Jalisco
Auditoría revela desorden financiero en el IMAJ
Informe de la Contraloría Municipal documenta falsificación de facturas y gastos sin comprobar por 600 mil pesos
GUADALAJARA, JAL.- Los resultados finales de la auditoría realizada por la Contraloría Municipal a los ejercicios fiscales 2006 y 2007 del Instituto Municipal de Atención a la Juventud (IMAJ) de Guadalajara, de los cuales EL INFORMADOR tiene una copia, revelan un “desorden financiero” en el organismo.
De acuerdo con el informe presentado el 12 de noviembre de este año por la Contraloría Municipal, no fue comprobado el gasto de al menos 598 mil 740.43 pesos por parte del IMAJ, por lo que se recomienda que se instauren los procedimientos de responsabilidad administrativa que correspondan en contra de Carlos Salinas Osornio y Carlos Arturo López Flores, directores del organismo durante 2006 y 2007, respectivamente.
Además se precisa que de encontrarse otro tipo de responsabilidades, éstas deben turnarse a la autoridad competente para que emita una resolución o se interpongan las denuncias conducentes.
Del monto total de gastos sin comprobar, 461 mil 848.99 pesos corresponden al ejercicio 2006 y 136 mil 891.44 pesos corresponden a 2007.
“Derivado del análisis de las aclaraciones y justificaciones proporcionadas, se derivan presuntas responsabilidades a cargo de los directores generales del Instituto Municipal de Atención a la Juventud, Carlos Salinas Osornio durante 2006 y Carlos Arturo López Flores en 2007, por las observaciones ‘tipo C’ (que afectan al erario público) contenidas en el presente informe”.
“Por tratarse de empleados de un Organismo Público Descentralizado, sugerimos al presidente municipal, determine la dependencia que habrá de evaluar las situaciones contenidas en el presente informe para que en su caso, inicie el procedimiento de responsabilidad administrativa y, de encontrarse otro tipo de responsabilidades, las turne a la autoridad competente para su resolución o denuncia correspondiente”, indica el documento signado por el contralor tapatío, Armando Villalobos González.
La auditoría fue ordenada por el pleno del Ayuntamiento tapatío, el 4 de octubre de 2007 y las aclaraciones que se desprenden de la revisión, están clasificadas en tres categorías: “A”, que son las que solventan plenamente las observaciones; “B”, que son las que no solventan las observaciones, pero que implican medidas preventivas a futuro; y “C” que son las aclaraciones que no solventan la observación y que afectan al erario público.
Sobre esta última categoría, en el ejercicio fiscal de 2006, el cual estuvo a cargo de Carlos Salinas Osornio, en ese periodo director del organismo y actual secretario particular del alcalde tapatío, Alfonso Petersen Farah; destaca que presumiblemente se intentaron falsificar facturas para comprobar gastos, por un monto total de 35 mil 200 pesos.
En todos los casos, se trata de facturación cuya fecha de impresión es posterior a la fecha de emisión, por lo que se presume que se trata de documentos falsificados.
Las facturas fueron emitidas por las empresas Wall Mkt Entertainment S. de R.L. de C.V. y Soluciones Impresas ASI, S.A. de C.V.
En otra de las facturas observadas, emitida por Heurística Comunicación, S.C. se duda de que el proveedor la haya suscrito, por lo que la Contraloría la turnó al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, para que determine su autenticidad.
Otras de las observaciones graves a la administración de Salinas Osornio, es que no se liquidó el importe de 225 mil 729.26 pesos a la autoridad fiscal por concepto del Impuesto Sobre el Producto del Trabajo (ISPT). Tampoco se aclararon 33 mil 091.98 pesos de diferencia entre el ISPT y lo que se les retuvo por este concepto a los trabajadores en sus recibos de nómina de enero a octubre de 2006.
Ante esta situación, la Contraloría recomendó en su informe, que se finque un crédito fiscal al funcionario responsable, para que el municipio recupere el importe que injustificadamente tendrá que pagar por la omisión de esta obligación fiscal.
El IMAJ además emitió una serie de boletos para allegarse de recursos, con la intención de realizar la Semana Municipal de la Juventud 2006, sin embargo por estos talones únicamente se registró un ingreso de 100 pesos. Lo anterior a pesar de que existen evidencias de que los boletos emitidos llegaron hasta el número 600, cada uno con un valor de 100 pesos.
Se adquirieron 92 cuadros por 17 mil 798.91 pesos, de los cuales 56 se utilizarían para decorar la Casa de la Juventud, pero al momento de la revisión, la Contraloría descubrió que físicamente no existe ninguno de los 92 marcos citados.
También se detectó un gasto de 133 mil 878.31 pesos sin documentación de soporte, de los cuales quedaron pendientes por comprobar 73 mil 959.25 pesos.
