Jalisco
El DIF ahora va por albergue para familiares de enfermos
Prevén solicitar al Gobierno del Estado un área del Fray Antonio Alcalde para ese fin
GUADALAJARA, JALISCO (08/JUN/2016).- Lorena Arriaga de Sandoval, presidenta del DIF Jalisco, se mostró complacida por la apertura del nuevo comedor donde los familiares de los pacientes del Hospital Civil Dr. Juan I. Menchaca podrán recibir alimentos, y prometió que solicitará al gobernador Aristóteles Sandoval las instalaciones donde actualmente se atiende a los enfermos de cáncer en el Hospital Civil Viejo —que en año y medio quedará desocupado por la construcción del
Hospital de Cancerología— para que sea un sitio donde los familiares de los enfermos que no tengan para pagar un hotel puedan quedarse a dormir.
El comedor inaugurado ayer se caracteriza por su iluminación natural, con una televisión, tiene una capacidad para 100 personas y se servirán diariamente quinientas raciones de alimentos.
En el Hospital Fray Antonio Alcalde ya existe un comedor que fue inaugurado en diciembre de 2014 y sirve 800 porciones de comida al día, por lo que entre los dos comedores se sirven diariamente mil 300 raciones de alimentos.
Don Guadalupe Ríos, quien tiene un familiar ingresado en el Juan I. Menchaca, escucha el sermón del padre Ángel, quien bendijo el nuevo comedor. Se acomoda el sombrero y observa a sus compañeros de mesa, son familiares de otros enfermos quienes, como él, no puede estar moviéndose del hospital por si “algo se necesita” y mantienen la ilusión que sus paciente sean dados de alta.
Ríos termina sus tacos de guisado, agradece y camina rumbo al elevador para que su esposa baje a comer y él cuidar a su hijo Alberto.
La inversión del comedor fue de un millón y medio de pesos, de aportaciones de la Secretaría de Desarrollo e Integración Social del Gobierno estatal, gestión de recursos de la Fundación Hospitales Civiles de Guadalajara, eventos benéficos, así como de benefactores como la CROC Jalisco, VIARDE, Constructora RAL e IBM.
GRUPO CON-TACTO
Voluntarios ponen el ejemplo
Son 28 grupos de voluntarios de alimentos los que apoyan al Nuevo Hospital Civil, ayer fue el turno para Con-tacto, el cual desde hace un año lleva comida a los familiares de los enfermos que no tienen recursos económicos.
María del Socorro Vergara Camou encabeza al grupo Con-tacto, son entre 15 y 20 voluntarios que muestran “solidaridad a los hermanos que tienen penas”, dice la mujer a la que apodan cariñosamente “Coyo”.
En el grupo está Adriana Valadez, quien espera que otros grupos de personas se integren al voluntariado, ya que necesitan más manos para ayudar.
El director general del O.P.D. Hospital Civil de Guadalajara, Héctor Raúl Pérez Gómez, enfatizó que con este proyecto se demuestra la solidaridad de los grupos de voluntarios, los cuales proveen de alimentos, así como de asesoría espiritual y psicológica a los familiares de los enfermos.
Por su parte, Esther Cisneros Quirarte, representante del Voluntariado del Hospital Civil de Guadalajara, enfatizó que desde hace tres años los grupos que ahora encabeza le solicitaron solamente “un toldo, para protegerse de las inclemencias del Sol y con ello ofrecer comida a las personas que llegan al lugar sin un peso en los bolsillos, pero con el fin de acompañar y cuidar a los enfermos. Ellos se ocupan tanto de sus enfermos que nadie los cuida a ellos, y ésa es una función de los voluntarios”.
El comedor inaugurado ayer se caracteriza por su iluminación natural, con una televisión, tiene una capacidad para 100 personas y se servirán diariamente quinientas raciones de alimentos.
En el Hospital Fray Antonio Alcalde ya existe un comedor que fue inaugurado en diciembre de 2014 y sirve 800 porciones de comida al día, por lo que entre los dos comedores se sirven diariamente mil 300 raciones de alimentos.
Don Guadalupe Ríos, quien tiene un familiar ingresado en el Juan I. Menchaca, escucha el sermón del padre Ángel, quien bendijo el nuevo comedor. Se acomoda el sombrero y observa a sus compañeros de mesa, son familiares de otros enfermos quienes, como él, no puede estar moviéndose del hospital por si “algo se necesita” y mantienen la ilusión que sus paciente sean dados de alta.
Ríos termina sus tacos de guisado, agradece y camina rumbo al elevador para que su esposa baje a comer y él cuidar a su hijo Alberto.
La inversión del comedor fue de un millón y medio de pesos, de aportaciones de la Secretaría de Desarrollo e Integración Social del Gobierno estatal, gestión de recursos de la Fundación Hospitales Civiles de Guadalajara, eventos benéficos, así como de benefactores como la CROC Jalisco, VIARDE, Constructora RAL e IBM.
GRUPO CON-TACTO
Voluntarios ponen el ejemplo
Son 28 grupos de voluntarios de alimentos los que apoyan al Nuevo Hospital Civil, ayer fue el turno para Con-tacto, el cual desde hace un año lleva comida a los familiares de los enfermos que no tienen recursos económicos.
María del Socorro Vergara Camou encabeza al grupo Con-tacto, son entre 15 y 20 voluntarios que muestran “solidaridad a los hermanos que tienen penas”, dice la mujer a la que apodan cariñosamente “Coyo”.
En el grupo está Adriana Valadez, quien espera que otros grupos de personas se integren al voluntariado, ya que necesitan más manos para ayudar.
El director general del O.P.D. Hospital Civil de Guadalajara, Héctor Raúl Pérez Gómez, enfatizó que con este proyecto se demuestra la solidaridad de los grupos de voluntarios, los cuales proveen de alimentos, así como de asesoría espiritual y psicológica a los familiares de los enfermos.
Por su parte, Esther Cisneros Quirarte, representante del Voluntariado del Hospital Civil de Guadalajara, enfatizó que desde hace tres años los grupos que ahora encabeza le solicitaron solamente “un toldo, para protegerse de las inclemencias del Sol y con ello ofrecer comida a las personas que llegan al lugar sin un peso en los bolsillos, pero con el fin de acompañar y cuidar a los enfermos. Ellos se ocupan tanto de sus enfermos que nadie los cuida a ellos, y ésa es una función de los voluntarios”.
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