Empresarios piden que obras sociales se financien con el Impuesto Sobre Nóminas
la desaceleración económica y la carga fiscal con nuevos impuestos no brindan el escenario adecuado para considerar más pagos
Para el ex presidente del Centro Empresarial de Jalisco (CEJ), Juan José Frangie Saade, la intención es buena, “pero el horno no está para bollos”. Precisó que la desaceleración económica y la carga fiscal con nuevos impuestos no brindan el escenario adecuado para considerar más pagos.
Por ello propone que el Gobierno retenga 1.7%, y el resto, es decir, 0.3% de las nóminas, se destine a un fideicomiso que evalúe las obras, ya sea de infraestructura o sociales que demanda el Estado, para invertir en ellas; de tal forma se vería si funciona la idea.
Por separado, Gilberto Jiménez García de Alba, reconocido con la Medalla al Mérito Industrial 2008 del Consejo Coordinador de Cámaras Industriales (CCIJ), coincidió con la propuesta: “Ya tenemos 2% que no sabemos dónde está, ni cómo se maneja. Lo menos que tenemos que hacer es que ese 0.3% que pretenden de más nos lo den de ese 2% que ya pagamos, para manejarlo y comparar lo que estás haciendo el Gobierno, y cómo lo hace el sector empresarial”.
Y es que la experiencia muestra fracasos. En ocasiones anteriores, cuando se generaron nuevos gravámenes, al final perdieron su esencia. Frangie señaló: “Recordemos la tenencia (a autos nuevos y seminuevos), que al principio tenía un objetivo y después, al pasar a formar parte del gasto corriente, se perdió”.
Los dos empresarios coincidieron en que la intención es válida, pero las formas no son las indicadas. Si bien el modelo funciona con éxito en Chihuahua, dijeron, la realidad jalisciense es diferente. Mientras que en el Estado fronterizo la industria es la principal actividad, en Jalisco 90% del universo productivo está compuesto por micro y pequeñas empresas que no están en condiciones de pagar más.