Jalisco

Buscan disminuir robo y tráfico de cobre en Jalisco

Miguel Castro propone incrementar las penas para aquellos negocios que adquieran bienes que fueron producto de algún ilícito

GUADALAJARA, JALISCO (21/ENE/2015).- Con la finalidad de disminuir el robo del cableado de acero en las calles de la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG), el presidente de la Comisión de Hacienda, Miguel Castro Reynoso presentó una iniciativa para reformar el Código Penal en la Entidad.

El legislador propone incrementar las penas para aquellos negocios que adquieran bienes que fueron producto de algún ilícito como el robo.

"Lo que buscamos es ser más enérgicos con el tema de la chatarra y lo robado porque no hay una ley que castigue de manera ejemplar este tema y la responsabilidad de carácter penal en muchos casos está limitada", dijo el legislador.

Castro Reynoso reconoció que actualmente existen deficiencias en el Código Penal referente a la "Adquisición Ilegítima de Bienes Materia de un Delito o de una Infracción Penal", denominado por otras legislaciones como "Encubrimiento por Recepción".

Por ello, la propuesta del legislador tricolor pretende reformar el Artículo 265 del Código Penal del Estado.

"Esta es una iniciativa de ley que atiende no sólo a las casas de empeño, sino también al tema de las chatarreras. Lo que proponemos es que haya una mayor regulación y control porque hoy una persona puede llegar a vender un producto sin tener factura o responsabilidad por parte de los que son dueños de estos negocios".

La propuesta de reforma al Código Penal:

-Definir el tipo penal que suprime la condición de acreditar que el delito es cometido con pretensiones de lucro.

-El delito lo comente quien encubre el robo, extendiéndose la definición a cualquier clase de delito, entre los que pueden
quedar incluidos el fraude y la extorsión.

-Se establecen todas las posibles hipótesis como la adquisición ilegítima de bienes materia de delito, lo que incluye el supuesto de empeño, desmantelamiento, fusión, comercialización, uso, traslado y tráfico.

Propone la reclasificación de las sanciones en este delito, para hacerla, justa, bajo el siguiente esquema:

Si el valor de lo robado equivalente a dos mil 103 pesos, la sanción será de 20 a 50 jornadas de trabajo comunitario y hasta 500 salarios de multa, 35 mil pesos.

Si el valor del objeto es entre dos mil 103 y 21 mil pesos, la sanción sería de seis meses a cuatro años de prisión y entre 500 y mil 500 días de salario mínimo de multa, hasta 105 mil pesos.

Si el valor supera los 21 mil pesos, la sanción iría de cuatro a 10 años de prisión y entre mil y dos mil días de salario mínimo de multa, 140 mil pesos.

Las sanciones se incrementan una tercera parte si el bien robado es necesario para la prestación de un servicio público.

Telón de Fondo

En 2013, las autoridades municipales de Guadalajara y Zapopan prendieron focos rojos por el robo de los cables de cobre que conectan las luminarias en ambos municipios. De acuerdo con datos proporcionados por la Dirección de Alumbrado Público de la capital del Estado, mientras que la dependencia disponía de un presupuesto anual de cuatro millones 500 mil pesos para comprar repuestos, las pérdidas que tiene registradas ascienden a un millón 150 mil pesos mensuales, en promedio.

Ante esto, lo que la dependencia hace es reparar el daño pero no con cable de cobre, por el que se llega a pagar en las chatarrerías hasta 100 pesos por kilogramo, sino comenzar a instalar cables de aluminio.

En Zapopan, al iniciar la actual administración se tenía cuantificado el robo de cable por un monto, aproximado, de 200 mil pesos mensuales, para el año 2013se registraron pérdidas que rondan el millón de pesos en tan solo 30 días, reveló el director de Servicios Públicos Municipales, Enrique Rodríguez Magaña.

En este municipio, las colonias con más vandalismo en el robo a cable son Arenales Tapatíos, San Ignacio y Chapalita.

En el Ayuntamiento de Zapopan, el monto en 2013 para la compra de refacciones en el área de Alumbrado Público superó los 13 millones de pesos.

EL INFORMADOR / ZAIRA RAMÍREZ
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