Jalisco
Conaliteg: 50 años fabricando libros
México se puede sentir orgulloso de hacer una entrega de 200 millones de libros gratuitos a estudiantes de nivel básico
GUADALAJARA, JALISCO.- Desde su concepción en 1944, por el entonces secretario de Educación Pública, Jaime Torres Bodet, hasta su consolidación en 1959, durante el periodo presidencial de Adolfo López Mateos, el 12 de febrero de ese año, la
Comisión Nacional de Libro de Texto Gratuit
o (Conaliteg) es una de las instituciones del Estado mexicano que más han legado al aprendizaje de los niños y adultos del país.
A cincuenta años de distancia, su director, Miguel Agustín Limón Macías, habla de ésta institución.
— ¿Cómo cumple la Conaliteg 50 años?
— Cumple entregando libros como lo ha hecho desde sus inicios, ha sido la política pública educativa mexicana más exitosa y más continua. Ha permitido que muchas generaciones hayan estudiado, que muchos padres de familia hayan tenido la satisfacción de que sus hijos estudien.
— Cuando habla de política pública exitosa, vienen a la mente otros proyectos gubernamentales que han cedido a insumos privados. ¿La Conaliteg está exenta?
— Ha sido un instrumento del Estado mexicano que ha permitido la entrega de libros desde el mismo Estado, aunque hay dos elementos de relación con el sector privado; una es que imprimimos sólo 35 millones de libros, el resto lo hace la industria de artes gráficas; y por otra parte, la compra de 28 millones de libros por parte de las secundarias públicas generales y técnicas, escogidos por los maestros.
— En cuánto a la diversificación de los niños de México, ¿cómo opera el organismo?
— No sólo hacemos libros convencionales, tenemos en sistema braille, para débiles visuales en macrotipo y además, editamos ejemplares en 42 lenguas indígenas. Con esto se han atendido diferentes grupos. Además, buscamos generar libros bilingües, en ciencias y matemáticas para que sean aprovechados en México y distritos de Estados Unidos con gran presencia de hispanohablantes. Nos llevará dos años o más materializar esto. En Estados Unidos, sería materia complementaria a través de convenio, no sé cuántos lleguen a solicitar, lo que sí sé es que hay 32 millones de hispanos en Estados Unidos.
— En este sentido: ¿Cómo decide la Conaliteg qué se edita?
— La Conaliteg es un mandatario obediente; nosotros no decidimos qué publicar, lo hace la Subsecretaría de Educación Básica, en este caso.
— ¿Cómo festejan los 50 años?
— Por una parte, ha sido una celebración interna, el 12 febrero en las tres sedes de la Conaliteg: San Ángel, Tetexquinahuac y
Querétaro. Por otra parte, en septiembre realizaremos un encuentro con el Colegio de México y otras instituciones de educación superior. En diciembre participaremos en Jalisco, en el marco de la Feria Internacional del Libro (FIL)… se rendirá un homenaje, con dos reuniones de panel, sobre el libro de texto gratuito. El 24 de marzo, la Cámara de Diputados tendrá una sesión solemne en la que entregará un reconocimiento a la comisión.
— Lo dice muy emocionado….
— No hay otra institución como la Conaliteg.
— ¿Y en los países socialistas?
— No en la magnitud de México. México se puede sentir orgulloso de hacer una entrega de 200 millones de libros, como la realizamos este año y la realizaremos para el próximo ciclo escolar. Continuamente durante cincuenta años, ningún país entrega ocho libros por educando, garantizando la gratuidad, equidad e igualdad. Hay países que entregan a ciertos grupos o cada “x” año, pero para todas las asignaturas, todos los alumnos y durante 50 años, ningún país lo ha hecho.
— ¿Cuánto cuesta un libro?
— El libro de primaria costó seis pesos 76 centavos, lo que es directamente hacerlo, y el de secundaria poco más de 32 pesos, que en términos de mercado, tanto uno como otro son muy económicos.
— Y en cuestiones presupuestales, ¿con qué trabajan?
— En la comisión, el año pasado, tuvimos poco menos de dos mil millones de pesos, y este año tendremos dos mil 155 millones de pesos; además crecimos 25%. Años atrás entregábamos 160 millones de libros, pero el año pasado fueron 200 millones por la incursión de los nuevos libros de Formación Cívica y Ética, para los seis grados de primaria; y por otra parte, el segundo tomo del libro de telesecundaria.
— ¿Tengo entendido que están exportando libros?
— Sí, de hecho estamos haciendo y estamos por entregar cuatro millones de libros de español para Honduras, solicitado por ellos y financiados por organismos internacionales. Y también hemos tenido relación con los ministerios de educación de las provincias del Norte de Argentina. Tuvimos visita del Ministerio de Educación de Chile, y en mayo estaremos allá y tendremos la oportunidad de intercambiar puntos de vista porque les interesa conocer el modelo que ha seguido la Conaliteg para entregar libros de texto gratuitamente a niños y niñas.
