Internacional
Mínimo, 100 mil muertos en Haití
La cifra estimada equivale a 1.11% de los nueve millones de la población del país caribeño, levemente superior a la de Jalisco
PUERTO PRÍNCIPE, HAITÍ.- La carrera contra el tiempo en Haití es dramática y la danza de las cifras refleja el caos que se vive en el país caribeño. Aún no hay números oficiales de muertos que dejó, el martes,
el devastador sismo.
En este marco de precariedades, las autoridades prefieren manejar cifras conservadores, pero el primer ministro Jean Max Bellerive estimó “en más de 100 mil” las víctimas fatales (equivalente al aforo del Estadio Azteca). En términos relativos, la cantidad equivale a 1.11% de la población, estimada en nueve millones de personas.
El tiempo pasa, y por eso los rescatistas de las tropas de Naciones Unidas y organismos de socorro intensificaron su trabajo para tratar de encontrar sobrevivientes. En estas tareas, los cascos azules perdieron 16 elementos, la peor cifra negra que registra la organización humanitaria, desde que fuera atacado su edificio en Bagdad, en agosto de 2003, según el jefe de las misiones de paz, Alain Le Roy. En aquella ocasión un atentado se cobró 22 vidas.
El sismo “se produjo en una hora intermedia entre la salida del trabajo y la noche, a las cinco de la tarde, cuando buena parte de la gente estaba en vehículos de regreso a sus casas”, explicó Edwin Paraison, ministro de los Haitianos Residentes en el Exterior (de los cuales 25 residen en Guadalajara).
La ayuda internacional, incluida la de México, ha comenzado a fluir. Estados Unidos se ha puesto a la cabeza, ha enviado un portaaviones, tropas para garantizar la seguridad en Puerto Príncipe y una brigada de alerta compuesta por tres mil soldados.
80 mexicanos residen en Haití; 30 se han reportado y otros 50 no responden a los correos electrónicos.
15% del PIB es el daño económico que ha dejado el terremoto, de acuerdo con estimaciones del Banco Mundial.
3 millones de damnificados ha dejado la tragedia, calculan la ONU y la Cruz Roja Internacional.
Llega la ayuda internacional a las desoladas calles de Haití
Al bajar de sus naves, barcos, aviones, helicópteros, la todavía escasa ayuda extranjera que llega a Puerto Príncipe encuentra pequeños cuerpos de niños yacen apilados al lado de las ruinas de su escuela derrumbada.
Socorristas de diferentes nacionalidades encuentran sobrevivientes que pululan por las calles con sus rostros asombrados cubiertos de polvo blanco y heridas sangrantes. Encuentras a frenéticos doctores con escasos instrumentes que vendan cabezas y cosían heridas en el estacionamiento de un hotel.
Éste es el panorama desolador desde el lunes en Puerto Príncipe. Sin embargo, la ayuda internacional comienza a llegar, aunque no es suficiente.
La Federación Internacional de la Cruz Roja envió a La Española kits de higiene y primeros auxilios para 10 mil personas entre desde República Dominicana, así como una carpa hospital móvil con cincuenta camas, informó el director para América de la organización, Xavier Castellanos.
“Esto es lo que va a paliar es la primera necesidad, es decir, vamos a mandar equipos de higiene, el tema de salud es un tema crítico, y vamos a mandar equipos de agua y saneamiento, eso está saliendo desde República Dominicana ya mismo y desde Panamá el viernes”.
La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y la Media Luna Roja (FICRMLR) explicó que en Haití hay paquetes de primeros auxilios para tres mil familias, unas 15 mil personas.
Explicó que el hospital de campaña será enviado desde Europa por la Cruz Roja de Canadá en colaboración con la de Noruega.
Estados Unidos responde
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, prometió el apoyo “total” de su país a Haití y ordenó el envío de un gran contingente militar, incluido un portaaviones.
Se trata de un equipo de rescate, un buque guardacostas y una unidad que evaluará los daños y determinará las prioridades de la ayuda, los cuales ya están en Puerto Príncipe.
