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Inicia en Roma fin de semana de festejos por la beatificación

Exposiciones, misas y venta de souvenirs constituyen algunas de las atracciones en memoria de Karol Wojtyla; el domingo, la ceremonia principal

Inicia en Roma fin de semana de festejos por la beatificación
CIUDAD DEL VATICANO (29/ABR/2011).- La beatificación de Juan Pablo II será motivo de una celebración popular de tres días, a la que asistirán centenares de miles de personas que llegaron desde esta semana a la capital italiana.

Mañana iniciarán los festejos en honor del Papa polaco, cuyos restos mortales serán expuestos el domingo 1 de mayo a la veneración de los fieles en la basílica de San Pedro, y concluirán el lunes.

Una vigilia en el Circo Massimo de Roma marcará el inicio de la celebración. La vigilia será dividida en dos partes: la primera, “Celebración de la Memoria”, comenzará con una procesión de la imagen de Maria Salus Populi Romani, la patrona de Roma.

Después intervendrán el que fuera secretario particular de Juan Pablo II y actual cardenal de Cracovia, Stanislaw Dziiwisz; su antiguo portavoz durante 22 años, el español Joaquín Navarro Valls, y la monja francesa Marie Simon Pierre, cuya curación, de manera inexplicable para la ciencia, de la enfermedad de Parkinson ha abierto las puertas a la beatificación de Karol Wojtyla.

La segunda parte será la “celebración de los misterios luminosos del Santo Rosario”, que fueron introducidos por Juan Pablo II durante su papado.
El rosario se recitará en conexión directa con cinco santuarios marianos de todo el mundo: el de la Virgen de Guadalupe, en México; Fátima en Portugal, Lagniewniki en Polonia, Kawekamo-Bugando en Tanzania y Notre Dame del Líbano, a los que estaba muy ligado Wojtyla.

Al final el Papa Benedicto XVI —que regresará de la residencia de Castel Gandolfo, donde ha pasado unos días de reposo—, impartirá la bendición apostólica desde el Vaticano.

A las cinco de la mañana del 1 de mayo se permitirá el acceso a la Basílica de San Pedro del Vaticano, donde a las nueve de la mañana (2:00 horas de México) y durante una hora los fieles se prepararán para la ceremonia de beatificación, que comenzará a las 10:00 hora local (3:00 horas de México) presidida por Benedicto XVI y concelebrada por numerosos cardenales.

Concluida la misa, el Papa y los cardenales entrarán en la Basílica de San Pedro para venerar a Wojtyla, cuyo féretro será sacado de la actual tumba el día de hoy y colocado delante del altar mayor.

Después todos los fieles podrán venerarlo. La basílica permanecerá abierta mientras haya fieles. Sólo se cerrará el lunes 2 durante la Misa de Acción de Gracias que oficiará en la Plaza de San Pedro el cardenal secretario de Estado, Tarcisio Bertone.

Después, todos los fieles que quieran podrán acercarse hasta el féretro para rendir homenaje al Pontífice que guió a la Iglesia durante casi 27 años (1978-2005) y la introdujo en el tercer milenio.

Experiencia religiosa
Vivo, recuerdo de la visita a la Catedral de Guadalajara

José Ceja, sacristán de la Catedral de Guadalajara, asegura que su experiencia cerca del Papa Juan Pablo II fue inolvidable y muy espiritual. “Tenía aproximadamente cinco años trabajando aquí cuando vino de visita Su Santidad en 1979, pero la experiencia nadie me la quita, no cualquiera puede decir que estuvo tan cerca de él”.

El equipo de limpieza de la Catedral comenzó las preparaciones de la misma aproximadamente cuatro meses antes, pero fueron pocas y superficiales las reparaciones. “Sólo pintamos algunos lugares que se encontraban amarillos por la humedad o ese tipo de detallitos, pero en realidad todo se trató de limpieza porque sí se encontraba muy sucia la Catedral en ese entonces”.

Don José logró estar a escasos pasos del Pontífice, pero no logró saludarlo y —aunque intentó tomarse una fotografía cerca de él— un fotógrafo le hizo una “mala jugada” en la ceremonia. “Quería tener de recuerdo una fotografía de Juan Pablo II así que logré que un fotógrafo —del que no recuerda el nombre— entrara al evento y me tomara la foto, yo me acerqué lo más que pude al Papa para que me pudieran captar cerca de él y poder mostrarles a mis nietos que un día lo conocí de cerca. Pero cuando fui con el fotógrafo me dijo que no había llevado los rollos; pero es imposible que no llevara rollos un fotógrafo que iba a cubrir el evento”.

El gran operativo de seguridad fue una de las cosas que más impactó al sacristán, razón por la que asegura, no se atrevió a saludar a Karol Wojtyla. “¡Eran demasiados militares! Estaban por todas partes, en los pasillos de la Catedral, en la parte de arriba donde se encuentra el coro, eran demasiados, por eso me puse nervioso y no me atreví a saludarlo”.

Ceja describe la experiencia como una de las mejores de su vida. “Fue un encuentro muy hermoso y para mí fue como si hubiera ido a Roma, así de especial me sentí”.
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