Trump presiona al Congreso para aprobar reforma sanitaria
El presidente estadounidense reprochó el inmovilismo de los congresistas, que sesionarán el martes en el Senado
WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS (10/JUL/2017).- El presidente Donald Trump volvió a presionar este lunes a los legisladores estadounidenses para aprobar la reforma sanitaria antes de que el Congreso se vaya de vacaciones el próximo mes.
Trump reprochó el inmovilismo de los congresistas, que volverán a sesionar el martes en el Senado después del asueto por el 4 de julio --Día de la Independencia--. Ambas cámaras tienen programado estar en receso durante todo el mes de agosto.
"No me puedo imaginar que se atrevan a dejar a Washington sin una bonita nueva ley de salud completamente aprobada", escribió en Twitter.
En otros mensajes publicados en la red social, Trump criticó al exdirector del FBI James Comey, a quien acusó de filtrar información clasificada en memorandos, y defendió a su hija Ivanka, quien ocupó su lugar en una reunión del G20 celebrada la semana pasada en la ciudad alemana de Hamburgo.
Trump ha hecho del remplazo de la ley de salud, conocida como Obamacare, una pieza central de su agenda.
El líder republicano en el Senado, Mitch McConnell, trató de que el plan fuera votado en la Cámara alta antes del feriado del 4 de julio.
Pero el disenso dentro de su propio partido lo llevó el mes pasado a posponer el voto. Las encuestas también mostraron que el plan del Senado es muy poco aceptado entre los estadounidenses.
McConnell abrió la sesión del lunes sin indicar si se llegó a un compromiso entre las diversas facciones de su partido, prefiriendo denunciar la oposición de la minoría demócrata. "Lamento que nuestros colegas demócratas hayan demostrado que no quieren trabajar con nosotros", dijo.
De acuerdo al político, una nueva versión del plan de reforma republicano podría ser anunciado el jueves en el Senado, con una revisión y una votación la próxima semana.
McConnell redactó el proyecto de ley actual en secreto con un grupo de asesores, dejando fuera a varios senadores clave que después expresaron su preocupación de que la reforma pueda dejar a millones de personas sin seguro médico.
Con los demócratas unidos en la oposición, se necesita que 50 de los 52 senadores republicanos aprueben la medida.
El borrador del Senado mantiene intactas algunas partes de Obamacare, pero quita gran parte de su financiamiento. También hace retroceder la expansión de Medicaid, el programa de atención de salud federal para los pobres y discapacitados.
Unos 10 republicanos anunciaron que no votarán por el proyecto tal como está escrito, incluyendo al senador Bill Cassidy, quien dijo a Fox News el domingo que "claramente el proyecto ha muerto".
Si bien la medida se está ajustando, en un intento desesperado de conseguir suficientes votos republicanos, Cassidy se quejó de que ni siquiera ha visto la nueva versión.
Varios republicanos han expresado su preocupación de que el proyecto de ley deje a millones sin seguro médico.
"Después de semanas de trabajo, parece que mis amigos del otro partido todavía no tienen los votos necesarios para avanzar en su proyecto de ley", ironizó el lunes el líder de los demócratas, Chuck Schumer.