Internacional
El terrorismo azota a Túnez; mueren 54
Cierra la frontera con Libia de donde, se presume, proceden los supuestos atacantes yihadistas
BEN GUERDANE, TÚNEZ (08/MAR/2016).- Túnez sufrió ataques simultáneos y “sin precedentes” en una región vecina de Libia, en los que murieron al menos 36 yihadistas, 11 uniformados y siete civiles.
El país ya fue golpeado el año pasado por atentados mortíferos. Las autoridades tunecinas anunciaron el cierre de su frontera con Libia, donde el caos político ha permitido prosperar a los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI), y reforzaron las patrullas terrestres y aéreas en la región.
“El objetivo de este ataque era trastornar la situación en materia de seguridad en nuestro país y establecer un emirato de ‘Dáesh’ (acrónimo en árabe del EI) en Ben Guerdane”, dijo el jefe del Gobierno Habib Essid. “Pero, gracias a todos los esfuerzos, a la cooperación entre nuestro Ejército nacional y las fuerzas de la seguridad interior, la reacción fue fuerte y rápida”.
Los ataques, registrados al amanecer, tuvieron por objetivo un cuartel del Ejército, una comisaría de la Policía y un puesto de la guardia nacional en Ben Guerdane, una localidad de 60 mil habitantes situada a escasos kilómetros de Libia.
Ayer, el presidente tunecino, Beji Caid Essebsi, condenó este ataque “coordinado” y “sin precedentes”, que quizás tenía como objetivo “controlar” la región. “Los tunecinos están en guerra contra esta barbarie y estas ratas que vamos a exterminar definitivamente”, agregó en declaraciones transmitidas por la televisión pública.
Toque de queda
Las autoridades decretaron un toque de queda en Ben Guerdane. Las escuelas y oficinas públicas estaban cerradas, según testigos, y las fuerzas del orden patrullaban en las calles e incitaban por megáfono a los habitantes a permanecer en sus casas. Sobre algunos tejados se podía ver a soldados montando guardia.
Imágenes que circulan por internet mostraban a algunos habitantes observando y aplaudiendo a los soldados. “¡Viva Túnez! ¡Dios es grande!”, gritaban mientras se escuchaban todavía disparos.
REFORMA
Emergencia
El ataque en Ben Guerdan llevó a que el presidente del país, Beji Caid Essebsi, admitiera que ha discutido con el Gobierno la posibilidad de instaurar el artículo 80 de la Constitución, que permite al Ejecutivo adoptar medidas excepcionales, como lo han hecho países como EU y Francia.
Lucha contra yihadistas
El último ataque similar al de la ciudad tunecina de Ben Guerdan, a unos 50 kilómetros de la frontera libia, se produjo el pasado 2 de marzo, cuando unidades especiales tunecinas de la lucha antiterrorista mataron a cinco presuntos yihadistas que se habían infiltrado en el país desde la vecina Libia y tomado a una familia como rehén. Sin embargo, el país ha tenido peores episodios de terrorismo.
El 18 marzo de 2015 Túnez sufrió el peor atentado de su historia reciente cuando yihadistas del Estado Islámico asesinaron a 21 turistas en el Museo del Bardo.
Pero la violencia se recrudeció el 26 junio de ese año, 38 turistas resultan muertos en otros dos atentados yihadistas contra sendos hoteles de Susa, el Imperial Mahrahaba, de la cadena española Riu, y el vecino Muradi Palm Marinay.
El país ya fue golpeado el año pasado por atentados mortíferos. Las autoridades tunecinas anunciaron el cierre de su frontera con Libia, donde el caos político ha permitido prosperar a los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI), y reforzaron las patrullas terrestres y aéreas en la región.
“El objetivo de este ataque era trastornar la situación en materia de seguridad en nuestro país y establecer un emirato de ‘Dáesh’ (acrónimo en árabe del EI) en Ben Guerdane”, dijo el jefe del Gobierno Habib Essid. “Pero, gracias a todos los esfuerzos, a la cooperación entre nuestro Ejército nacional y las fuerzas de la seguridad interior, la reacción fue fuerte y rápida”.
Los ataques, registrados al amanecer, tuvieron por objetivo un cuartel del Ejército, una comisaría de la Policía y un puesto de la guardia nacional en Ben Guerdane, una localidad de 60 mil habitantes situada a escasos kilómetros de Libia.
Ayer, el presidente tunecino, Beji Caid Essebsi, condenó este ataque “coordinado” y “sin precedentes”, que quizás tenía como objetivo “controlar” la región. “Los tunecinos están en guerra contra esta barbarie y estas ratas que vamos a exterminar definitivamente”, agregó en declaraciones transmitidas por la televisión pública.
Toque de queda
Las autoridades decretaron un toque de queda en Ben Guerdane. Las escuelas y oficinas públicas estaban cerradas, según testigos, y las fuerzas del orden patrullaban en las calles e incitaban por megáfono a los habitantes a permanecer en sus casas. Sobre algunos tejados se podía ver a soldados montando guardia.
Imágenes que circulan por internet mostraban a algunos habitantes observando y aplaudiendo a los soldados. “¡Viva Túnez! ¡Dios es grande!”, gritaban mientras se escuchaban todavía disparos.
REFORMA
Emergencia
El ataque en Ben Guerdan llevó a que el presidente del país, Beji Caid Essebsi, admitiera que ha discutido con el Gobierno la posibilidad de instaurar el artículo 80 de la Constitución, que permite al Ejecutivo adoptar medidas excepcionales, como lo han hecho países como EU y Francia.
Lucha contra yihadistas
El último ataque similar al de la ciudad tunecina de Ben Guerdan, a unos 50 kilómetros de la frontera libia, se produjo el pasado 2 de marzo, cuando unidades especiales tunecinas de la lucha antiterrorista mataron a cinco presuntos yihadistas que se habían infiltrado en el país desde la vecina Libia y tomado a una familia como rehén. Sin embargo, el país ha tenido peores episodios de terrorismo.
El 18 marzo de 2015 Túnez sufrió el peor atentado de su historia reciente cuando yihadistas del Estado Islámico asesinaron a 21 turistas en el Museo del Bardo.
Pero la violencia se recrudeció el 26 junio de ese año, 38 turistas resultan muertos en otros dos atentados yihadistas contra sendos hoteles de Susa, el Imperial Mahrahaba, de la cadena española Riu, y el vecino Muradi Palm Marinay.
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