Dentro de las recomendaciones “tipo B”, se menciona que durante 2006, el IMAJ no tiene soporte documental o evidencia del pago de sueldos al personal del instituto por un monto de 675 mil 711 pesos. Adicionalmente se detectó una diferencia de 244 mil 515.45 pesos entre los pagos bancarios y comprobantes.
En lo que corresponde al gasto en telefonía fija, la Contraloría encontró “consumos excesivos” por llamadas a números celulares. Tan sólo durante marzo, mayo y junio de 2006 se consumieron 15 mil 714.75, 20 mil 771.87 y 10 mil 715 pesos, respectivamente.
Ejercicio 2007 del IMAJ
En lo que se refiere al ejercicio fiscal de 2007 del IMAJ, la Contraloría Municipal encontró en el rubro de las observaciones “tipo C”, que el organismo, actualmente dirigido por Carlos Arturo López Flores, no contabilizó las retenciones a los trabajadores por concepto de ISPT, además de que tampoco se liquidó el importe de este impuesto a la autoridad fiscal correspondiente. Al igual que en 2006, la Contraloría recomienda que se finque un crédito fiscal al funcionario responsable, para que el municipio recupere la erogación que injustificadamente tendrá que realizar por el estado de mora en obligaciones fiscales.
También se detectó que el cálculo del Impuesto Sobre la Renta a cargo de los trabajadores, no se efectuó con las bases fiscales aplicables, por lo se recaudó un monto menor. Según las estimaciones de la Contraloría debieron ser retenidos 399 mil 799.30 pesos, empero únicamente se obtuvieron 272 mil 856.62 pesos.
De nueva cuenta, se erogaron 185 mil pesos para pagar los servicios de la empresa Heurística Comunicación, cuyas facturas “no denotan el servicio pagado por el instituto”, además de que se omitieron los contratos correspondientes.
En esta observación la Contraloría, destaca que los cheques emitidos fueron recibidos por López Flores “sin aparente justificación”, ya que es el proveedor quien debe recibir el pago de los servicios. “No existe evidencia de que a su vez el servidor público citado, haya entregado el cheque a su beneficiario”, revela el informe.
Como observaciones “tipo B”, resalta que el propio López Flores se autorizó desde el 15 de junio de 2007, un aumento de 64% al pasar de 33 mil 767.38 a 55 mil 423 pesos mensuales. Lo anterior, sin que el incremento haya sido avalado por la junta de gobierno del organismo, la cual funge como la máxima autoridad de la dependencia.
Adicionalmente se detectó que el director del instituto, en un viaje realizado a la Ciudad de México, se hospedó al menos en una ocasión en el Hotel Nikko de categoría Gran Turismo, lo cual “se contrapone al principio de austeridad del municipio”.
De acuerdo con el informe presentado el 12 de noviembre de este año por la Contraloría Municipal, no fue comprobado el gasto de al menos 598 mil 740.43 pesos por parte del IMAJ, por lo que se recomienda que se instauren los procedimientos de responsabilidad administrativa que correspondan en contra de Carlos Salinas Osornio y Carlos Arturo López Flores, directores del organismo durante 2006 y 2007, respectivamente.
Además se precisa que de encontrarse otro tipo de responsabilidades, éstas deben turnarse a la autoridad competente para que emita una resolución o se interpongan las denuncias conducentes.
Del monto total de gastos sin comprobar, 461 mil 848.99 pesos corresponden al ejercicio 2006 y 136 mil 891.44 pesos corresponden a 2007.
“Derivado del análisis de las aclaraciones y justificaciones proporcionadas, se derivan presuntas responsabilidades a cargo de los directores generales del Instituto Municipal de Atención a la Juventud, Carlos Salinas Osornio durante 2006 y Carlos Arturo López Flores en 2007, por las observaciones ‘tipo C’ (que afectan al erario público) contenidas en el presente informe”.
“Por tratarse de empleados de un Organismo Público Descentralizado, sugerimos al presidente municipal, determine la dependencia que habrá de evaluar las situaciones contenidas en el presente informe para que en su caso, inicie el procedimiento de responsabilidad administrativa y, de encontrarse otro tipo de responsabilidades, las turne a la autoridad competente para su resolución o denuncia correspondiente”, indica el documento signado por el contralor tapatío, Armando Villalobos González.
La auditoría fue ordenada por el pleno del Ayuntamiento tapatío, el 4 de octubre de 2007 y las aclaraciones que se desprenden de la revisión, están clasificadas en tres categorías: “A”, que son las que solventan plenamente las observaciones; “B”, que son las que no solventan las observaciones, pero que implican medidas preventivas a futuro; y “C” que son las aclaraciones que no solventan la observación y que afectan al erario público.
Sobre esta última categoría, en el ejercicio fiscal de 2006, el cual estuvo a cargo de Carlos Salinas Osornio, en ese periodo director del organismo y actual secretario particular del alcalde tapatío, Alfonso Petersen Farah; destaca que presumiblemente se intentaron falsificar facturas para comprobar gastos, por un monto total de 35 mil 200 pesos.
