Jalisco
Caen presuntos narcomenudistas en Miravalle
Se confirmó que entre sus pertenencias contaban con 48 pequeños envoltorios que albergaban igual número de dosis con lo que al parecer se trataba de piedra base y cocaína en polvo
GUADALAJARA, JALISCO.- El mediodía de ayer, dos personas que contaban con varios reportes que los señalaban como activos narcomenudistas que operaban en la colonia Miravalle, de Guadalajara; fueron detenidos por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE).
Se trata Inés Octavio Dimas Escoto, de 22 años de edad; residente de la calle Andador José Ignacio Ávila, en esa colonia; y Vicente Jacob Nájera Díaz, de 39, vecino de la calle Yagul, en la colonia Pinar de la Calma.
La detención se llevó a cabo en el cruce de la Avenida Artes Plásticas y la calle Degas, en la colonia de referencia; cuando los activos estatales recibieron un reporte que hacía mención de dos sujetos que acostumbraban a usar ese punto para realizar ventas ilícitas de alcaloides.
Al llegar al sitio, los uniformados se percataron de la presencia de dos individuos que actuaban en una actitud extraña, y que además coincidían a la perfección con las características físicas descritas en el aviso anónimo.
Por este hecho, los oficiales se acercaron a los sospechosos con el fin de realizarles una revisión, lo cual evidenció un mayor nerviosismo de su parte.
Tras efectuar la inspección policial, se confirmó que entre sus pertenencias contaban con 48 pequeños envoltorios que albergaban igual número de dosis con lo que al parecer se trataba de piedra base y cocaína en polvo.
“Compré dos mil 350 pesos de droga (…) no me duran ni unas cuatro horas” señaló con una entrecortada voz Dimas Escoto, quien al parecer se encontraba bajo los efectos de algún alcaloide, dado su adormilado hablar.
Este individuo, quien dijo laborar como empleado de un contratista en Obras Públicas, señaló que la droga no era para venderla, sino que era para saciar su adicción a la misma.
“Tengo como unos seis años de adicto” dijo.
Por su parte, el otro detenido mencionó que el motivo de su arresto fue por estar en el momento y lugar equivocados, toda vez que “solamente iba caminando”.
“Iban los elementos de la seguridad pública (sic) y pues yo creo (Dimas Escoto) los vio y caminó a donde yo estaba; y llegaron y me detuvieron, pero yo no traía nada” manifestó en un titubeante discurso.
No obstante, el director de la Policía Auxiliar, Hernán Guízar Maldonado, indicó que eran constantes los señalamientos hacia estas personas, y por esta razón serán puestas a disposición de un agente del Ministerio Público para que determine su situación jurídica.
EL INFORMADOR / Isaack de Loza
Se trata Inés Octavio Dimas Escoto, de 22 años de edad; residente de la calle Andador José Ignacio Ávila, en esa colonia; y Vicente Jacob Nájera Díaz, de 39, vecino de la calle Yagul, en la colonia Pinar de la Calma.
La detención se llevó a cabo en el cruce de la Avenida Artes Plásticas y la calle Degas, en la colonia de referencia; cuando los activos estatales recibieron un reporte que hacía mención de dos sujetos que acostumbraban a usar ese punto para realizar ventas ilícitas de alcaloides.
Al llegar al sitio, los uniformados se percataron de la presencia de dos individuos que actuaban en una actitud extraña, y que además coincidían a la perfección con las características físicas descritas en el aviso anónimo.
Por este hecho, los oficiales se acercaron a los sospechosos con el fin de realizarles una revisión, lo cual evidenció un mayor nerviosismo de su parte.
Tras efectuar la inspección policial, se confirmó que entre sus pertenencias contaban con 48 pequeños envoltorios que albergaban igual número de dosis con lo que al parecer se trataba de piedra base y cocaína en polvo.
“Compré dos mil 350 pesos de droga (…) no me duran ni unas cuatro horas” señaló con una entrecortada voz Dimas Escoto, quien al parecer se encontraba bajo los efectos de algún alcaloide, dado su adormilado hablar.
Este individuo, quien dijo laborar como empleado de un contratista en Obras Públicas, señaló que la droga no era para venderla, sino que era para saciar su adicción a la misma.
“Tengo como unos seis años de adicto” dijo.
Por su parte, el otro detenido mencionó que el motivo de su arresto fue por estar en el momento y lugar equivocados, toda vez que “solamente iba caminando”.
“Iban los elementos de la seguridad pública (sic) y pues yo creo (Dimas Escoto) los vio y caminó a donde yo estaba; y llegaron y me detuvieron, pero yo no traía nada” manifestó en un titubeante discurso.
No obstante, el director de la Policía Auxiliar, Hernán Guízar Maldonado, indicó que eran constantes los señalamientos hacia estas personas, y por esta razón serán puestas a disposición de un agente del Ministerio Público para que determine su situación jurídica.
EL INFORMADOR / Isaack de Loza
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