Internacional
Zelaya rechaza regresar al poder
El depuesto presidente de Honduras manda una carta a Obama, en la cual da a conocer que no avalará las elecciones del 29 de noviembre próximo
En una carta dirigida al mandatario estadounidense Barack Obama, Zelaya afirmó que no aceptará retornar a la Presidencia si para ello tiene que avalar las elecciones del 29 de noviembre próximo, pues esos comicios buscan legitimar su derrocamiento.
"Realizar elecciones mientras el presidente de Honduras, a quien reconoce su pueblo y la comunidad internacional, está prisionero y rodeado por militares en la sede diplomática de Brasil, será una vergüenza histórica", puntualizó el destituido gobernante.
Esta noche Zelaya leyó en vivo para la televisora brasileña O Globo la misiva dirigida a Obama, contra quién ha endurecido sus críticas en las últimas semanas porque no ha exigido su inmediata e incondicional restitución en el gobierno de Honduras.
"Reafirmo mi decisión de que a partir de esta fecha, cualquiera que fuera el caso, yo no acepto ningún acuerdo de retorno a la Presidencia para encubrir el golpe de Estado", sentenció.
El depuesto mandatario adelantó que impugnará los resultados de las elecciones generales, convocadas desde mayo pasado y que el gobierno de facto se prepara para llevar a cabo, pese a que la comunidad internacional le ha exigido primero restituir a Zelaya.
El pasado 30 de octubre los negociadores de Zelaya y del gobierno de facto, que encabeza Roberto Micheletti, firmaron un acuerdo para formar un "gobierno de unidad" que pusiera fin a la crisis política que vive el país centroamericano desde el 28 de junio.
El acuerdo se firmó en presencia de un enviado de Obama, el subsecretario de Estado para América Latina, Thomas Shannon, en lo que analistas internacionales interpretaron como un gran paso para el regreso de Zelaya al poder.
Sin embargo, una semana después Micheletti se autodesignó presidente del "gobierno de unidad" y alegó que Zelaya no le había enviado propuestas para integrar dicha administración transitoria.
Zelaya calificó como una burla la jugada política de Micheletti y declaró rotas las negociaciones, mientras el proceso para llevar a cabo las elecciones continúa con gran difusión en la prensa partidaria de los golpistas.
El denominado Acuerdo de Tegucigalpa-San José estableció también que sería el Congreso la instancia que decidiría si Zelaya debía ser restituido, pero los congresistas -quienes en junio avalaron el golpe de Estado- han retardado la sesión en que esa decisión debe ser tomada.
Manuel Zelaya ha afirmado en varias ocasiones que Barack Obama tiene en sus manos la solución a la crisis hondureña y le ha criticado que no exija clara y directamente su restitución en la Presidencia.
Síguenos en