juan Carlos Uranga García, titular de la Secretaría, “que veíamos nosotros con mucho extrañamiento como se iba a licitar, pero ellos quieren no tener problemas. Estamos hablando que (de otra forma y ejemplificando) serían 110 empresas de 10 millones de pesos, 110 contratos…”.
No obstante, sí existían alternativas factibles para que el Ayuntamiento tapatío hubiera dirigido específicamente a la economía local alrededor de 50% de la inversión, principalmente diferenciando la adquisición del concreto con la contratación de la obra.
“Pudieron haber dividido por calles, o por fracciones de calles; obviamente pudieron conseguir ellos (el concreto) a un buen precio por la cantidad a una concretera, y que todas las empresas locales hagan todo el trabajo (…), que se nos diera a las empresas tapatías, a las empresas jaliscienses los contratos de acuerdo a sus capacidades”.
Si se estima que en una intervención como la planeada se requiere alrededor de 45% de la inversión para la adquisición del concreto, lo restante, entonces, se pudo asegurar para la economía local: “Hablamos de casi 600 millones de pesos que le pudieron haber dado trabajo a más de 100 empresas que tienen en sus filas ingenieros residentes, ingenieros analistas, ingenieros de control de calidad; que más o menos reactivaría la economía de una manera más dispersa, no tan cerrada”.
PARA SABER
El proyecto de repavimentación considera 33 vialidades principales del municipio, en las que se aplicará concreto hidráulico sobre una superficie cercana al millón de metros cuadrados, y que fueron priorizadas conforme al flujo vehicular que registran (juntas representan dos millones 040 mil 090 vehículos o viajes por día), además de que transitan por ellas 237 rutas de transporte público.
La licitación pública considera como fecha de inicio de la obra al 22 de noviembre de 2010, y la conclusión el 30 de septiembre de 2011, con 313 días naturales de ejecución. La apertura de las proposiciones de las empresas concursantes está prevista para el día de hoy, 8 de noviembre.
El presidente municipal de Guadalajara, Aristóteles Sandoval Díaz, ha señalado que el arranque de las obras se asegurará con recursos disponibles en las arcas municipales, debido a los conflictos legales alrededor de la contratación del crédito por mil 100 millones de pesos, en un proceso suspendido por orden del Tribunal de lo Administrativo del Estado ( TAE).
TELÓN DE FONDO
Hubo acercamiento
El 8 de septiembre este diario publicó declaraciones del titular de la Secretaría de Servicios Municipales, Mauricio Gudiño Coronado, acerca de las comunicaciones existentes entre la autoridad y empresas de concreto con miras a la implementación del proyecto de repavimentación:
“Nosotros nos acercamos con toda las concreteras, un poquito para preguntar quién hace este tipo de proyectos. Apasco le entra bien, le entra bien Cemex, esta concretera Chihuahua es muy interesante, porque hace casi todos los proyectos de aeropuertos. Nos hizo una prueba en López Mateos y Avenida México, se habían levantado las losas y puso el concreto y en tres horas ya estaban pasando los vehículos”. Aquella ocasión también se habló de la empresa Cruz Azul.
Según el análisis que hace el Colegio de Ingenieros Civiles del Estado de Jalisco ( CICEJ), existen las condiciones para que la empresa de concreto que resulte ganadora busque mayores rendimientos implementando medidas de “protección”, como ofrecer muy alto el costo de su concreto, y muy bajo el pago de los servicios por las obras que subcontratará.
“A la hora de meter la licitación, como van a ser dos o tres (empresas) las que cumplan, obviamente que pueden proteger el precio del concreto, y dar unos precios para cambiar las líneas de agua potable y alcantarillado demasiado baratas”, señala el presidente del CICEJ, Gilberto Paredes Cárdenas.
Esto, prosigue, se agrava cuando se combina con la situación económica por la que pasan actualmente las constructoras en Jalisco, que frente a una reducida inversión en infraestructura (se acaban de perder dos mil 500 millones de pesos en la ampliación del BRT), se verán orillados a aceptar las condiciones que imponga la empresa de concreto ganadora de la licitación.
“Con la falta y la necesidad de trabajo muchísima gente aceptaría esas condiciones con tal de tener trabajo. Claro que es un problema muy fuerte, 70% de los ingenieros de Jalisco no tienen trabajo gracias a la situación política actual. Esta necesidad de trabajo que hay para 70% de los ingenieros va a provocar que a precios irrisorios contraten este tipo de obra, ése va a ser un problema muy grande”.
