Jalisco
Discreción permitió prosperar a red de prostitución de menores
La revisión a un automovilista por ignorar la luz roja derivó en el desmantelamiento de la banda
GUADALAJARA, JALISCO (23/OCT/2013).- Menores de edad que se desempeñaban en labores de
prostitución fueron detectadas a la vez que el grupo que se dedicaba a contactar a clientes y reclutar a las adolescentes fue detenido y consignado por personal de la Fiscalía General del Estado (FGE).
El éxito de la actividad de las personas que manejaban a las menores se debió gracias a la discreción con la que realizaban sus tareas, en la Colonia Lázaro Cárdenas, Guadalajara, pues al parecer tanto clientes como jovencitas se recomendaban para formar parte del negocio.
La detección de las jóvenes y sus operadores se dio tras una detención realizada por la Policía de Guadalajara el 17 de octubre, en el cruce de 8 de Julio y Natividad Macías. Cruz Alberto Cortez Orozco, de 27 años, circulaba en un auto BMW negro, placas JFP-7788. Al llegar al cruce con Lapizlázuli se pasó un alto, razón por la que elementos del grupo motorizado Gama 3 le marcaron el alto.
Cortez viajaba con dos menores, una de 17 años y otra de 14, María Alejandra y Alondra. Los gendarmes encontraron en el vehículo una bolsa con 100 gramos de la droga sintética llamada crystal. Las tres personas fueron puestas a disposición de la Fiscalía.
Las menores dijeron a investigadores que se dedicaban a la prostitución y proporcionaron datos que los llevaron a dar con los operadores de la red. Averiguaron que quien estaba detrás de las operaciones era Ana Laura Vázquez Álvarez, de 24 años, quien se hace llamar “Ángeles”.
Al parecer, la mujer se dedicaba a la prostitución, informó Raúl Sánchez Jiménez, director general de Delitos contra la Indemnidad Sexual y la Integridad de las Personas de la FGE. Sin embargo, “Ángeles” se decidió por establecer su negocio en el que contactaba a clientes vía telefónica, los citaba en un motel y luego llamaba a las jóvenes que ella reclutaba para enviarlas en taxi a los lugares pactados.
Las jovencitas se maquillaban y mudaban de ropa en el domicilio de Vázquez Álvarez para después acudir a las citas. José Luis Montaño Núñez, de 20 años, apodado “El Pollo”, era el encargado de trasladarlas a los moteles en taxi, según la Fiscalía.
Vázquez Álvarez cobraba a los clientes, dejaba a las menores y después regresaba por ellas para llevarlas a su domicilio, donde repartían el dinero: 700 pesos para la menor, 300 para Vázquez y 200 para Montaño: “En esa casa en diversas ocasiones, junto con otras jóvenes consumieron alcohol y drogas”, aseveró Sánchez Jiménez.
El funcionario apuntó que las menores declararon que Vázquez Álvarez tenía contacto con al menos otras 15 menores de edad que laboraban con ella de la misma manera.
Las autoridades consignaron a Vázquez y a Montaño por prostitución infantil, corrupción de menores e incitación a la prostitución.
Agentes investigadores además detuvieron a José Luis Flores Mercado, de 30 años, señalado por incitación a la prostitución, corrupción de menores y prostitución infantil, pero además se presume que se dedica al robo y comercialización de vehículos robados y venta de droga. Miguel Espinoza López, de 22 años, es también presunto implicado en la venta de vehículos robados.
Reclutaba por recomendación
La manera en que Ana Laura Vázquez Álvarez, alias “Ángeles”, contactaba a las jovencitas y a los clientes tampoco era muy publicitada, era algo similar a trabajar por recomendación.
Las autoridades indicaron que cuando “Ángeles” trabajaba en bares o centros nocturnos comenzó a dedicarse a la prostitución. En un momento dado, los clientes que conocía eran bastantes y ella se decidió por contratar a personas para que sostuvieran encuentros sexuales con ellos.