En todos los casos, se trata de facturación cuya fecha de impresión es posterior a la fecha de emisión, por lo que se presume que se trata de documentos falsificados.
Las facturas fueron emitidas por las empresas Wall Mkt Entertainment S. de R.L. de C.V. y Soluciones Impresas ASI, S.A. de C.V.
En otra de las facturas observadas, emitida por Heurística Comunicación, S.C. se duda de que el proveedor la haya suscrito, por lo que la Contraloría la turnó al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, para que determine su autenticidad.
Otras de las observaciones graves a la administración de Salinas Osornio, es que no se liquidó el importe de 225 mil 729.26 pesos a la autoridad fiscal por concepto del Impuesto Sobre el Producto del Trabajo (ISPT). Tampoco se aclararon 33 mil 091.98 pesos de diferencia entre el ISPT y lo que se les retuvo por este concepto a los trabajadores en sus recibos de nómina de enero a octubre de 2006.
Ante esta situación, la Contraloría recomendó en su informe, que se finque un crédito fiscal al funcionario responsable, para que el municipio recupere el importe que injustificadamente tendrá que pagar por la omisión de esta obligación fiscal.
El IMAJ además emitió una serie de boletos para allegarse de recursos, con la intención de realizar la Semana Municipal de la Juventud 2006, sin embargo por estos talones únicamente se registró un ingreso de 100 pesos. Lo anterior a pesar de que existen evidencias de que los boletos emitidos llegaron hasta el número 600, cada uno con un valor de 100 pesos.
Se adquirieron 92 cuadros por 17 mil 798.91 pesos, de los cuales 56 se utilizarían para decorar la Casa de la Juventud, pero al momento de la revisión, la Contraloría descubrió que físicamente no existe ninguno de los 92 marcos citados.
También se detectó un gasto de 133 mil 878.31 pesos sin documentación de soporte, de los cuales quedaron pendientes por comprobar 73 mil 959.25 pesos.
Dentro de las recomendaciones “tipo B”, se menciona que durante 2006, el IMAJ no tiene soporte documental o evidencia del pago de sueldos al personal del instituto por un monto de 675 mil 711 pesos. Adicionalmente se detectó una diferencia de 244 mil 515.45 pesos entre los pagos bancarios y comprobantes.
En lo que corresponde al gasto en telefonía fija, la Contraloría encontró “consumos excesivos” por llamadas a números celulares. Tan sólo durante marzo, mayo y junio de 2006 se consumieron 15 mil 714.75, 20 mil 771.87 y 10 mil 715 pesos, respectivamente.
Ejercicio 2007 del IMAJ
En lo que se refiere al ejercicio fiscal de 2007 del IMAJ, la Contraloría Municipal encontró en el rubro de las observaciones “tipo C”, que el organismo, actualmente dirigido por Carlos Arturo López Flores, no contabilizó las retenciones a los trabajadores por concepto de ISPT, además de que tampoco se liquidó el importe de este impuesto a la autoridad fiscal correspondiente. Al igual que en 2006, la Contraloría recomienda que se finque un crédito fiscal al funcionario responsable, para que el municipio recupere la erogación que injustificadamente tendrá que realizar por el estado de mora en obligaciones fiscales.
También se detectó que el cálculo del Impuesto Sobre la Renta a cargo de los trabajadores, no se efectuó con las bases fiscales aplicables, por lo se recaudó un monto menor. Según las estimaciones de la Contraloría debieron ser retenidos 399 mil 799.30 pesos, empero únicamente se obtuvieron 272 mil 856.62 pesos.
De nueva cuenta, se erogaron 185 mil pesos para pagar los servicios de la empresa Heurística Comunicación, cuyas facturas “no denotan el servicio pagado por el instituto”, además de que se omitieron los contratos correspondientes.
En esta observación la Contraloría, destaca que los cheques emitidos fueron recibidos por López Flores “sin aparente justificación”, ya que es el proveedor quien debe recibir el pago de los servicios. “No existe evidencia de que a su vez el servidor público citado, haya entregado el cheque a su beneficiario”, revela el informe.
Como observaciones “tipo B”, resalta que el propio López Flores se autorizó desde el 15 de junio de 2007, un aumento de 64% al pasar de 33 mil 767.38 a 55 mil 423 pesos mensuales. Lo anterior, sin que el incremento haya sido avalado por la junta de gobierno del organismo, la cual funge como la máxima autoridad de la dependencia.
Adicionalmente se detectó que el director del instituto, en un viaje realizado a la Ciudad de México, se hospedó al menos en una ocasión en el Hotel Nikko de categoría Gran Turismo, lo cual “se contrapone al principio de austeridad del municipio”.
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