Jalisco
Conagua autoriza construcción de cortina para Presa de Arcediano
Si el Gobierno federal aporta 600 millones de pesos para comenzar las obras el próximo año, la cortina de concreto tardaría aproximadamente cuatro años en edificarse
GUADALAJARA, JALISCO.- La Comisión Nacional del Agua (Conagua) dio luz verde al proyecto de la cortina de Concreto Compactado con Rodillo (CCR) para la Presa de Arcediano, el cual fue presentado por la
Comisión Estatal del Agua (CEA) el pasado 17 de julio. Lo único que falta es la realización del estudio de viabilidad financiera, señaló el titular del organismo estatal, César Coll Carabias.
El oficio llegó justo el día que se cumplió el plazo de los 90 días hábiles para revisar el anteproyecto; en éste, la Conagua pide a la CEA que cumpla con cinco recomendaciones técnicas, entre las cuales están verificar la resistencia del concreto, la realización de un estudio sísmico mayor al que se había presentado y no utilizar bombas para las filtraciones de agua que se hacen en una presa.
Coll Carabias considera que el anteproyecto podría quedar concluirlo a finales de este año, para finalmente realizar el proyecto ejecutivo, con lo cual se cuantificará el costo total de la inversión. Por ello, la CEA pidió al Gobierno federal 600 millones de pesos para el próximo año, que permitirían iniciar las obras de desvío del Río Santiago. Si esto se cumple, la licitación de la cimentación de la cortina estaría lista el próximo año y a partir de esa fecha, se estiman cuatro años para finalizar las obras.
El pasado 2 de septiembre, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) confirmó que tiene dudas sobre el proyecto de la cortina, pues la mejor opción en costo y seguridad es la de materiales graduados.
Humberto Marengo Mogollón, coordinador de Proyectos Hidroeléctricos de la CFE, ratificó su postura: “Definitivamente nuestra propuesta sigue siendo la cortina de material graduado, de materiales flexibles capaces de adaptarse a una geología no necesariamente buena y con condiciones similares a las otras presas del Santiago que hemos resuelto”.
En su opinión, se tienen que hacer presas para abastecer de agua a la Zona Metropolitana de Guadalajara: “No hay duda que deben construirse; no digo que esos proyectos (…) Hay otras alternativas a Arcediano y El Zapotillo”.
Sin resolver, situación de sitios arqueológicos
Para realizar la Presa de Arcediano, la CEA tiene otro pendiente por resolver: la asignación de recursos para la excavación e investigación de tres sitios arqueológicos, ubicados en el área que pretende inundarse. Las obras no se pueden iniciar si no realizan el estudio que garantice el resguardo del patrimonio cultural.
Al respecto, los funcionarios de la CEA han repetido reiteradamente que ignoran el asunto, pues la administración pasada dejó muchos vacíos en distintas aristas. En los estudios solicitados a través de la Ley de Acceso a la Información Pública se especifica que invirtieron 333 mil 572 en el proyecto de salvamento arqueológico de las 800 hectáreas que presumiblemente se inundarán, es decir, de la primera etapa del convenio que el Gobierno del Estado firmó en 2004 con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Carlos López, investigador del Centro INAH Jalisco, a cargo de este proyecto, comenta que no han tenido comunicación con la CEA: “No podemos avanzar porque ellos tienen que dar el dinero. Creo que para esta etapa serían alrededor de unos 500 mil pesos”.
Explica que los sitios son de gran relevancia, aunque el área arqueológica no rebasa la extensión de una hectárea y media. En el lugar se encontraron tepalcates, petrograbados, cerámica y otras cimentaciones en la parte alta de la Barranca, pero no están amenazados por la probable inundación. La mayoría de los vestigios revelan similitudes con las culturas del Valle de Atemajac.
Para saber
El proyecto de la Presa de Arcediano tiene alrededor de ocho años detenido y ha sido cuestionado por la calidad del agua del Río Santiago —donde se construirá— y por la falla geológica que existe en la Barranca de Huentitán.
El oficio llegó justo el día que se cumplió el plazo de los 90 días hábiles para revisar el anteproyecto; en éste, la Conagua pide a la CEA que cumpla con cinco recomendaciones técnicas, entre las cuales están verificar la resistencia del concreto, la realización de un estudio sísmico mayor al que se había presentado y no utilizar bombas para las filtraciones de agua que se hacen en una presa.
Coll Carabias considera que el anteproyecto podría quedar concluirlo a finales de este año, para finalmente realizar el proyecto ejecutivo, con lo cual se cuantificará el costo total de la inversión. Por ello, la CEA pidió al Gobierno federal 600 millones de pesos para el próximo año, que permitirían iniciar las obras de desvío del Río Santiago. Si esto se cumple, la licitación de la cimentación de la cortina estaría lista el próximo año y a partir de esa fecha, se estiman cuatro años para finalizar las obras.
El pasado 2 de septiembre, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) confirmó que tiene dudas sobre el proyecto de la cortina, pues la mejor opción en costo y seguridad es la de materiales graduados.
Humberto Marengo Mogollón, coordinador de Proyectos Hidroeléctricos de la CFE, ratificó su postura: “Definitivamente nuestra propuesta sigue siendo la cortina de material graduado, de materiales flexibles capaces de adaptarse a una geología no necesariamente buena y con condiciones similares a las otras presas del Santiago que hemos resuelto”.
En su opinión, se tienen que hacer presas para abastecer de agua a la Zona Metropolitana de Guadalajara: “No hay duda que deben construirse; no digo que esos proyectos (…) Hay otras alternativas a Arcediano y El Zapotillo”.
Sin resolver, situación de sitios arqueológicos
Para realizar la Presa de Arcediano, la CEA tiene otro pendiente por resolver: la asignación de recursos para la excavación e investigación de tres sitios arqueológicos, ubicados en el área que pretende inundarse. Las obras no se pueden iniciar si no realizan el estudio que garantice el resguardo del patrimonio cultural.
Al respecto, los funcionarios de la CEA han repetido reiteradamente que ignoran el asunto, pues la administración pasada dejó muchos vacíos en distintas aristas. En los estudios solicitados a través de la Ley de Acceso a la Información Pública se especifica que invirtieron 333 mil 572 en el proyecto de salvamento arqueológico de las 800 hectáreas que presumiblemente se inundarán, es decir, de la primera etapa del convenio que el Gobierno del Estado firmó en 2004 con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Carlos López, investigador del Centro INAH Jalisco, a cargo de este proyecto, comenta que no han tenido comunicación con la CEA: “No podemos avanzar porque ellos tienen que dar el dinero. Creo que para esta etapa serían alrededor de unos 500 mil pesos”.
Explica que los sitios son de gran relevancia, aunque el área arqueológica no rebasa la extensión de una hectárea y media. En el lugar se encontraron tepalcates, petrograbados, cerámica y otras cimentaciones en la parte alta de la Barranca, pero no están amenazados por la probable inundación. La mayoría de los vestigios revelan similitudes con las culturas del Valle de Atemajac.
Para saber
El proyecto de la Presa de Arcediano tiene alrededor de ocho años detenido y ha sido cuestionado por la calidad del agua del Río Santiago —donde se construirá— y por la falla geológica que existe en la Barranca de Huentitán.
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