Jalisco
Defienden su estadía en la zona de la Presa El Ahogado
La comunidad asegura haber adquirido legalmente el espacio que se encuentra dentro del ejido El Zapote
TLAJOMULCO DE ZUÑIGA, JALISCO (21/FEB/2012).- Los terrenos en construcción que se encuentran al interior de la Presa de El Ahogado, donde algunas edificaciones están concluidas e incluso habitadas, pertenecen al ejido de El Zapote. Así lo confirmaron las autoridades de Tlajomulco de Zúñiga y las personas que residen en la zona de riesgo.
A decir del director de Verificación de Edificación en esa localidad, Gilberto Chaires Muñoz, los compradores de estas porciones de tierra fueron engañados, pues el discurso que se les dio fue que una serie de vallas delimitaban lo que pertenece al ejido y lo que es propiedad de la nación. Esto pese a que ni siquiera el Ayuntamiento reconoce aún los límites federales y municipales del vaso.
Esa tarea, dijo, queda en manos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), pero a la fecha no se ha entregado el mapa georreferencial que oficializaría los bordes. Entretanto, la comunidad defiende haber adquirido legalmente el espacio en que construye su "hogar", pese a que las lluvias de la semana pasada les provocaron inundaciones.
Don Vicente Cabrera, por ejemplo, se dijo molesto porque el individuo al que le adquirió el predio le había confirmado que su casa no se inundaría, y, al ausentarse por un tiempo y llegar a "su terreno", observó que el agua estaba próxima a alcanzarlo, por lo que aceptó que podría haber "tirado su dinero a la basura".
"A mí me dieron a 300 pesos el metro, y son cuatro mil. Tengo un papel sellado por el ejido (...) Yo conozco a quien me vendió. Me dijo que la línea iba allá, que ahí sí era del Gobierno y de aquí para acá es de ejidatarios. Aquí este pedazo es mío".
Al tiempo que sus hijos le ayudaban a trazar las zonas donde eventualmente construirá una barda, "para evitar que el agua se le meta" cuando las lluvias azoten la ciudad, don Vicente expuso que cerca de 800 personas más estarían viviendo ahí en el vaso, todas con autorización del ejido de El Zapote.
Este medio entabló diálogo telefónico con uno de los "dueños" de los terrenos en venta que se ofertan en carteles. El hombre se identificó como Roberto Hinojosa y ofreció sus predios en 500 pesos por metro cuadrado. Aseguró que su oferta es buena, pues "hay otras personas que están vendiendo más caro" en zonas que, a diferencia de la suya, "sí se inundan".
Incluso, para cerrar trato explicó la función de "desvío de aguas" que tendrían "las dos tratadoras" que están cerca (en referencia a la macro planta de tratamiento de aguas residuales de El Ahogado), que según se le ha informado, retirarían el líquido y "lo enviarían a las empresas".
"Ahí conmigo nunca se ha inundado; es un llano que está ahí. Hay otros terrenos que están más abajito donde el agua sí llega, pero yo le decía a otra persona que me habló, que al frente de donde están los terrenos están dos tratadoras que están acabando de hacer, y toda esa agua que está por ahí la van a jalar para tratarla, para mandarla a las empresas".
La oferta, dijo, sería más atractiva, pues en adición a que el agua se retiraría, la que caería después estaría limpia. Concluyó que sus papeles están en regla y que no habría ningún problema por comprar y construir en una zona próxima al cuerpo de agua que durante las lluvias comenzará a llenarse.
Esta mañana, la Comisión Estatal del Agua (CEA) realizó una visita guiada a las zonas en construcción; ahí se pudo constatar que hay varias residencias y terrenos planeados para construir eventualmente. Uno de los predios construidos, incluso, fue habilitado como "tiendita" de víveres; otros están cercados; algunos cuentan con establos y otros tantos están abandonados.
La contaminación en la zona también es evidente, pues entre la basura arrojada se encuentran botellas de alcohol, escombro y llantas, hasta piezas enteras de vehículos, como salpicaderas, cofres y asientos.
EL INFORMADOR / ISAACK DE LOZA
A decir del director de Verificación de Edificación en esa localidad, Gilberto Chaires Muñoz, los compradores de estas porciones de tierra fueron engañados, pues el discurso que se les dio fue que una serie de vallas delimitaban lo que pertenece al ejido y lo que es propiedad de la nación. Esto pese a que ni siquiera el Ayuntamiento reconoce aún los límites federales y municipales del vaso.
Esa tarea, dijo, queda en manos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), pero a la fecha no se ha entregado el mapa georreferencial que oficializaría los bordes. Entretanto, la comunidad defiende haber adquirido legalmente el espacio en que construye su "hogar", pese a que las lluvias de la semana pasada les provocaron inundaciones.
Don Vicente Cabrera, por ejemplo, se dijo molesto porque el individuo al que le adquirió el predio le había confirmado que su casa no se inundaría, y, al ausentarse por un tiempo y llegar a "su terreno", observó que el agua estaba próxima a alcanzarlo, por lo que aceptó que podría haber "tirado su dinero a la basura".
"A mí me dieron a 300 pesos el metro, y son cuatro mil. Tengo un papel sellado por el ejido (...) Yo conozco a quien me vendió. Me dijo que la línea iba allá, que ahí sí era del Gobierno y de aquí para acá es de ejidatarios. Aquí este pedazo es mío".
Al tiempo que sus hijos le ayudaban a trazar las zonas donde eventualmente construirá una barda, "para evitar que el agua se le meta" cuando las lluvias azoten la ciudad, don Vicente expuso que cerca de 800 personas más estarían viviendo ahí en el vaso, todas con autorización del ejido de El Zapote.
Este medio entabló diálogo telefónico con uno de los "dueños" de los terrenos en venta que se ofertan en carteles. El hombre se identificó como Roberto Hinojosa y ofreció sus predios en 500 pesos por metro cuadrado. Aseguró que su oferta es buena, pues "hay otras personas que están vendiendo más caro" en zonas que, a diferencia de la suya, "sí se inundan".
Incluso, para cerrar trato explicó la función de "desvío de aguas" que tendrían "las dos tratadoras" que están cerca (en referencia a la macro planta de tratamiento de aguas residuales de El Ahogado), que según se le ha informado, retirarían el líquido y "lo enviarían a las empresas".
"Ahí conmigo nunca se ha inundado; es un llano que está ahí. Hay otros terrenos que están más abajito donde el agua sí llega, pero yo le decía a otra persona que me habló, que al frente de donde están los terrenos están dos tratadoras que están acabando de hacer, y toda esa agua que está por ahí la van a jalar para tratarla, para mandarla a las empresas".
La oferta, dijo, sería más atractiva, pues en adición a que el agua se retiraría, la que caería después estaría limpia. Concluyó que sus papeles están en regla y que no habría ningún problema por comprar y construir en una zona próxima al cuerpo de agua que durante las lluvias comenzará a llenarse.
Esta mañana, la Comisión Estatal del Agua (CEA) realizó una visita guiada a las zonas en construcción; ahí se pudo constatar que hay varias residencias y terrenos planeados para construir eventualmente. Uno de los predios construidos, incluso, fue habilitado como "tiendita" de víveres; otros están cercados; algunos cuentan con establos y otros tantos están abandonados.
La contaminación en la zona también es evidente, pues entre la basura arrojada se encuentran botellas de alcohol, escombro y llantas, hasta piezas enteras de vehículos, como salpicaderas, cofres y asientos.
EL INFORMADOR / ISAACK DE LOZA
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