Internacional
Zelaya podría regresar a fines de mayo a Honduras
Colombia y Venezuela son los responsables del proceso para el regreso de Zelaya a Honduras y de la reincorporación del país centroamericano a la OEA
TEGUCIGALPA, HONDURAS (17/MAY/2011).-El derrocado presidente Manuel Zelaya podría regresar entre el 27 y 29 de mayo si Honduras firma un acuerdo de mediación impulsado por Venezuela y Colombia, aseguró el martes su asesor legal aquí Rasel Tomé.
"Una multitud de sus seguidores lo recibirá en el aeropuerto internacional de Tegucigalpa", afirmó Tomé en declaraciones.
Honduras fue suspendida de la Organización de los Estados Americanos (OEA) a raíz del golpe de Estado contra Zelaya (2006-2009) en junio de 2009.
"Todo será posible si Lobo suscribe el Acuerdo de Cartagena de Indias... y Lobo ha mostrado voluntad en cumplir ese pacto", dijo Tomé en alusión a la reunión celebrada a fines de abril en esa ciudad colombiana por el presidente hondureño Porfirio Lobo y sus colegas Hugo Chávez de Venezuela y José Manuel Santos de Colombia.
La canciller colombiana María Angela Holguín llegó el martes a Tegucigalpa en visita de cuatro horas y de inmediato su colega hondureño Mario Canahuati la trasladó a las oficinas de Lobo.
Los voceros gubernamentales no quisieron dar detalles, pero los cancilleres Colombia y Venezuela son los responsables del proceso para el regreso de Zelaya a Honduras y la reincorporación del país centroamericano a la OEA.
Tomé dijo que "Holguín viene a Honduras con documentos que se están cruzando entre Lobo, Zelaya y los mandatarios de Venezuela y Colombia en el proceso de mediación internacional que está en marcha para buscar una salida a la situación política hondureña".
El Secretario general de la OEA José Miguel Insulza ha dicho en repetidas ocasiones que la decisión de reincorporar Honduras al organismo debe ser unánime.
Chávez se encuentra entre los líderes sudamericanos que se han resistido a reconocer la legitimidad del gobierno de Lobo y se han opuesto al retorno a la OEA. Otros países que tienen esa postura son Ecuador, Argentina, Bolivia y Brasil.
"Sabemos que la vida de Zelaya corre riesgo en Honduras porque es el líder de una real oposición política, pero aún así él estará aquí porque tiene derecho a vivir en su patria de donde jamás debió haber sido expulsado", dijo Tomé.
Xiomara Castro, esposa del ex gobernante, denunció el lunes ante la fiscalía que existe una conspiración para matar a su marido.
"La oligarquía y los golpistas tiemblan ante el inminente arribo de Zelaya, que va a ser antes de la sesión de la OEA en El Salvador", dijo en un comunicado Jorge Miralda, vocero del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP), que surgió luego del golpe.
La asamblea general de la OEA se realizará del 5 al 7 de junio en San Salvador.
Indicó que "el Frente desde ya se siente fortalecido con su posible incorporación física (de Zelaya) a conducir los destinos de esta gran organización social que avanza segura hacia la toma del poder político".
Según Tomé, el Acuerdo de Cartagena contempla cuatro puntos: cese a la persecución de Zelaya y sus partidarios y retorno seguro al país, garantías para llamar a un proceso constituyente, respeto a los derechos humanos e investigar posibles violaciones y garantías para que los zelayistas participen en la vida política y en los comicios de 2014 como partido político.
La Corte Suprema de Justicia suspendió dos procesos por corrupción contra Zelaya que la fiscalía inició hace casi dos años.
"Una multitud de sus seguidores lo recibirá en el aeropuerto internacional de Tegucigalpa", afirmó Tomé en declaraciones.
Honduras fue suspendida de la Organización de los Estados Americanos (OEA) a raíz del golpe de Estado contra Zelaya (2006-2009) en junio de 2009.
"Todo será posible si Lobo suscribe el Acuerdo de Cartagena de Indias... y Lobo ha mostrado voluntad en cumplir ese pacto", dijo Tomé en alusión a la reunión celebrada a fines de abril en esa ciudad colombiana por el presidente hondureño Porfirio Lobo y sus colegas Hugo Chávez de Venezuela y José Manuel Santos de Colombia.
La canciller colombiana María Angela Holguín llegó el martes a Tegucigalpa en visita de cuatro horas y de inmediato su colega hondureño Mario Canahuati la trasladó a las oficinas de Lobo.
Los voceros gubernamentales no quisieron dar detalles, pero los cancilleres Colombia y Venezuela son los responsables del proceso para el regreso de Zelaya a Honduras y la reincorporación del país centroamericano a la OEA.
Tomé dijo que "Holguín viene a Honduras con documentos que se están cruzando entre Lobo, Zelaya y los mandatarios de Venezuela y Colombia en el proceso de mediación internacional que está en marcha para buscar una salida a la situación política hondureña".
El Secretario general de la OEA José Miguel Insulza ha dicho en repetidas ocasiones que la decisión de reincorporar Honduras al organismo debe ser unánime.
Chávez se encuentra entre los líderes sudamericanos que se han resistido a reconocer la legitimidad del gobierno de Lobo y se han opuesto al retorno a la OEA. Otros países que tienen esa postura son Ecuador, Argentina, Bolivia y Brasil.
"Sabemos que la vida de Zelaya corre riesgo en Honduras porque es el líder de una real oposición política, pero aún así él estará aquí porque tiene derecho a vivir en su patria de donde jamás debió haber sido expulsado", dijo Tomé.
Xiomara Castro, esposa del ex gobernante, denunció el lunes ante la fiscalía que existe una conspiración para matar a su marido.
"La oligarquía y los golpistas tiemblan ante el inminente arribo de Zelaya, que va a ser antes de la sesión de la OEA en El Salvador", dijo en un comunicado Jorge Miralda, vocero del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP), que surgió luego del golpe.
La asamblea general de la OEA se realizará del 5 al 7 de junio en San Salvador.
Indicó que "el Frente desde ya se siente fortalecido con su posible incorporación física (de Zelaya) a conducir los destinos de esta gran organización social que avanza segura hacia la toma del poder político".
Según Tomé, el Acuerdo de Cartagena contempla cuatro puntos: cese a la persecución de Zelaya y sus partidarios y retorno seguro al país, garantías para llamar a un proceso constituyente, respeto a los derechos humanos e investigar posibles violaciones y garantías para que los zelayistas participen en la vida política y en los comicios de 2014 como partido político.
La Corte Suprema de Justicia suspendió dos procesos por corrupción contra Zelaya que la fiscalía inició hace casi dos años.
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