Las adolescentes con las que ella trataba al parecer quedaban satisfechas con el negocio (les pagaban 700 pesos por relación) de tal manera que las propias jovencitas invitaban a sus amigas a conocer a Vázquez y se decidían por desempeñar la misma actividad que ella.
Lo mismo sucedía con quienes pagaban por las menores, que de boca en boca extendían la cartera de clientes de “Ángeles” y quienes, aseguraba la mujer a las menores, eran gente “selecta”.
SITIO 14
Explotación sexual de menores
De acuerdo con el Inegi, Jalisco se encuentra en el número 14 de entidades con sentenciados por delitos de explotación sexual de menores e incapaces, con seis casos desde 2008 hasta la fecha.
En 2009 y 2010 se registraron dos casos en cada año; mientras que en 2011 y 2012, uno por año. En el Distrito Federal se han presentado 40 en el mismo lapso.
LOS VECINOS NI SE IMAGINABAN
Años de sigilo en el barrio
La discreción fue clave para que Ana Laura Vázquez Álvarez, alias “Ángeles”, pasara inadvertida para sus vecinos: nadie se percataba de que las jovencitas que ingresaban al lugar se dedicaban a la prostitución.
Una de las vecinas aseveró que no se había percatado de que autoridades hubieran llegado en días pasados a realizar un operativo en la zona, pero cuando vio la fotografía de Vázquez Álvarez lo primero que exclamó fue: “¡Es ‘Ángeles’! ¿A poco está detenida?”.
La mujer no se imaginaba que su vecina, quien tenía un par de años viviendo en su barrio, se dedicara a actividades ilícitas. Comentó que “Ángeles” llegó al vecindario junto con su madre, quien al parecer era propietaria de un negocio. Lo que creían era que todos los ingresos familiares provenían de dicha actividad.
Y si dentro del lugar en ocasiones se consumía droga o bebían, la gente no se enteraba: “En la casa, lo que es en la casa, en la casa, nunca se oyó despapaye, nunca ha habido problemas”, comentó la vecina.
Y si llegó a ver que al inmueble ingresaban adolescentes de cuando en cuando, lo que se creía era que llegaban a visitar a la madre de “Ángeles”: “La mamá parece que se dedica a echar cartas (del tarot), yo pensaba que venían con ella. Usted sabe que las muchachitas son muy creyentes a todo eso. Entonces yo, las pocas veces que me tocó mirar, yo creía que venían a eso. Ya venían en la tardecita”.
Ni siquiera las ropas de las jovencitas llamaban la atención.
Un vecino más también se mostró sorprendido de que algo extraño ocurriera en la finca donde vivía. En el poco tiempo que tiene Vázquez de vivir en el lugar no ha visto movimientos de personas que le hubieran llevado a sospechar que lo desde ese lugar operara un grupo dedicado a la prostitución de menores de edad.
LA VOZ DEL EXPERTO
El “golpe” fue fortuito
Gerardo de la Cruz (especialista en seguridad pública de la Universidad Panamericana)
La detención de cinco personas dedicadas a la prostitución de menores no representa un verdadero golpe a esta actividad delictiva, pues fue consecuencia de un arresto por el robo de un auto y no de una labor de inteligencia de la Fiscalía para combatir este negocio ilegal, aseguró el especialista en seguridad pública de la Universidad Panamericana (UP), Gerardo de la Cruz.
“Lo importante sería que se llevara a cabo una redada general después de una investigación donde se ejerce la prostitución, pero que fuera producto de una labor de inteligencia, no de forma casual, porque así en realidad no desarticulas nada”, criticó el experto.
Señaló que es evidente este tipo de actividades en calles del Centro de la ciudad como López Cotilla, Morelos, La Paz, Chapultepec, donde comúnmente se observan jóvenes por la noche que ofrecen servicios sexuales y que tienen personas detrás manejándolos, además de aquellos que como los detenidos ayer, se organizan por teléfono.
La gravedad de este tipo de negocios radica en que los menores de edad que son ofrecidos como producto pudieron haber sido robados incluso en otro país o estado, o bien, obligados bajo amenazas.
