Internacional
Madre de disidente cubano realiza marcha sin incidentes
La manifestación se realizó luego de que esposas de opositores se reunieran con el cardenal Jaime Ortega
LA HABANA, CUBA (22/AGO/2010).- La madre del fallecido disidente Orlando Zapata realizó su caminata dominical sin incidentes en la oriental provincia de Holguín en
Cuba, luego de que esposas de
opositores se reunieran con el cardenal Jaime Ortega quien se comprometió a una mediación para que la mujer no fuera interceptada por grupos progubernamentales como las semanas pasadas.
“Esta vez pudimos ir al cementerio y a la Iglesia”, dijo vía telefónica, Reina Luisa Tamayo, madre de Zapata. El disidente falleció en prisión en febrero por complicaciones derivadas de una huelga de hambre.
Desde entonces la mujer realiza su caminata dominical por la localidad de Banes -a unos 800 kilómetros al oriente de la capital- que en las últimas ocasiones fue interceptada por grupos de simpatizantes gubernamentales quienes les gritaron consignas revolucionarias y una vez le impidieron salir de su casa. Nunca se reportó violencia física.
Ella y una docena de personas marcharon sin incidentes, explicó Tamayo quien agradeció a “todas las personas de buena voluntad” incluyendo al cardenal Jaime Ortega y a la iglesia Católica por sus gestiones y aseguró que no desistirá de protestar contra el gobierno.
La mujer indicó que el 14 de mayo la visitó monseñor Eugenio Aranguren junto al párroco local se interesó por la situación y le prometió hacer gestiones ante las autoridades, mientras le pidió que fuera a la iglesia sólo con su familia como un gesto personal y no político, propuesta que ella aceptó, dijo.
Paralelamente Ortega se reunió el viernes por la mañana con las “Damas de Blanco” algunas de las esposas de 75 disidentes presos en 2003, de los cuales 52 quedarán paulatinamente en libertad -26 de ellos ya salieron y viajaron a España- según un compromiso del gobierno con la Iglesia. La veintena restante (de los 75) habían sido excarcelados a lo largo de estos siete años por motivos de salud.
Tamayo fue invitada al encuentro con el cardenal pero no pudo asistir porque tiene una pierna enferma y le es difícil trasladarse de su provincia a la capital, manifestó.
Ortega se comprometió a interceder por Tamayo ante las autoridades, confirmó Laura Pollán, casada con el preso político Héctor Maseda y quien si pudo participar de la reunión.
La semana pasada también la organización con sede en Londres, Amnistía Internacional había denunciado como una causa de “acoso” la intervención de grupos progubernamentales en las caminatas de Tamayo.
En julio tras una reunión de Ortega con el presidente Raúl Castro en el cual también estuvo el canciller español Miguel Angel Moratinos se anunció el compromiso gubernamental de liberar a los 52 que quedaban en prisión del grupo de los 75.
El viernes algunos disidentes firmaron una carta abierta al Papa Benedicto XIV reclamando que la Iglesia cubana realizó las gestiones por la libertad de los presos a sus espaldas. La misiva fue respondida con indignación por la institución religiosa indicando que su tarea no es proselitista, sino humanitaria.
“Esta vez pudimos ir al cementerio y a la Iglesia”, dijo vía telefónica, Reina Luisa Tamayo, madre de Zapata. El disidente falleció en prisión en febrero por complicaciones derivadas de una huelga de hambre.
Desde entonces la mujer realiza su caminata dominical por la localidad de Banes -a unos 800 kilómetros al oriente de la capital- que en las últimas ocasiones fue interceptada por grupos de simpatizantes gubernamentales quienes les gritaron consignas revolucionarias y una vez le impidieron salir de su casa. Nunca se reportó violencia física.
Ella y una docena de personas marcharon sin incidentes, explicó Tamayo quien agradeció a “todas las personas de buena voluntad” incluyendo al cardenal Jaime Ortega y a la iglesia Católica por sus gestiones y aseguró que no desistirá de protestar contra el gobierno.
La mujer indicó que el 14 de mayo la visitó monseñor Eugenio Aranguren junto al párroco local se interesó por la situación y le prometió hacer gestiones ante las autoridades, mientras le pidió que fuera a la iglesia sólo con su familia como un gesto personal y no político, propuesta que ella aceptó, dijo.
Paralelamente Ortega se reunió el viernes por la mañana con las “Damas de Blanco” algunas de las esposas de 75 disidentes presos en 2003, de los cuales 52 quedarán paulatinamente en libertad -26 de ellos ya salieron y viajaron a España- según un compromiso del gobierno con la Iglesia. La veintena restante (de los 75) habían sido excarcelados a lo largo de estos siete años por motivos de salud.
Tamayo fue invitada al encuentro con el cardenal pero no pudo asistir porque tiene una pierna enferma y le es difícil trasladarse de su provincia a la capital, manifestó.
Ortega se comprometió a interceder por Tamayo ante las autoridades, confirmó Laura Pollán, casada con el preso político Héctor Maseda y quien si pudo participar de la reunión.
La semana pasada también la organización con sede en Londres, Amnistía Internacional había denunciado como una causa de “acoso” la intervención de grupos progubernamentales en las caminatas de Tamayo.
En julio tras una reunión de Ortega con el presidente Raúl Castro en el cual también estuvo el canciller español Miguel Angel Moratinos se anunció el compromiso gubernamental de liberar a los 52 que quedaban en prisión del grupo de los 75.
El viernes algunos disidentes firmaron una carta abierta al Papa Benedicto XIV reclamando que la Iglesia cubana realizó las gestiones por la libertad de los presos a sus espaldas. La misiva fue respondida con indignación por la institución religiosa indicando que su tarea no es proselitista, sino humanitaria.
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