Jalisco
Coronado se dice satisfecho por su gestión tras glosa del informe
Entre lo más cuestionado, en lo que a su dependencia respecta, estuvo el tema de los derechos humanos
GUADALAJARA, JALISCO (14/FEB/2013).- Un bombardeo de preguntas, muchas de las cuales iguales pero formuladas de distinta manera, fue lo que recibió el procurador del Estado, Tomás Coronado Olmos, la tarde de este jueves al acudir a la glosa del sexto Informe de Gobierno, ante el Congreso del Estado. Entre lo más cuestionado, en lo que a su dependencia respecta, estuvo el tema de los derechos humanos, los sistemas de interrogación de los aprehendidos y agentes del Ministerio Público consignados por actos de corrupción. La conclusión del funcionario fue que hizo un buen trabajo.
Al inicio, la sala de Ex Diputadas, donde tuvo lugar la glosa, aglomeró a 23 legisladores ávidos de inquirir al procurador. Entonces el presidente de la Comisión de Justicia del Congreso, Héctor Pizano Ramos, cedió la palabra a Coronado, quien a grosso modo describió los principales logros de su gestión al frente de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), como el inicio de prácticas de juicios orales, el Centro Vehicular de Entrega Inmediata, el stand de tiros virtuales y demás.
Y como ha ocurrido en las últimas legislaturas, las intervenciones de los diputados competían en resaltar los razonamientos de sus creadores. Fueron varias rondas de preguntas (que más que cuestionamientos, algunas rayaban en la opinión) con sus respectivas respuestas. El primero en hablar fue el priista Martín López Cedillo, quien preguntó, entre otras, que por qué cobraban el arrastre de los vehículos a las personas que se los roban, cuando los recuperan.
El panista Víctor Manuel Sánchez preguntó el lugar del estado a nivel nacional, en cuanto a los hechos violentos; y Clemente Castañeda, de Movimiento Ciudadano, quiso saber la razón de que sólo 7.9 por ciento de los delitos son investigados y el 0.5 por ciento concluyen en sanción, lo que atribuyó a la impunidad.
Sobre las grúas, Coronado respondió que porque la PGJE no cuenta con ellas para este servicio, pero las aseguradoras son las que se hacen cargo del pago; en cuanto al nivel de inseguridad y violencia, dijo que el Estado está por debajo de la media nacional; y con respecto a la impunidad en los delitos, explicó que no todo es competencia de la dependencia, además de que el número de casos aumenta más allá de las capacidades y de su personal.
En la segunda ronda, la priista Clara Gómez Caro preguntó por el número de quejas en 2012; y Roberto Mendoza, del PRI, que cuántos elementos hay consignados por corrupción.
El procurador contestó que hubo 284 quejas contra agentes del Ministerio Público; y que 132 servidores públicos fueron consignados en la administración: 21 de ellos en 2011 y 26 en 2012 por quejas o denuncias ciudadanas. Aseveró que, en cuanto a la tortura al momento de interrogar, siempre hay personal de la Comisión Estatal de Derechos Humanos presentes, además del abogado defensor.
En la siguiente ronda, el priista Hugo Gaeta Esparza fue el único que felicitó al procurador: "Me da gusto que haya cumplido su encargo", pero de cualquier manera cuestionó sobre los mecanismos para vigilar el actuar de la Policía Investigadora, y si están avalados por Derechos Humanos del estado.
(Hacia esa hora, ya sólo había 10 diputados distribuidos aleatoriamente, acaso porque su protagonismo en el interrogatorio ya había pasado. Algunos regresaban pero se iban de nuevo).
Coronado respondió que tienen tres órganos de control para vigilar a la Policía Investigadora: "No saben cómo son odiados, y tengo al visitador aquí a espaldas, al contralor y al de jurídico, en donde no se crean que sancionar a un ministerio público, a un policía investigador, que se la sabe de todas todas, sea fácil de consignar". Y repitió el número de agentes consignados.
Tras algunas participaciones más, concluyó la glosa.