Además, luego de un lapso bajo estas condiciones las víctimas pueden desarrollar el síndrome de Estocolmo con sus explotadores, agregó el especialista.
El éxito de la actividad de las personas que manejaban a las menores se debió gracias a la discreción con la que realizaban sus tareas, en la Colonia Lázaro Cárdenas, Guadalajara, pues al parecer tanto clientes como jovencitas se recomendaban para formar parte del negocio.
La detección de las jóvenes y sus operadores se dio tras una detención realizada por la Policía de Guadalajara el 17 de octubre, en el cruce de 8 de Julio y Natividad Macías. Cruz Alberto Cortez Orozco, de 27 años, circulaba en un auto BMW negro, placas JFP-7788. Al llegar al cruce con Lapizlázuli se pasó un alto, razón por la que elementos del grupo motorizado Gama 3 le marcaron el alto.
Cortez viajaba con dos menores, una de 17 años y otra de 14, María Alejandra y Alondra. Los gendarmes encontraron en el vehículo una bolsa con 100 gramos de la droga sintética llamada crystal. Las tres personas fueron puestas a disposición de la Fiscalía.
Las menores dijeron a investigadores que se dedicaban a la prostitución y proporcionaron datos que los llevaron a dar con los operadores de la red. Averiguaron que quien estaba detrás de las operaciones era Ana Laura Vázquez Álvarez, de 24 años, quien se hace llamar “Ángeles”.
Al parecer, la mujer se dedicaba a la prostitución, informó Raúl Sánchez Jiménez, director general de Delitos contra la Indemnidad Sexual y la Integridad de las Personas de la FGE. Sin embargo, “Ángeles” se decidió por establecer su negocio en el que contactaba a clientes vía telefónica, los citaba en un motel y luego llamaba a las jóvenes que ella reclutaba para enviarlas en taxi a los lugares pactados.
Las jovencitas se maquillaban y mudaban de ropa en el domicilio de Vázquez Álvarez para después acudir a las citas. José Luis Montaño Núñez, de 20 años, apodado “El Pollo”, era el encargado de trasladarlas a los moteles en taxi, según la Fiscalía.
Vázquez Álvarez cobraba a los clientes, dejaba a las menores y después regresaba por ellas para llevarlas a su domicilio, donde repartían el dinero: 700 pesos para la menor, 300 para Vázquez y 200 para Montaño: “En esa casa en diversas ocasiones, junto con otras jóvenes consumieron alcohol y drogas”, aseveró Sánchez Jiménez.
El funcionario apuntó que las menores declararon que Vázquez Álvarez tenía contacto con al menos otras 15 menores de edad que laboraban con ella de la misma manera.
Las autoridades consignaron a Vázquez y a Montaño por prostitución infantil, corrupción de menores e incitación a la prostitución.
Agentes investigadores además detuvieron a José Luis Flores Mercado, de 30 años, señalado por incitación a la prostitución, corrupción de menores y prostitución infantil, pero además se presume que se dedica al robo y comercialización de vehículos robados y venta de droga. Miguel Espinoza López, de 22 años, es también presunto implicado en la venta de vehículos robados.
Reclutaba por recomendación
La manera en que Ana Laura Vázquez Álvarez, alias “Ángeles”, contactaba a las jovencitas y a los clientes tampoco era muy publicitada, era algo similar a trabajar por recomendación.
Las autoridades indicaron que cuando “Ángeles” trabajaba en bares o centros nocturnos comenzó a dedicarse a la prostitución. En un momento dado, los clientes que conocía eran bastantes y ella se decidió por contratar a personas para que sostuvieran encuentros sexuales con ellos.
Las adolescentes con las que ella trataba al parecer quedaban satisfechas con el negocio (les pagaban 700 pesos por relación) de tal manera que las propias jovencitas invitaban a sus amigas a conocer a Vázquez y se decidían por desempeñar la misma actividad que ella.
