Internacional

Venezolanos dicen adiós a Chávez en último día en capilla ardiente

Barrio popular aumenta su seguridad para recibir féretro

Venezolanos dicen adiós a Chávez en último día en capilla ardiente
CARACAS, VENEZUELA (14/MAR/2013).- De día y noche, cientos de miles de  venezolanos desfilaron sin parar durante nueve días ante el féretro con los  restos del presidente Hugo Chávez: "Hoy es el último día aquí. No vine a  despedirme, vine a jurarle lealtad", dijo a la AFP Félix Rodríguez, en la  capilla ardiente en la Academia Militar.

De traje verde olivo, cruzado con una cinta de la bandera de Venezuela, con  el collar de Bolívar y su emblemática boina roja, Chávez, quien murió el 5 de  marzo de cáncer, permanece en el ataúd de madera en el salón de honor, expuesto a través del cristal hasta la mitad del cuerpo.

"Lo vi lindo, como siempre, aunque está un poquito hinchado. Vine aquí así,  en muletas, porque debo despedir a mi Comandante. Él nos puso en el camino para  que despertáramos. Los pobres, que estábamos olvidados, nacimos con él", describió por su parte Yosmir Romero, de 42 años, quien perdió una pierna en un  accidente.

Ni Yosmir ni nadie allí, en las afueras de la Academia Militar, viste de  luto. Todos van del rojo emblemático del chavismo. El goteo de gente ha sido  continuo y un ambiente de fiesta revolucionaria se vive en el lugar. Los  opositores, que lo tachaban de caudillo populista, han visto de lejos esto con  discreción.


Al Cuartel de la Montaña

Los restos permanecerán hasta la madrugada de este jueves en capilla ardiente y el viernes serán llevados en cortejo fúnebre, masivo y por las grandes avenidas de Caracas, al Museo de la Revolución, antiguo cuartel desde  donde lanzó el 4 de febrero de 1992 el fallido golpe de Estado que siete años  después lo catapultó al poder.

Encabezará el cortejo, junto con el mandatario boliviano Evo Morales -según  lo previsto-, el presidente encargado Nicolás Maduro, a quien Chávez designó su  heredero político y candidato oficialista tres meses antes de morir, y ya está  en plena campaña política contra el opositor Henrique Capriles.

En el Cuartel de la Montaña, ubicado en el barrio 23 de enero, bastión del  chavismo, permanecerán el féretro mientras las autoridades deciden si es  llevado al Panteón Nacional, donde está el sarcófago con los restos de  liberador Simón Bolívar.


Barrio popular aumenta su seguridad para recibir féretro


Custodiado por hasta cuatro cuerpos militares y policiales distintos y en medio de un fuerte secretismo, el Museo de la Revolución de Caracas, ubicado en la popular barriada del 23 de Enero, recibía hoy los últimos detalles para convertirse mañana en lugar de acogida de los restos del presidente Hugo Chávez.

"La primicia la va a tener toda la prensa mañana", decía una funcionaria de este bastión del chavismo al impedir el paso al recinto, cuyas inmediaciones estaban hoy tranquilas, pero con una fuerte presencia policial.

A diferencia de los cuerpos embalsamados de Lenin, que reposa en un mausoleo en la Plaza Roja de Moscú, o de Mao Tse Tung, que tiene su urna en la Plaza de Tienanmen de Pekín, los restos de Chávez quedarán temporalmente en un espacio menos reconocido, pero no menos simbólico.

En lo alto de una loma al oeste de la capital, el museo en el que quedará exhibido el cuerpo del difunto mandatario a la espera de un próximo traslado no es un sitio escogido al azar, sino el emblemático "Cuartel de la Montaña" en el que Chávez se refugió durante su intentona golpista de 1992.

La antigua escuela militar ocupa, además, el corazón de la parroquia del 23 de Enero, una zona roja tanto por su incondicionalidad chavista como por su peligrosidad.

Ahí nació el Movimiento Revolucionario Tupamaro y también es sede del grupo radical La Piedrita, ambos afines a Chávez.

"Yo creo que en ninguna parte va a estar más seguro que aquí. Chávez se podía dar el lujo de caminar por aquí a pie, tranquilo", dijo a Efe Yuguer Ibarra, un jubilado de 65 años que todavía recuerda que una vez vio al presidente comer perros calientes en una de las plazas del barrio.

Entre los vaivenes de decenas de miembros de Casa Militar, Guardia Nacional (policía militarizada), Policía Nacional Bolivariana (PNB) y Policaracas, los vecinos de la parroquia iban mentalizándose para las aglomeraciones que habrá en las calles a partir de mañana, ratificando la seguridad del lugar.

"Esto va a estar tranquilo, esto dentro de lo que cabe es tranquilo. Bueno, tú sabes, como todo, de repente, un tirito por ahí lejos, así, pero no es que estén atracando por aquí ni nada de eso", comentó Eugenia Rosestán, una vecina de 57 años.

Entre muros con estampas del presidente, otros que rezan "¡Hasta siempre, comandante!" y pintadas de iconos revolucionarios como el Che Guevara o, incluso, de guerrilleros de las FARC, el cortejo fúnebre de Chávez culminará mañana en el 23 de Enero después de una capilla ardiente de nueve días en la Academia Militar.

"Es fabuloso, un placer que hayan dejado al comandante aquí y que lo vemos aquí por el tiempo que vaya a durar", comentó satisfecho Efraín García, de 49 años, miembro de la Comuna Simón Bolívar.

Consejos comunales como este han contribuido en los trabajos de los últimos días y, como explicó García, a partir de mañana todos colaborarán a que "a las personas no les falte nada, no les falte agua, comida, no vayan a traspasar las barreras y no vayan a haber peleas (...) ni nadie que tome licor".

En las estrechas calles del barrio en el que Chávez votó durante los últimos 14 años, sus habitantes no caben en su cuerpo del contento pese a que son muy conscientes de que su estancia allí es temporal.

"Eso sería hermoso, pero ese sueño no se va a cumplir, porque muy pronto lo sacan porque ese va al Panteón, la idea es que esté al lado de Bolívar", afirmó Ibarra.

Entre las dudas que el propio Gobierno ha señalado sobre si el cuerpo de Chávez podrá o no ser embalsamado finalmente, muchos creen que el mandatario podría ser llevado pronto al Panteón Nacional si sigue adelante la enmienda a la Constitución o quizás sea enterrado en su tierra natal, Barinas, tal y como él lo había manifestado en alguna ocasión.

Mientras eso se decida, Chávez seguirá en el ahora Museo de la Revolución, una escuela militar construida a principios del siglo XX que se transformó posteriormente en Museo Histórico Militar, en el Cuartel 4 de Febrero tras la restauración que Chávez ordenó se le hiciera en 2002 y, a partir de mañana, en un mausoleo interino.

"Te aseguro que va a ser un impacto, está todo muy bello", indicó la funcionaria que seguía impidiendo el acceso al museo.


Con información de AFP y NTX
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