Internacional
Sarkozy manifiesta comprensión hacia los votantes de la extrema derecha
El político aseguró que quienes la votaron ''no quieren unas fronteras que dejan pasar todo'', retomando el discurso de la candidata de extrema dereccha
PARÍS, FRANCIA (23/ABR/2012).- El presidente saliente de Francia, Nicolas Sarkozy, aseguró este lunes que ha "escuchado" a los electores de la ultraderechista Marine Le Pen, clave para la segunda vuelta contra el socialista François Hollande, y defendió su balance económico cargando de nuevo contra los problemas de España.
En un discurso de más de una hora en Saint Cyr sur Loire (centro) ante una sala llena de simpatizantes, el candidato a la reelección se mostró conciliador con los votantes de Marine Le Pen, la tercera más votada el domingo con un 17.9%, e insistió en que no aceptaría ninguna lección de moral en su contra, frente a una izquierda que "se tapa la nariz".
"No me permitiré juzgar a un francés cuyos sufrimientos yo no vivo", declaró Sarkozy en su primer mitin celebrado tras la primera vuelta, asegurando: "Los hemos escuchado. Nuestra forma de responder será con compromisos precisos".
El presidente conservador valoró el resultado de la ultraderecha como "un grito de sufrimiento", y advirtió que "hay que considerar esta expresión como un acontecimiento importante, y no como una anécdota".
Retomando los ataques de Marine Le Pen contra la globalización, Sarkozy aseguró que quienes la votaron "no quieren unas fronteras que dejan pasar todo", "no quieren que les quiten su modo de vida".
"Queremos una Europa que nos proteja, no una Europa que nos machaque (...) la Europa abierta a todos los vientos se ha terminado", apostilló.
"En la globalización, son las naciones las que triunfan, porque llevan una voluntad colectiva", aseveró Sarkozy refiriéndose a Estados Unidos, Brasil y China, ante una sala que gritaba "Vamos a ganar".
Al defender su balance económico, el presidente saliente se refirió de nuevo a España para advertir del riesgo que según él supondría un presidente socialista para Francia.
"Las pensiones de jubilación no han sido disminuidas, al contrario que en España, en Portugal", dijo Sarkozy, para defender su reforma de la jubilación.
"Imaginen lo que debe de pensar ahora el funcionario español al que le han bajado el sueldo un 10%", añadió, defendiendo su política de no reemplazar a un funcionario de cada dos que se jubilan.
En cuanto a su rival socialista, ironizó declarando: "El único jefe de gobierno que recibió a Hollande es José Luis Rodríguez Zapatero, que Hollande citaba como modelo. ¿Lo sigue citando?".
Sarkozy se enfrentará al socialista François Hollande en la segunda vuelta de la elección presidencial el próximo 6 de mayo. Antes se prevé un debate televisado, en principio el 2 de mayo.
En un discurso de más de una hora en Saint Cyr sur Loire (centro) ante una sala llena de simpatizantes, el candidato a la reelección se mostró conciliador con los votantes de Marine Le Pen, la tercera más votada el domingo con un 17.9%, e insistió en que no aceptaría ninguna lección de moral en su contra, frente a una izquierda que "se tapa la nariz".
"No me permitiré juzgar a un francés cuyos sufrimientos yo no vivo", declaró Sarkozy en su primer mitin celebrado tras la primera vuelta, asegurando: "Los hemos escuchado. Nuestra forma de responder será con compromisos precisos".
El presidente conservador valoró el resultado de la ultraderecha como "un grito de sufrimiento", y advirtió que "hay que considerar esta expresión como un acontecimiento importante, y no como una anécdota".
Retomando los ataques de Marine Le Pen contra la globalización, Sarkozy aseguró que quienes la votaron "no quieren unas fronteras que dejan pasar todo", "no quieren que les quiten su modo de vida".
"Queremos una Europa que nos proteja, no una Europa que nos machaque (...) la Europa abierta a todos los vientos se ha terminado", apostilló.
"En la globalización, son las naciones las que triunfan, porque llevan una voluntad colectiva", aseveró Sarkozy refiriéndose a Estados Unidos, Brasil y China, ante una sala que gritaba "Vamos a ganar".
Al defender su balance económico, el presidente saliente se refirió de nuevo a España para advertir del riesgo que según él supondría un presidente socialista para Francia.
"Las pensiones de jubilación no han sido disminuidas, al contrario que en España, en Portugal", dijo Sarkozy, para defender su reforma de la jubilación.
"Imaginen lo que debe de pensar ahora el funcionario español al que le han bajado el sueldo un 10%", añadió, defendiendo su política de no reemplazar a un funcionario de cada dos que se jubilan.
En cuanto a su rival socialista, ironizó declarando: "El único jefe de gobierno que recibió a Hollande es José Luis Rodríguez Zapatero, que Hollande citaba como modelo. ¿Lo sigue citando?".
Sarkozy se enfrentará al socialista François Hollande en la segunda vuelta de la elección presidencial el próximo 6 de mayo. Antes se prevé un debate televisado, en principio el 2 de mayo.
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