Internacional
En Ucrania, Timoshenko se niega a que la trasladen a un hospital
La ex primera ministra dice que es objeto de una persecución injusta por parte de su rival, el presidente Viktor Yanukovich
KHARKIV, UCRANIA (08/MAY/2012).- La líder opositora ucraniana encarcelada Yulia Timoshenko rechazó ser trasladada a un hospital el martes, pero dejó abierta la posibilidad para el miércoles, según los servicios de prisión estatales.
Timoshenko argumentó que necesitaba más tiempo para discutir su situación con sus abogados, dijo un comunicado del servicio penitenciario.
La petición de Timoshenko, la ex primera ministra que dice que es objeto de una persecución injusta por parte de su rival, el presidente Viktor Yanukovich, ha tensado las relaciones de la ex república soviética con Occidente y ha dañado su imagen internacional.
El 20 de abril inició una huelga de hambre en protesta por lo que dijo que estaba siendo un maltrato brutal en prisión. Alegó que los guardias de la prisión la golpearon durante una visita obligada al hospital y sus seguidores hicieron circular fotografías que mostraban contusiones en brazos y abdomen.
Las autoridades negaron que la hubieran maltratado.
Después de que las autoridades se negaran la semana pasada a su traslado a Alemania para recibir tratamiento por los dolores de espalda, la política accedió a ser atendida en un hospital local de Kharkiv bajo la supervisión de médicos alemanes.
Timoshenko argumentó que necesitaba más tiempo para discutir su situación con sus abogados, dijo un comunicado del servicio penitenciario.
La petición de Timoshenko, la ex primera ministra que dice que es objeto de una persecución injusta por parte de su rival, el presidente Viktor Yanukovich, ha tensado las relaciones de la ex república soviética con Occidente y ha dañado su imagen internacional.
El 20 de abril inició una huelga de hambre en protesta por lo que dijo que estaba siendo un maltrato brutal en prisión. Alegó que los guardias de la prisión la golpearon durante una visita obligada al hospital y sus seguidores hicieron circular fotografías que mostraban contusiones en brazos y abdomen.
Las autoridades negaron que la hubieran maltratado.
Después de que las autoridades se negaran la semana pasada a su traslado a Alemania para recibir tratamiento por los dolores de espalda, la política accedió a ser atendida en un hospital local de Kharkiv bajo la supervisión de médicos alemanes.
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