Si bien para las constructoras resultaría poco benéfica la interacción con la empresa de concreto que describe y avizora el CICEJ, “al Ayuntamiento no le perjudica, porque al final de cuentas toda la bronca la tendrá el de la empresa que lo ganaría”; el presidente del Colegio concluye, por lo tanto, sobre la vía que adoptó la autoridad para la realización del proyecto:
“No la vemos bien, porque esto va a limitar a muchísimos ingenieros constructores y a muchísimas empresas constructoras a ser contratistas de una empresa (de concreto) que va a poner las condiciones, y como ya sería un contrato individual las condiciones cambian, entonces en esto quedarán desprotegidas muchísimas empresas y muchísimos constructores por los contratos que se firmarán con las exigencias de la empresa que ganará esta licitación”.
El CICEJ le expresó a la Secretaría de Obras Públicas de Guadalajara hace un mes los puntos flacos que encontraba en su plan para llevar a cabo la renovación de las vialidades, la instancia municipal le habría argumentado entonces que, de esta manera, se esperaba un mayor control sobre la implementación de las acciones.
“Le decía”, narra el presidente del CICEJ su encuentro con Juan Carlos Uranga García, titular de la Secretaría, “que veíamos nosotros con mucho extrañamiento como se iba a licitar, pero ellos quieren no tener problemas. Estamos hablando que (de otra forma y ejemplificando) serían 110 empresas de 10 millones de pesos, 110 contratos…”.
No obstante, sí existían alternativas factibles para que el Ayuntamiento tapatío hubiera dirigido específicamente a la economía local alrededor de 50% de la inversión, principalmente diferenciando la adquisición del concreto con la contratación de la obra.
“Pudieron haber dividido por calles, o por fracciones de calles; obviamente pudieron conseguir ellos (el concreto) a un buen precio por la cantidad a una concretera, y que todas las empresas locales hagan todo el trabajo (…), que se nos diera a las empresas tapatías, a las empresas jaliscienses los contratos de acuerdo a sus capacidades”.
Si se estima que en una intervención como la planeada se requiere alrededor de 45% de la inversión para la adquisición del concreto, lo restante, entonces, se pudo asegurar para la economía local: “Hablamos de casi 600 millones de pesos que le pudieron haber dado trabajo a más de 100 empresas que tienen en sus filas ingenieros residentes, ingenieros analistas, ingenieros de control de calidad; que más o menos reactivaría la economía de una manera más dispersa, no tan cerrada”.
PARA SABER
El proyecto de repavimentación considera 33 vialidades principales del municipio, en las que se aplicará concreto hidráulico sobre una superficie cercana al millón de metros cuadrados, y que fueron priorizadas conforme al flujo vehicular que registran (juntas representan dos millones 040 mil 090 vehículos o viajes por día), además de que transitan por ellas 237 rutas de transporte público.
La licitación pública considera como fecha de inicio de la obra al 22 de noviembre de 2010, y la conclusión el 30 de septiembre de 2011, con 313 días naturales de ejecución. La apertura de las proposiciones de las empresas concursantes está prevista para el día de hoy, 8 de noviembre.
El presidente municipal de Guadalajara, Aristóteles Sandoval Díaz, ha señalado que el arranque de las obras se asegurará con recursos disponibles en las arcas municipales, debido a los conflictos legales alrededor de la contratación del crédito por mil 100 millones de pesos, en un proceso suspendido por orden del Tribunal de lo Administrativo del Estado ( TAE).
TELÓN DE FONDO
Hubo acercamiento
El 8 de septiembre este diario publicó declaraciones del titular de la Secretaría de Servicios Municipales, Mauricio Gudiño Coronado, acerca de las comunicaciones existentes entre la autoridad y empresas de concreto con miras a la implementación del proyecto de repavimentación:
“Nosotros nos acercamos con toda las concreteras, un poquito para preguntar quién hace este tipo de proyectos. Apasco le entra bien, le entra bien Cemex, esta concretera Chihuahua es muy interesante, porque hace casi todos los proyectos de aeropuertos. Nos hizo una prueba en López Mateos y Avenida México, se habían levantado las losas y puso el concreto y en tres horas ya estaban pasando los vehículos”. Aquella ocasión también se habló de la empresa Cruz Azul.
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