Además, se dirigen a las inmediaciones de Haití tres buques guardacostas y el portaaviones USS Carl Vinson, con seis mil marineros, que está siendo aprovisionado en el camino.
Expertos de su fuerza aérea instalarán, además, nuevos equipos de control en el aeropuerto, que está abierto, pero donde el tráfico se organiza por señales visuales, pues la torre de control no funciona, según el Gobierno de Washington.
La ayuda podría incluir el despliegue de tropas para garantizar la seguridad en Puerto Príncipe, según el general Douglas Fraser, comandante del Mando Sur del Pentágono. “Estudiamos el tema seriamente”, dijo el general, quien explicó que Estados Unidos enviará un barco anfibio con una fuerza de unos dos mil marines.
También se ha puesto en alerta, por si fuera necesaria, a una brigada del Ejército de Tierra. Ese tipo de brigadas se suelen componer de unos tres mil 500 soldados.
Latinoamérica también respondió con celeridad y países como República Dominicana, Venezuela, Chile, Cuba Ecuador, Colombia, Argentina, Perú, Brasil, Guatemala, Panamá y Nicaragua, entre otros, ya se han movilizado.
Bajas en la ONU
La ONU, entre tanto, anunció la movilización de sus equipos de emergencia para que ayuden a coordinar la llegada de asistencia humanitaria y autorizó una partida de 10 millones de dólares de su fondo de emergencias.
La Naciones Unidas realizó un primer balance de las bajas sufridas por la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití y calificó la tragedia como la peor desde el atentado contra su sede en Bagdad, al confirmar 16 muertos y 56 heridos en el derrumbe de su cuartel general en Puerto Príncipe.
El Banco Mundial estimó que Haití, la nación más pobre de América, perderá más de 15% de su Producto Interno Bruto (PIB) por la catástrofe y confirmó una donación de 100 millones de dólares, la más alta hasta ahora.
Funcionarios de las Bahamas se preparaban para una posible ola de migrantes haitianos luego del siniestro.
Las autoridades de inmigración custodiaban la isla sureña de Inagua, donde pensaban armar carpas y almacenar comida y agua. La isla está a apenas 113 kilómetros al noreste de Haití.
En este marco de precariedades, las autoridades prefieren manejar cifras conservadores, pero el primer ministro Jean Max Bellerive estimó “en más de 100 mil” las víctimas fatales (equivalente al aforo del Estadio Azteca). En términos relativos, la cantidad equivale a 1.11% de la población, estimada en nueve millones de personas.
El tiempo pasa, y por eso los rescatistas de las tropas de Naciones Unidas y organismos de socorro intensificaron su trabajo para tratar de encontrar sobrevivientes. En estas tareas, los cascos azules perdieron 16 elementos, la peor cifra negra que registra la organización humanitaria, desde que fuera atacado su edificio en Bagdad, en agosto de 2003, según el jefe de las misiones de paz, Alain Le Roy. En aquella ocasión un atentado se cobró 22 vidas.
El sismo “se produjo en una hora intermedia entre la salida del trabajo y la noche, a las cinco de la tarde, cuando buena parte de la gente estaba en vehículos de regreso a sus casas”, explicó Edwin Paraison, ministro de los Haitianos Residentes en el Exterior (de los cuales 25 residen en Guadalajara).
La ayuda internacional, incluida la de México, ha comenzado a fluir. Estados Unidos se ha puesto a la cabeza, ha enviado un portaaviones, tropas para garantizar la seguridad en Puerto Príncipe y una brigada de alerta compuesta por tres mil soldados.
80 mexicanos residen en Haití; 30 se han reportado y otros 50 no responden a los correos electrónicos.
15% del PIB es el daño económico que ha dejado el terremoto, de acuerdo con estimaciones del Banco Mundial.
3 millones de damnificados ha dejado la tragedia, calculan la ONU y la Cruz Roja Internacional.
