Internacional
Human Right Watchs pide investigar a expresidente Bush por torturas
Human Rights Watch sostine que Obama 'ha considerado estos actos de tortura como lamentables decisiones políticas, en lugar de crímenes
WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS (12/JUL/2011).- La organización de derechos humanos Human Rights Watch (HRW) pidió hoy al presidente estadunidense Barack Obama que ordene investigar las denuncias sobre abusos a detenidos que autorizaron su antecesor George W. Bush y otros altos funcionarios.
En un comunicado, HRW indicó que el gobierno de Obama 'no ha cumplido las obligaciones asumidas por Estados Unidos, conforme a la Convención contra la Tortura, de investigar actos de tortura y otros malos tratos a detenidos'.
El informe de 107 páginas pide que se investigue al ex vicepresidente Richard Cheney, el exsecretario de Defensa Donald Rumsfeld y al exdirector de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), George Tenet.
Indicó que los exfuncionarios ordenaron prácticas como la asfixia por inmersión, el uso de cárceles secretas de la CIA y el traslado de detenidos a países donde fueron torturados.
Kenneth Roth, director de Human Rights Watch, sostuvo que Obama 'ha considerado estos actos de tortura como lamentables decisiones políticas, en lugar de crímenes'.
La decisión de Obama de terminar con los abusos en los interrogatorios 'podría ser revertida fácilmente, a menos que se restablezca claramente la prohibición legal contra la tortura", indicó.
Señaló que si el gobierno de Estados Unidos no hace las investigaciones, otros países deberían juzgar a los exfuncionarios estadunidenses involucrados en esos delitos, de acuerdo con la legislación internacional.
En agosto de 2009, el procurador general de Estados Unidos, Eric Holder, designó al fiscal federal adjunto, John Durham, para que investigara los abusos a los detenidos, pero limitó la indagación a los actos "no autorizados", señaló HRW.
Roth dijo que "el patrón de abusos del gobierno de Estados Unidos en varios países no fue el resultado de acciones individuales sino consecuencia de decisiones tomadas por altos funcionarios estadunidenses 'que 'decidieron ignorar las reglas'.
En un comunicado, HRW indicó que el gobierno de Obama 'no ha cumplido las obligaciones asumidas por Estados Unidos, conforme a la Convención contra la Tortura, de investigar actos de tortura y otros malos tratos a detenidos'.
El informe de 107 páginas pide que se investigue al ex vicepresidente Richard Cheney, el exsecretario de Defensa Donald Rumsfeld y al exdirector de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), George Tenet.
Indicó que los exfuncionarios ordenaron prácticas como la asfixia por inmersión, el uso de cárceles secretas de la CIA y el traslado de detenidos a países donde fueron torturados.
Kenneth Roth, director de Human Rights Watch, sostuvo que Obama 'ha considerado estos actos de tortura como lamentables decisiones políticas, en lugar de crímenes'.
La decisión de Obama de terminar con los abusos en los interrogatorios 'podría ser revertida fácilmente, a menos que se restablezca claramente la prohibición legal contra la tortura", indicó.
Señaló que si el gobierno de Estados Unidos no hace las investigaciones, otros países deberían juzgar a los exfuncionarios estadunidenses involucrados en esos delitos, de acuerdo con la legislación internacional.
En agosto de 2009, el procurador general de Estados Unidos, Eric Holder, designó al fiscal federal adjunto, John Durham, para que investigara los abusos a los detenidos, pero limitó la indagación a los actos "no autorizados", señaló HRW.
Roth dijo que "el patrón de abusos del gobierno de Estados Unidos en varios países no fue el resultado de acciones individuales sino consecuencia de decisiones tomadas por altos funcionarios estadunidenses 'que 'decidieron ignorar las reglas'.
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