Internacional
Urgen revisión de lazos bilaterales con Siria, Yemen y Bahréin
Instó a un dialogo político con todas las partes interesadas y con la sociedad civil a que abra camino para una democratización ''genuina'' con los países árabes
BRUSELAS, BÉLGICA (06/ABR/2011).- El Parlamento Europeo (PE) urgió a la Unión Europea que tenga en cuenta en sus relaciones bilaterales con Siria, Bahréin y Yemen la actitud violenta de sus fuerzas de seguridad en la represión a las protestas por reformas democráticas.
El mensaje fue transmitido en un debate con representantes del servicio de Relaciones Exteriores de la Comisión Europea y consta de una resolución pactada por todos los grupos políticos del hemiciclo pendiente de recibir mañana el visto bueno del pleno.
''El uso de la violencia por un Estado contra su propia población debe tener una repercusión directa en sus relaciones bilaterales con la UE'', incluyendo la suspensión de las negociaciones que la mancomunidad mantiene con Siria para un acuerdo de asociación, defiende el texto.
A juicio de los diputados, la renuncia del Gobierno sirio el pasado 29 de marzo ''no será suficiente para atajar las crecientes frustraciones del pueblo sirio''.
Por ello, piden que el presidente Bashar al-Assad de inicio a un proceso de transición democrática y establezca una ''agenda concreta'' para reformas políticas, económicas y sociales, además de levantar el estado de emergencia que sigue en vigor en el país desde 1963.
El lanzamiento de un dialogo político con todas las partes interesadas y con la sociedad civil que abra camino para una democratización ''genuina'' es la principal reivindicación que hacen los parlamentarios europeos a los gobiernos de los tres países árabes.
''Instamos a los gobiernos de Siria, Bahréin y Yemen a comprometerse (...) con la implementación de reformas políticas, económicas y sociales reales, ambiciosas y significantes, que son esenciales para la estabilidad y el desarrollo a largo plazo'', afirma la resolución.
La Eurocámara también volverá a condenar la violencia ''contra manifestantes pacíficos'' en esos países y a pedir una investigación independiente para determinar los responsables de las muertes registradas y llevarlos ante la justicia internacional.
Asimismo, reiterará su llamado para que las autoridades de los tres ''respeten sus compromisos internacionales en materia de derechos humanos y libertades fundamentales'' y liberen a todos los prisioneros políticos, activistas, periodistas y manifestantes que hayan sido detenidos en el marco de las protestas de los últimos meses.
El mensaje fue transmitido en un debate con representantes del servicio de Relaciones Exteriores de la Comisión Europea y consta de una resolución pactada por todos los grupos políticos del hemiciclo pendiente de recibir mañana el visto bueno del pleno.
''El uso de la violencia por un Estado contra su propia población debe tener una repercusión directa en sus relaciones bilaterales con la UE'', incluyendo la suspensión de las negociaciones que la mancomunidad mantiene con Siria para un acuerdo de asociación, defiende el texto.
A juicio de los diputados, la renuncia del Gobierno sirio el pasado 29 de marzo ''no será suficiente para atajar las crecientes frustraciones del pueblo sirio''.
Por ello, piden que el presidente Bashar al-Assad de inicio a un proceso de transición democrática y establezca una ''agenda concreta'' para reformas políticas, económicas y sociales, además de levantar el estado de emergencia que sigue en vigor en el país desde 1963.
El lanzamiento de un dialogo político con todas las partes interesadas y con la sociedad civil que abra camino para una democratización ''genuina'' es la principal reivindicación que hacen los parlamentarios europeos a los gobiernos de los tres países árabes.
''Instamos a los gobiernos de Siria, Bahréin y Yemen a comprometerse (...) con la implementación de reformas políticas, económicas y sociales reales, ambiciosas y significantes, que son esenciales para la estabilidad y el desarrollo a largo plazo'', afirma la resolución.
La Eurocámara también volverá a condenar la violencia ''contra manifestantes pacíficos'' en esos países y a pedir una investigación independiente para determinar los responsables de las muertes registradas y llevarlos ante la justicia internacional.
Asimismo, reiterará su llamado para que las autoridades de los tres ''respeten sus compromisos internacionales en materia de derechos humanos y libertades fundamentales'' y liberen a todos los prisioneros políticos, activistas, periodistas y manifestantes que hayan sido detenidos en el marco de las protestas de los últimos meses.
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