Internacional
Nuevo escándalo envuelve a banca de la Santa Sede
La Policía italiana investiga al presidente del Instituto para las Obras de Religión por omisiones en transacciones financieras
ROMA, ITALIA (22/SEP/2010).- Como si fueran pocos los escándalos que pesan a la Iglesia Católica, la Fiscalía italiana dispuso la incautación de 30 millones de dólares, depositados en una cuenta del la sucursal romana de Credito Artigiano, debido a investigación a los dos principales funcionarios de la entidad financiera por supuesto lavado de dinero.
El presidente del Banco Vaticano, Ettore Gotti Tedeschi, y el director general, Paolo Cipriani, eran investigados por los magistrados romanos Nello Rossi y Stefano Fava, en un caso sobre supuestas violaciones a las regulaciones de blanqueo de dinero en la Unión Europea.
El Vaticano confirmó la investigación de los magistrados en un comunicado en el que expresó su “perplejidad y asombro” ante la decisión y una “suma fe” en los dos hombres que dirigen la entidad el Instituto para las Obras de Religión (Istituto per le Opere di Religione), conocido popularmente como el Banco Vaticano.
Dos transferencias recientes de una cuenta del IOR en el banco italiano levantaron las sospechas de la Policía financiera, que bloqueó las transacciones preventivamente. El monto (23 millones, en euros), destinado a JP Morgan en Alemania, y el resto a la institución italiana Banca del Fucino.
Un comunicado del Secretariado de Estado del Vaticano señaló que el banco no infringió la ley ya que transfería su propio dinero entre cuentas de su propiedad.
El establecimiento crediticio del Vaticano estuvo implicado por última vez en un gran escándalo en 1982, cuando fue involucrado en la fraudulenta bancarrota del Banco Ambrosiano, entonces el mayor banco privado de Italia.
El Instituto para las Obras de Religión tenía una pequeña participación en el Ambrosiano, cuyo presidente, Roberto Calvi, fue hallado ahorcado bajo el puente Blackfriars de Londres el mismo año.
Varias investigaciones no consiguieron determinar si Calvi, conocido como “el banquero de Dios”, se quitó la vida o fue asesinado. El Vaticano negó tener alguna responsabilidad en la caída del Banco Ambrosiano, pero realizó “un pago de buena voluntad” de 250 millones de dólares a los acreedores del Ambrosiano.
La investigación judicial contra el banco de la Santa Sede, que se beneficia de la extraterritorialidad ya que se encuentra en la Ciudad del Vaticano, pudo ser abierta con base en las normas adoptadas en Italia en 2007, que obligan a los bancos a suministrar la identidad de los autores y la naturaleza de la transacción.
El IOR no es acusado directamente de reciclaje sino de haber omitido de suministrar los datos requeridos.
PERFIL
Maestro de ética financiera
Ettore Gotti Tedeschi
Este católico devoto que ha enseñado ética financiera en la Universidad Católica de Milán, también dirige una unidad italiana del español Banco Santander.
Desde hace un año, Ettore Gotti Tedeschi, italiano de 65 años, es el presidente del Instituto para las Obras de Religión (IOR), mejor conocido como el Banco Vaticano. Previo a su nombramiento, se desempeñaba como titular de operaciones italianas para el Banco Santander de España.
Miembro del movimiento religioso conservador Opus Dei, Gotti Tedeschi habla con frecuencia sobre la necesidad de mayor moralidad en las finanzas. En su libro “Dinero y paraíso”, exploró los valores del capitalismo y el catolicismo.
Casado y padre de cinco hijos, Gotti Tedeschi también editorialista del vespertino de la Santa Sede “Osservatore Romano”.
Es un asesor cercano del ministro italiano de Economía, Giulio Tremonti, y al secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone.
Además de participar en juntas directivas de varios bancos italianos importantes, gestiona principalmente los fondos del Vaticano y las instituciones religiosas de todo el mundo, entre ellas organizaciones benéficas y órdenes religiosas de curas y monjas.