Lo mismo sucedía con quienes pagaban por las menores, que de boca en boca extendían la cartera de clientes de “Ángeles” y quienes, aseguraba la mujer a las menores, eran gente “selecta”.
SITIO 14
Explotación sexual de menores
De acuerdo con el Inegi, Jalisco se encuentra en el número 14 de entidades con sentenciados por delitos de explotación sexual de menores e incapaces, con seis casos desde 2008 hasta la fecha.
En 2009 y 2010 se registraron dos casos en cada año; mientras que en 2011 y 2012, uno por año. En el Distrito Federal se han presentado 40 en el mismo lapso.
LOS VECINOS NI SE IMAGINABAN
Años de sigilo en el barrio
La discreción fue clave para que Ana Laura Vázquez Álvarez, alias “Ángeles”, pasara inadvertida para sus vecinos: nadie se percataba de que las jovencitas que ingresaban al lugar se dedicaban a la prostitución.
Una de las vecinas aseveró que no se había percatado de que autoridades hubieran llegado en días pasados a realizar un operativo en la zona, pero cuando vio la fotografía de Vázquez Álvarez lo primero que exclamó fue: “¡Es ‘Ángeles’! ¿A poco está detenida?”.
La mujer no se imaginaba que su vecina, quien tenía un par de años viviendo en su barrio, se dedicara a actividades ilícitas. Comentó que “Ángeles” llegó al vecindario junto con su madre, quien al parecer era propietaria de un negocio. Lo que creían era que todos los ingresos familiares provenían de dicha actividad.
Y si dentro del lugar en ocasiones se consumía droga o bebían, la gente no se enteraba: “En la casa, lo que es en la casa, en la casa, nunca se oyó despapaye, nunca ha habido problemas”, comentó la vecina.
Y si llegó a ver que al inmueble ingresaban adolescentes de cuando en cuando, lo que se creía era que llegaban a visitar a la madre de “Ángeles”: “La mamá parece que se dedica a echar cartas (del tarot), yo pensaba que venían con ella. Usted sabe que las muchachitas son muy creyentes a todo eso. Entonces yo, las pocas veces que me tocó mirar, yo creía que venían a eso. Ya venían en la tardecita”.
Ni siquiera las ropas de las jovencitas llamaban la atención.
Un vecino más también se mostró sorprendido de que algo extraño ocurriera en la finca donde vivía. En el poco tiempo que tiene Vázquez de vivir en el lugar no ha visto movimientos de personas que le hubieran llevado a sospechar que lo desde ese lugar operara un grupo dedicado a la prostitución de menores de edad.
LA VOZ DEL EXPERTO
El “golpe” fue fortuito
Gerardo de la Cruz (especialista en seguridad pública de la Universidad Panamericana)
La detención de cinco personas dedicadas a la prostitución de menores no representa un verdadero golpe a esta actividad delictiva, pues fue consecuencia de un arresto por el robo de un auto y no de una labor de inteligencia de la Fiscalía para combatir este negocio ilegal, aseguró el especialista en seguridad pública de la Universidad Panamericana (UP), Gerardo de la Cruz.
“Lo importante sería que se llevara a cabo una redada general después de una investigación donde se ejerce la prostitución, pero que fuera producto de una labor de inteligencia, no de forma casual, porque así en realidad no desarticulas nada”, criticó el experto.
Señaló que es evidente este tipo de actividades en calles del Centro de la ciudad como López Cotilla, Morelos, La Paz, Chapultepec, donde comúnmente se observan jóvenes por la noche que ofrecen servicios sexuales y que tienen personas detrás manejándolos, además de aquellos que como los detenidos ayer, se organizan por teléfono.
La gravedad de este tipo de negocios radica en que los menores de edad que son ofrecidos como producto pudieron haber sido robados incluso en otro país o estado, o bien, obligados bajo amenazas.
Además, luego de un lapso bajo estas condiciones las víctimas pueden desarrollar el síndrome de Estocolmo con sus explotadores, agregó el especialista.
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