Llega la ayuda internacional a las desoladas calles de Haití
Al bajar de sus naves, barcos, aviones, helicópteros, la todavía escasa ayuda extranjera que llega a Puerto Príncipe encuentra pequeños cuerpos de niños yacen apilados al lado de las ruinas de su escuela derrumbada.
Socorristas de diferentes nacionalidades encuentran sobrevivientes que pululan por las calles con sus rostros asombrados cubiertos de polvo blanco y heridas sangrantes. Encuentras a frenéticos doctores con escasos instrumentes que vendan cabezas y cosían heridas en el estacionamiento de un hotel.
Éste es el panorama desolador desde el lunes en Puerto Príncipe. Sin embargo, la ayuda internacional comienza a llegar, aunque no es suficiente.
La Federación Internacional de la Cruz Roja envió a La Española kits de higiene y primeros auxilios para 10 mil personas entre desde República Dominicana, así como una carpa hospital móvil con cincuenta camas, informó el director para América de la organización, Xavier Castellanos.
“Esto es lo que va a paliar es la primera necesidad, es decir, vamos a mandar equipos de higiene, el tema de salud es un tema crítico, y vamos a mandar equipos de agua y saneamiento, eso está saliendo desde República Dominicana ya mismo y desde Panamá el viernes”.
La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y la Media Luna Roja (FICRMLR) explicó que en Haití hay paquetes de primeros auxilios para tres mil familias, unas 15 mil personas.
Explicó que el hospital de campaña será enviado desde Europa por la Cruz Roja de Canadá en colaboración con la de Noruega.
Estados Unidos responde
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, prometió el apoyo “total” de su país a Haití y ordenó el envío de un gran contingente militar, incluido un portaaviones.
Se trata de un equipo de rescate, un buque guardacostas y una unidad que evaluará los daños y determinará las prioridades de la ayuda, los cuales ya están en Puerto Príncipe.
Además, se dirigen a las inmediaciones de Haití tres buques guardacostas y el portaaviones USS Carl Vinson, con seis mil marineros, que está siendo aprovisionado en el camino.
Expertos de su fuerza aérea instalarán, además, nuevos equipos de control en el aeropuerto, que está abierto, pero donde el tráfico se organiza por señales visuales, pues la torre de control no funciona, según el Gobierno de Washington.
La ayuda podría incluir el despliegue de tropas para garantizar la seguridad en Puerto Príncipe, según el general Douglas Fraser, comandante del Mando Sur del Pentágono. “Estudiamos el tema seriamente”, dijo el general, quien explicó que Estados Unidos enviará un barco anfibio con una fuerza de unos dos mil marines.
También se ha puesto en alerta, por si fuera necesaria, a una brigada del Ejército de Tierra. Ese tipo de brigadas se suelen componer de unos tres mil 500 soldados.
Latinoamérica también respondió con celeridad y países como República Dominicana, Venezuela, Chile, Cuba Ecuador, Colombia, Argentina, Perú, Brasil, Guatemala, Panamá y Nicaragua, entre otros, ya se han movilizado.
Bajas en la ONU
La ONU, entre tanto, anunció la movilización de sus equipos de emergencia para que ayuden a coordinar la llegada de asistencia humanitaria y autorizó una partida de 10 millones de dólares de su fondo de emergencias.
La Naciones Unidas realizó un primer balance de las bajas sufridas por la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití y calificó la tragedia como la peor desde el atentado contra su sede en Bagdad, al confirmar 16 muertos y 56 heridos en el derrumbe de su cuartel general en Puerto Príncipe.
El Banco Mundial estimó que Haití, la nación más pobre de América, perderá más de 15% de su Producto Interno Bruto (PIB) por la catástrofe y confirmó una donación de 100 millones de dólares, la más alta hasta ahora.
Funcionarios de las Bahamas se preparaban para una posible ola de migrantes haitianos luego del siniestro.
Las autoridades de inmigración custodiaban la isla sureña de Inagua, donde pensaban armar carpas y almacenar comida y agua. La isla está a apenas 113 kilómetros al noreste de Haití.