Su “silla” está en las oficinas del IOR, con sede en la Ciudad del Vaticano. El banco fue fundado por Pío XII en 1942 y administrado por Gotti Tedeschi, que a su vez cae bajo la cobertura directa de un comité de cardenales, y en última instancia al Papa.
El presidente del Banco Vaticano, Ettore Gotti Tedeschi, y el director general, Paolo Cipriani, eran investigados por los magistrados romanos Nello Rossi y Stefano Fava, en un caso sobre supuestas violaciones a las regulaciones de blanqueo de dinero en la Unión Europea.
El Vaticano confirmó la investigación de los magistrados en un comunicado en el que expresó su “perplejidad y asombro” ante la decisión y una “suma fe” en los dos hombres que dirigen la entidad el Instituto para las Obras de Religión (Istituto per le Opere di Religione), conocido popularmente como el Banco Vaticano.
Dos transferencias recientes de una cuenta del IOR en el banco italiano levantaron las sospechas de la Policía financiera, que bloqueó las transacciones preventivamente. El monto (23 millones, en euros), destinado a JP Morgan en Alemania, y el resto a la institución italiana Banca del Fucino.
Un comunicado del Secretariado de Estado del Vaticano señaló que el banco no infringió la ley ya que transfería su propio dinero entre cuentas de su propiedad.
El establecimiento crediticio del Vaticano estuvo implicado por última vez en un gran escándalo en 1982, cuando fue involucrado en la fraudulenta bancarrota del Banco Ambrosiano, entonces el mayor banco privado de Italia.
El Instituto para las Obras de Religión tenía una pequeña participación en el Ambrosiano, cuyo presidente, Roberto Calvi, fue hallado ahorcado bajo el puente Blackfriars de Londres el mismo año.
Varias investigaciones no consiguieron determinar si Calvi, conocido como “el banquero de Dios”, se quitó la vida o fue asesinado. El Vaticano negó tener alguna responsabilidad en la caída del Banco Ambrosiano, pero realizó “un pago de buena voluntad” de 250 millones de dólares a los acreedores del Ambrosiano.
La investigación judicial contra el banco de la Santa Sede, que se beneficia de la extraterritorialidad ya que se encuentra en la Ciudad del Vaticano, pudo ser abierta con base en las normas adoptadas en Italia en 2007, que obligan a los bancos a suministrar la identidad de los autores y la naturaleza de la transacción.
El IOR no es acusado directamente de reciclaje sino de haber omitido de suministrar los datos requeridos.
PERFIL
Maestro de ética financiera
Ettore Gotti Tedeschi
Este católico devoto que ha enseñado ética financiera en la Universidad Católica de Milán, también dirige una unidad italiana del español Banco Santander.
Desde hace un año, Ettore Gotti Tedeschi, italiano de 65 años, es el presidente del Instituto para las Obras de Religión (IOR), mejor conocido como el Banco Vaticano. Previo a su nombramiento, se desempeñaba como titular de operaciones italianas para el Banco Santander de España.
Miembro del movimiento religioso conservador Opus Dei, Gotti Tedeschi habla con frecuencia sobre la necesidad de mayor moralidad en las finanzas. En su libro “Dinero y paraíso”, exploró los valores del capitalismo y el catolicismo.
Casado y padre de cinco hijos, Gotti Tedeschi también editorialista del vespertino de la Santa Sede “Osservatore Romano”.
Es un asesor cercano del ministro italiano de Economía, Giulio Tremonti, y al secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone.
Además de participar en juntas directivas de varios bancos italianos importantes, gestiona principalmente los fondos del Vaticano y las instituciones religiosas de todo el mundo, entre ellas organizaciones benéficas y órdenes religiosas de curas y monjas.
Su “silla” está en las oficinas del IOR, con sede en la Ciudad del Vaticano. El banco fue fundado por Pío XII en 1942 y administrado por Gotti Tedeschi, que a su vez cae bajo la cobertura directa de un comité de cardenales, y en última instancia al Papa.
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