Jalisco
Continúa la alerta amarilla en el Volcán Colima
Protección Civil recomienda a la población que pretenda visitar las zonas cercanas al volcán o comunidades aledañas, no acampar en laderas o barrancas
GUADALAJARA, JALISCO.- Como parte de los trabajos permanentes de monitoreo, supervisión y análisis científico de la actividad del Volcán Colima, que lleva a cabo el Gobierno del Estado a través de la Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos (UEPCB), la mañana de ayer se realizó un nuevo sobrevuelo de observación del cono volcánico de dicho coloso a bordo del helicóptero del Gobierno del Estado.
La operación permitió la producción de material fotográfico que hace posible realizar mediciones y comparaciones con el fin de analizar el comportamiento del domo volcánico que inició su crecimiento a partir de febrero de 2007 y estimar las medidas precautorias pertinentes para salvaguardar a la población asentada en las cercanías del volcán.
Según estimaciones, el material rocoso acumulado en el cono actualmente cubre el 70 por ciento de la superficie del cráter y mide en su punto más elevado aproximadamente 55 metros de altura, rebasando por 15 metros los bordes del cráter volcánico.
El sobrevuelo de este lunes permitió observar que en el sector donde los bordes del cráter son más bajos, ya hay un acercamiento del material que se desprende del domo a las orillas, por lo que es posible que por este flanco del volcán se observen los primeros derrumbes de lava, sin que esto genere una situación de riesgo mayor a la población que habita en los alrededores del volcán.
La actividad asociada al crecimiento del domo ocasiona que se presenten en promedio seis exhalaciones diarias, sin que esta actividad haya generado hasta el momento afectaciones en los poblados aledaños por caída de ceniza.
Es importante señalar que la historia reciente de la actividad volcánica asociada al crecimiento de domos en el volcán El Colima, sugiere la posibilidad de eventos explosivos en un futuro no lejano, por lo que el semáforo se mantiene en alerta amarilla, continuando vigente la zona de exclusión que comprende un radio medio de 6.5 kilómetros en torno al cráter.
La operación permitió la producción de material fotográfico que hace posible realizar mediciones y comparaciones con el fin de analizar el comportamiento del domo volcánico que inició su crecimiento a partir de febrero de 2007 y estimar las medidas precautorias pertinentes para salvaguardar a la población asentada en las cercanías del volcán.
Según estimaciones, el material rocoso acumulado en el cono actualmente cubre el 70 por ciento de la superficie del cráter y mide en su punto más elevado aproximadamente 55 metros de altura, rebasando por 15 metros los bordes del cráter volcánico.
El sobrevuelo de este lunes permitió observar que en el sector donde los bordes del cráter son más bajos, ya hay un acercamiento del material que se desprende del domo a las orillas, por lo que es posible que por este flanco del volcán se observen los primeros derrumbes de lava, sin que esto genere una situación de riesgo mayor a la población que habita en los alrededores del volcán.
La actividad asociada al crecimiento del domo ocasiona que se presenten en promedio seis exhalaciones diarias, sin que esta actividad haya generado hasta el momento afectaciones en los poblados aledaños por caída de ceniza.
Es importante señalar que la historia reciente de la actividad volcánica asociada al crecimiento de domos en el volcán El Colima, sugiere la posibilidad de eventos explosivos en un futuro no lejano, por lo que el semáforo se mantiene en alerta amarilla, continuando vigente la zona de exclusión que comprende un radio medio de 6.5 kilómetros en torno al cráter.
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