Internacional
Sudán del Sur requiere ayuda internacional para afrontar hambruna
Un año después del brote de violencia, siguen los enfrentamientos entre el gobierno y los rebeldes
NAIROBI, KENIA (14/DIC/2014).- Un año después de un brote de violencia en
Sudán del Sur, siguen los enfrentamientos entre fuerzas del gobierno y rebeldes, y funcionarios de asistencia dicen que es necesaria la ayuda internacional para ayudar a los habitantes del país a enfrentar una hambruna generalizada.
Fuerzas del gobierno y jóvenes armados se enfrentan en el estado del Alto Nilo desde hace unos días, una señal de que la violencia pudiera regresar ahora que ha terminado la temporada de lluvias, que dura seis meses.
En diciembre del año pasado comenzaron los enfrentamientos entre fuerzas del presidente Salva Kiir y leales al ex vicepresidente Riek Machar. Desde entonces, más de 1.5 millones de habitantes han huido de sus casas, dejando a muchas familias sin nadie que plante las cosechas. La comunidad de asistencia internacional había temido una hambruna, pero una inyección del Programa Mundial de Alimentos y otros grupos ayudó a evitarla.
Si la violencia se reanuda, el espectro de la hambruna pudiera reaparecer en el 2015, advierten grupos de asistencia.
La preocupación sobre Sudán del Sur se reduce y corre el riesgo de convertirse en ''otro estado olvidado'', dijo el domingo el Comité Internacional de la Cruz Roja ( CIRC).
''La atención se ha alejado de Sudán del Sur en meses recientes, pero las necesidades todavía son enormes y la situación es muy seria'', dijo Franz Rauchenstein, director del CIRC en Sudán del Sur. ''No se puede olvidar a los que están atrapados en este conflicto''.
Las dos partes han firmado varios acuerdos de paz negociados por gobiernos vecinos, pero ninguno ha logrado detener la violencia en este país petrolero.
Fuerzas del gobierno y jóvenes armados se enfrentan en el estado del Alto Nilo desde hace unos días, una señal de que la violencia pudiera regresar ahora que ha terminado la temporada de lluvias, que dura seis meses.
En diciembre del año pasado comenzaron los enfrentamientos entre fuerzas del presidente Salva Kiir y leales al ex vicepresidente Riek Machar. Desde entonces, más de 1.5 millones de habitantes han huido de sus casas, dejando a muchas familias sin nadie que plante las cosechas. La comunidad de asistencia internacional había temido una hambruna, pero una inyección del Programa Mundial de Alimentos y otros grupos ayudó a evitarla.
Si la violencia se reanuda, el espectro de la hambruna pudiera reaparecer en el 2015, advierten grupos de asistencia.
La preocupación sobre Sudán del Sur se reduce y corre el riesgo de convertirse en ''otro estado olvidado'', dijo el domingo el Comité Internacional de la Cruz Roja ( CIRC).
''La atención se ha alejado de Sudán del Sur en meses recientes, pero las necesidades todavía son enormes y la situación es muy seria'', dijo Franz Rauchenstein, director del CIRC en Sudán del Sur. ''No se puede olvidar a los que están atrapados en este conflicto''.
Las dos partes han firmado varios acuerdos de paz negociados por gobiernos vecinos, pero ninguno ha logrado detener la violencia en este país petrolero.
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