— ¿Esto abre una veta para la recepción de insumos?
— Abre una veta, pero lo más importante no es la comercialización, sino una presencia de algo que ha sido muy valioso en la educación mexicana, y de un modelo que ha funcionado y que otros países lo pueden aprovechar.
— Como ex secretario de Educación en Jalisco: ¿Cómo se siente en la Conaliteg?
— Feliz… feliz. Y el haber participado en la administración estatal, en ese cargo, me abrió un panorama muy importante.
— ¿Qué opinión le merece la discusión que se desata sobre todo en estados como Jalisco, en donde hay sectores que se oponen a algunos contenidos en torno a la sexualidad?
— El libro de texto y cualquier libro es sujeto de opiniones diversas y puede ser que algún grupo o persona, o cualquier publicación les parezca inadecuada, pero forma parte de la riqueza de la sociedad, de manifestar nuestras coincidencias y disidencias.
— ¿La era de la información impone nuevos formatos a los libros de texto?
— Estamos atentos a lo que se señale desde la Subsecretaría de Educación Básica, respecto al uso de nuevas tecnologías de información y comunicación. Ya en los libros de inglés de secundaria venimos acompañándolos de un CD, y también ya hemos trabajado la selección de libros de secundaria entre entidades, vía internet. En esto participa Jalisco.
— ¿Cómo opera esto?
— Normalmente se ha hecho que cada escuela llenaba unas papeletas, pero ahora se ha implementado un programa que permite que cada maestro, vía internet, elija su libro. El año pasado lo hicimos en Baja California, Colima y Zacatecas; ahora se suma Jalisco, Yucatán y Baja California Sur. Cada maestro hace su registro personal, tiene una clave de acceso y dentro de los libros que la Secretaría de Educación Pública avala, elige una opción.
— ¿Cuánta gente conforma la Conaliteg?
— Somos poco menos de 500 personas, es una institución pequeña para la tarea que tiene, una entrega de 200 millones de libros, más la prueba de Evaluación Nacional de Logro Académico en Centros Escolares (ENLACE). Además, hacemos libros para maestros y cualquier otro encargo. El año pasado hicimos un libro para la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
— ¿Cómo imagina a la Conaliteg en los próximos 50 años?
— Produciendo libros y produciendo a través de otros medios digitales. Creo que será fundamentalmente una administradora de conocimientos, contenidos, y que los pondrá a disposición de los educandos de aquella época.
FRASES
"No sólo hacemos libros convencionales, tenemos en sistema braille, para débiles visuales en macrotipo y además, editamos ejemplares en 42 lenguas indígenas"
"Buscamos generar libros bilingües, en ciencias y matemáticas para que sean aprovechados en México y distritos de Estados Unidos con gran presencia de hispanohablantes. Nos llevará dos años o más materializar esto"
A cincuenta años de distancia, su director, Miguel Agustín Limón Macías, habla de ésta institución.
— ¿Cómo cumple la Conaliteg 50 años?
— Cumple entregando libros como lo ha hecho desde sus inicios, ha sido la política pública educativa mexicana más exitosa y más continua. Ha permitido que muchas generaciones hayan estudiado, que muchos padres de familia hayan tenido la satisfacción de que sus hijos estudien.
— Cuando habla de política pública exitosa, vienen a la mente otros proyectos gubernamentales que han cedido a insumos privados. ¿La Conaliteg está exenta?
— Ha sido un instrumento del Estado mexicano que ha permitido la entrega de libros desde el mismo Estado, aunque hay dos elementos de relación con el sector privado; una es que imprimimos sólo 35 millones de libros, el resto lo hace la industria de artes gráficas; y por otra parte, la compra de 28 millones de libros por parte de las secundarias públicas generales y técnicas, escogidos por los maestros.
— En cuánto a la diversificación de los niños de México, ¿cómo opera el organismo?
— No sólo hacemos libros convencionales, tenemos en sistema braille, para débiles visuales en macrotipo y además, editamos ejemplares en 42 lenguas indígenas. Con esto se han atendido diferentes grupos. Además, buscamos generar libros bilingües, en ciencias y matemáticas para que sean aprovechados en México y distritos de Estados Unidos con gran presencia de hispanohablantes. Nos llevará dos años o más materializar esto. En Estados Unidos, sería materia complementaria a través de convenio, no sé cuántos lleguen a solicitar, lo que sí sé es que hay 32 millones de hispanos en Estados Unidos.
— En este sentido: ¿Cómo decide la Conaliteg qué se edita?
— La Conaliteg es un mandatario obediente; nosotros no decidimos qué publicar, lo hace la Subsecretaría de Educación Básica, en este caso.
— ¿Cómo festejan los 50 años?
