Jalisco
Biblioteca Pública tendrá dos millones de libros
Entre los documentos se encuentran libros que datan de los años 1450 y 1500, así como los primeros impresos que hubo en México
GUADALAJARA, JALISCO.- Debido a que la Biblioteca Pública del Estado de Jalisco no sólo alberga la memoria documental de nuestra Entidad, sino también la del Norte y Noroeste de México, así como la del Sur de los Estados Unidos, sus nuevas instalaciones, que se edifican en el Centro Cultural Universitario (CCU), tendrán la capacidad del albergar hasta dos millones de volúmenes, asegura su director, Juan Manuel Durán Juárez.
El corpus de documentos que se encuentra bajo el resguardo de la biblioteca está compuesto de 13 “incunables”, es decir, libros del periodo del nacimiento de la imprenta, entre los años 1450 y 1500; dos mil 280 libros del Siglo XVI, que llegaron a nuestra ciudad procedentes de Europa en el periodo colonial; los primeros impresos que hubo en México; un archivo del Fondo Franciscano, así como una colección de códices.
Este grupo de documentos forma parte de lo que las autoridades de la Biblioteca llaman “el tesoro”, en donde también se encuentran un total de 128 libros de alto valor etnográfico, escritos en 23 lenguas indígenas, a los que la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, por sus siglas en inglés) certificó como parte de la memoria documental del mundo.
Además, cuenta con 152 mil libros históricos; la colección “Misceláneas”, que consta de 906 encuadernaciones de folletería; el archivo de la Real Audiencia de la Nueva Galicia, que da cuenta de las acciones emprendidas por ese juzgado colonial desde 1541 a 1822; el archivo del Supremo Tribunal de Justicia, que va desde 1824 hasta la década de 1940, “que es un material valiosísimo para la reconstrucción de la vida social, económica, política y cultural del Estado”, según explica el director.
La hemeroteca contiene material desde 1821 hasta la fecha, no obstante, ésta también contiene algunos ejemplares de periódicos como “El Telégrafo”, que fueron editados en Guadalajara antes del inicio del periodo independentista.
Las nuevas instalaciones de la Biblioteca Pública del Estado “Juan José Arreola” también albergarán los 112 mil volúmenes del Fondo Jorge Álvarez del Castillo, “que es un fondo muy valioso en términos históricos y contemporáneos de Jalisco”, así como los 35 mil libros del Fondo Paul Rivet, que fue donado por el Gobierno francés, y por el cual se compitió con la Biblioteca Miguel Lerdo de Tejada, de la Secretaría de Hacienda, para su resguardo.
TELÓN DE FONDO
El origen
La Biblioteca Pública del Estado de Jalisco nació en 1861 en lo que actualmente son las instalaciones del Museo Regional.
Posteriormente, en 1875, pasó al Agua Azul, donde permaneció hasta la inauguración de su actual sede, en 1959.
Según el primer anuncio hecho en marzo de 2008 por parte de las autoridades del Centro Cultural Universitario (CCU), de la Universidad de Guadalajara (UdeG), la nueva sede de la Biblioteca Pública del Estado “Juan José Arreola” estaría lista en agosto de 2009, plazo que no se cumplió. Desde entonces, los documentos comenzaron a guardarse para su traslado y ahora la memoria histórica de la Entidad está en cajas, sin las condiciones adecuadas para su conservación.
El corpus de documentos que se encuentra bajo el resguardo de la biblioteca está compuesto de 13 “incunables”, es decir, libros del periodo del nacimiento de la imprenta, entre los años 1450 y 1500; dos mil 280 libros del Siglo XVI, que llegaron a nuestra ciudad procedentes de Europa en el periodo colonial; los primeros impresos que hubo en México; un archivo del Fondo Franciscano, así como una colección de códices.
Este grupo de documentos forma parte de lo que las autoridades de la Biblioteca llaman “el tesoro”, en donde también se encuentran un total de 128 libros de alto valor etnográfico, escritos en 23 lenguas indígenas, a los que la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, por sus siglas en inglés) certificó como parte de la memoria documental del mundo.
Además, cuenta con 152 mil libros históricos; la colección “Misceláneas”, que consta de 906 encuadernaciones de folletería; el archivo de la Real Audiencia de la Nueva Galicia, que da cuenta de las acciones emprendidas por ese juzgado colonial desde 1541 a 1822; el archivo del Supremo Tribunal de Justicia, que va desde 1824 hasta la década de 1940, “que es un material valiosísimo para la reconstrucción de la vida social, económica, política y cultural del Estado”, según explica el director.
La hemeroteca contiene material desde 1821 hasta la fecha, no obstante, ésta también contiene algunos ejemplares de periódicos como “El Telégrafo”, que fueron editados en Guadalajara antes del inicio del periodo independentista.
Las nuevas instalaciones de la Biblioteca Pública del Estado “Juan José Arreola” también albergarán los 112 mil volúmenes del Fondo Jorge Álvarez del Castillo, “que es un fondo muy valioso en términos históricos y contemporáneos de Jalisco”, así como los 35 mil libros del Fondo Paul Rivet, que fue donado por el Gobierno francés, y por el cual se compitió con la Biblioteca Miguel Lerdo de Tejada, de la Secretaría de Hacienda, para su resguardo.
TELÓN DE FONDO
El origen
La Biblioteca Pública del Estado de Jalisco nació en 1861 en lo que actualmente son las instalaciones del Museo Regional.
Posteriormente, en 1875, pasó al Agua Azul, donde permaneció hasta la inauguración de su actual sede, en 1959.
Según el primer anuncio hecho en marzo de 2008 por parte de las autoridades del Centro Cultural Universitario (CCU), de la Universidad de Guadalajara (UdeG), la nueva sede de la Biblioteca Pública del Estado “Juan José Arreola” estaría lista en agosto de 2009, plazo que no se cumplió. Desde entonces, los documentos comenzaron a guardarse para su traslado y ahora la memoria histórica de la Entidad está en cajas, sin las condiciones adecuadas para su conservación.
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