El procurador atendió entonces a las preguntas de los medios, que eran los que faltaban: "Yo me siento orgulloso y satisfecho de haber concluido el periodo y con los resultados que tenemos, gracias a eso tenemos un estado tranquilo a diferencia de muchos estados que en un momento dado ya están descompuestos", aludió a otras entidades dentro de esta gran canasta llamada México.
EL INFORMADOR / SERGIO BLANCO
Al inicio, la sala de Ex Diputadas, donde tuvo lugar la glosa, aglomeró a 23 legisladores ávidos de inquirir al procurador. Entonces el presidente de la Comisión de Justicia del Congreso, Héctor Pizano Ramos, cedió la palabra a Coronado, quien a grosso modo describió los principales logros de su gestión al frente de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), como el inicio de prácticas de juicios orales, el Centro Vehicular de Entrega Inmediata, el stand de tiros virtuales y demás.
Y como ha ocurrido en las últimas legislaturas, las intervenciones de los diputados competían en resaltar los razonamientos de sus creadores. Fueron varias rondas de preguntas (que más que cuestionamientos, algunas rayaban en la opinión) con sus respectivas respuestas. El primero en hablar fue el priista Martín López Cedillo, quien preguntó, entre otras, que por qué cobraban el arrastre de los vehículos a las personas que se los roban, cuando los recuperan.
El panista Víctor Manuel Sánchez preguntó el lugar del estado a nivel nacional, en cuanto a los hechos violentos; y Clemente Castañeda, de Movimiento Ciudadano, quiso saber la razón de que sólo 7.9 por ciento de los delitos son investigados y el 0.5 por ciento concluyen en sanción, lo que atribuyó a la impunidad.
Sobre las grúas, Coronado respondió que porque la PGJE no cuenta con ellas para este servicio, pero las aseguradoras son las que se hacen cargo del pago; en cuanto al nivel de inseguridad y violencia, dijo que el Estado está por debajo de la media nacional; y con respecto a la impunidad en los delitos, explicó que no todo es competencia de la dependencia, además de que el número de casos aumenta más allá de las capacidades y de su personal.
En la segunda ronda, la priista Clara Gómez Caro preguntó por el número de quejas en 2012; y Roberto Mendoza, del PRI, que cuántos elementos hay consignados por corrupción.
El procurador contestó que hubo 284 quejas contra agentes del Ministerio Público; y que 132 servidores públicos fueron consignados en la administración: 21 de ellos en 2011 y 26 en 2012 por quejas o denuncias ciudadanas. Aseveró que, en cuanto a la tortura al momento de interrogar, siempre hay personal de la Comisión Estatal de Derechos Humanos presentes, además del abogado defensor.
En la siguiente ronda, el priista Hugo Gaeta Esparza fue el único que felicitó al procurador: "Me da gusto que haya cumplido su encargo", pero de cualquier manera cuestionó sobre los mecanismos para vigilar el actuar de la Policía Investigadora, y si están avalados por Derechos Humanos del estado.
(Hacia esa hora, ya sólo había 10 diputados distribuidos aleatoriamente, acaso porque su protagonismo en el interrogatorio ya había pasado. Algunos regresaban pero se iban de nuevo).
Coronado respondió que tienen tres órganos de control para vigilar a la Policía Investigadora: "No saben cómo son odiados, y tengo al visitador aquí a espaldas, al contralor y al de jurídico, en donde no se crean que sancionar a un ministerio público, a un policía investigador, que se la sabe de todas todas, sea fácil de consignar". Y repitió el número de agentes consignados.
Tras algunas participaciones más, concluyó la glosa.
El procurador atendió entonces a las preguntas de los medios, que eran los que faltaban: "Yo me siento orgulloso y satisfecho de haber concluido el periodo y con los resultados que tenemos, gracias a eso tenemos un estado tranquilo a diferencia de muchos estados que en un momento dado ya están descompuestos", aludió a otras entidades dentro de esta gran canasta llamada México.
EL INFORMADOR / SERGIO BLANCO
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