— Por una parte, ha sido una celebración interna, el 12 febrero en las tres sedes de la Conaliteg: San Ángel, Tetexquinahuac y
Querétaro. Por otra parte, en septiembre realizaremos un encuentro con el Colegio de México y otras instituciones de educación superior. En diciembre participaremos en Jalisco, en el marco de la Feria Internacional del Libro (FIL)… se rendirá un homenaje, con dos reuniones de panel, sobre el libro de texto gratuito. El 24 de marzo, la Cámara de Diputados tendrá una sesión solemne en la que entregará un reconocimiento a la comisión.
— Lo dice muy emocionado….
— No hay otra institución como la Conaliteg.
— ¿Y en los países socialistas?
— No en la magnitud de México. México se puede sentir orgulloso de hacer una entrega de 200 millones de libros, como la realizamos este año y la realizaremos para el próximo ciclo escolar. Continuamente durante cincuenta años, ningún país entrega ocho libros por educando, garantizando la gratuidad, equidad e igualdad. Hay países que entregan a ciertos grupos o cada “x” año, pero para todas las asignaturas, todos los alumnos y durante 50 años, ningún país lo ha hecho.
— ¿Cuánto cuesta un libro?
— El libro de primaria costó seis pesos 76 centavos, lo que es directamente hacerlo, y el de secundaria poco más de 32 pesos, que en términos de mercado, tanto uno como otro son muy económicos.
— Y en cuestiones presupuestales, ¿con qué trabajan?
— En la comisión, el año pasado, tuvimos poco menos de dos mil millones de pesos, y este año tendremos dos mil 155 millones de pesos; además crecimos 25%. Años atrás entregábamos 160 millones de libros, pero el año pasado fueron 200 millones por la incursión de los nuevos libros de Formación Cívica y Ética, para los seis grados de primaria; y por otra parte, el segundo tomo del libro de telesecundaria.
— ¿Tengo entendido que están exportando libros?
— Sí, de hecho estamos haciendo y estamos por entregar cuatro millones de libros de español para Honduras, solicitado por ellos y financiados por organismos internacionales. Y también hemos tenido relación con los ministerios de educación de las provincias del Norte de Argentina. Tuvimos visita del Ministerio de Educación de Chile, y en mayo estaremos allá y tendremos la oportunidad de intercambiar puntos de vista porque les interesa conocer el modelo que ha seguido la Conaliteg para entregar libros de texto gratuitamente a niños y niñas.
— ¿Esto abre una veta para la recepción de insumos?
— Abre una veta, pero lo más importante no es la comercialización, sino una presencia de algo que ha sido muy valioso en la educación mexicana, y de un modelo que ha funcionado y que otros países lo pueden aprovechar.
— Como ex secretario de Educación en Jalisco: ¿Cómo se siente en la Conaliteg?
— Feliz… feliz. Y el haber participado en la administración estatal, en ese cargo, me abrió un panorama muy importante.
— ¿Qué opinión le merece la discusión que se desata sobre todo en estados como Jalisco, en donde hay sectores que se oponen a algunos contenidos en torno a la sexualidad?
— El libro de texto y cualquier libro es sujeto de opiniones diversas y puede ser que algún grupo o persona, o cualquier publicación les parezca inadecuada, pero forma parte de la riqueza de la sociedad, de manifestar nuestras coincidencias y disidencias.
— ¿La era de la información impone nuevos formatos a los libros de texto?
— Estamos atentos a lo que se señale desde la Subsecretaría de Educación Básica, respecto al uso de nuevas tecnologías de información y comunicación. Ya en los libros de inglés de secundaria venimos acompañándolos de un CD, y también ya hemos trabajado la selección de libros de secundaria entre entidades, vía internet. En esto participa Jalisco.
— ¿Cómo opera esto?
— Normalmente se ha hecho que cada escuela llenaba unas papeletas, pero ahora se ha implementado un programa que permite que cada maestro, vía internet, elija su libro. El año pasado lo hicimos en Baja California, Colima y Zacatecas; ahora se suma Jalisco, Yucatán y Baja California Sur. Cada maestro hace su registro personal, tiene una clave de acceso y dentro de los libros que la Secretaría de Educación Pública avala, elige una opción.
— ¿Cuánta gente conforma la Conaliteg?
— Somos poco menos de 500 personas, es una institución pequeña para la tarea que tiene, una entrega de 200 millones de libros, más la prueba de Evaluación Nacional de Logro Académico en Centros Escolares (ENLACE). Además, hacemos libros para maestros y cualquier otro encargo. El año pasado hicimos un libro para la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
— ¿Cómo imagina a la Conaliteg en los próximos 50 años?
— Produciendo libros y produciendo a través de otros medios digitales. Creo que será fundamentalmente una administradora de conocimientos, contenidos, y que los pondrá a disposición de los educandos de aquella época.
FRASES
"No sólo hacemos libros convencionales, tenemos en sistema braille, para débiles visuales en macrotipo y además, editamos ejemplares en 42 lenguas indígenas"
"Buscamos generar libros bilingües, en ciencias y matemáticas para que sean aprovechados en México y distritos de Estados Unidos con gran presencia de hispanohablantes. Nos llevará dos años o más materializar esto"
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