Internacional
El premio mayor es a la democracia y la libertad en Cuba: Fariñas
El disidente cubano asegura que seguirá luchando por la democracia de su país aunque le cueste la vida
- Fariñas gana premio de derechos humanos
más importante de Europa
LA HABANA, CUBA (21/OCT/2010).- El disidente cubano Guillermo Fariñas, Premio Sajarov 2010 del Parlamento Europeo (PE), afirmó hoy que el premio mayor al que él aspira es a la democracia y la libertad en Cuba tras más de medio siglo de lo que describió como "dictadura comunista".
En entrevista con Notimex, dijo este jueves que "este es un premio táctico, es un premio flaco, en el sentido de que el premio que yo aspiro es a la democracia de Cuba, ese es el Premio Gordo de Cuba y por ese seguiré luchando aunque me cueste la vida".
Fariñas, de 48 años, adelantó que está sopesando, pese a su delicado estado de salud, realizar otra huelga de hambre, la número 24, si el gobierno cubano le impide viajar a Estrasburgo (Francia) el 15 de diciembre próximo para recibir el galardón.
En entrevista telefónica, el psicólogo y periodista independiente opinó que este es un premio "a todo el pueblo cubano y sobre todo a la lucha del pueblo cubano durante 52 años de dictadura comunista, es un premio a los presos políticos en prisión".
También para "los disidentes que están en las calles siendo golpeados, amenazados, detenidos arbitrariamente, es un premio a los exiliados que, a pesar tener mejores condiciones económicas que aquí en Cuba, no olvidan que tienen una patria sometida".
Para el activista, es un galardón a "todos los hombres y mujeres de buena voluntad de este planeta que se solidarizaron y denunciaron la violación de los derechos humanos en Cuba. Y lograron que el gobierno accediera a liberar a un número de presos políticos".
Esta fue una referencia a la excarcelación de decenas de presos políticos, 39 de los cuales ya viajaron a España, luego de un inédito diálogo entre la Iglesia católica y el gobierno del presidente Raúl Castro y por la cual realizó huelga de hambre durante 135 días.
Disidentes cubanos celebraron este jueves como propio el Premio Sajarov 2010 otorgado a Fariñas y expresaron a la Unión Europea (UE) su agradecimiento por el galardón, el tercero de este tipo que reciben activistas opositores al gobierno de la isla en ocho años.
Fariñas suspendió el 8 de julio pasado su ayuno, iniciado tras la muerte del preso opositor Orlando Zapata luego de 85 días en huelga de hambre, al anunciarse la gradual excarcelación de 52 opositores, remanentes del original bloque de 75 encacelados desde 2003.
Del hospital volvió a su casa en la ciudad de Santa Clara, 280 kilómetros al este de La Habana, desde donde ofreció sus declaraciones, tras una operación de vesícula y con un trombo en la yugular que -dijo- aun se mantiene y requiere largo tratamiento con anticoagulantes.
Dijo que la concesión del premio lo tomó por sorpresa "porque tenía información de España y Francia de que estaban haciendo gestiones en el Parlamento para tratar de neutralizar mi candidatura".
"Pero parece que Dios puso la mano y la causa de Cuba salió a la palestra pública", agregó sin precisar de donde provinieron las presuntas presiones.
Fariñas expresó su deseo de que este sea un mensaje al gobierno cubano de la UE, que el lunes debe reunirse para analizar la "Posición Común" adoptada en 1996 para presionar el respeto a la democracia y los derechos humanos en la isla.
"Yo le pediría no levantar la posición común porque el gobierno cubano liberó a algunas decenas de presos, pero no ha hecho nada por modificar las leyes que los llevaron a prisión", anotó.
En su criterio, "si esas leyes siguen ahí intocables en cualquier momento puede producirse otra ola represiva, igual o mayor que la de 2003", contra disidentes acusados de conspirar con Estados Unidos contra la seguridad del Estado y la soberanía económica de la nación.
Según el disidente isleño, siempre será posible que los cubanos obtengan el premio Sajarov que "lo van a dar donde se violan los derechos humanos y los hombres y mujeres van a tener que arriesgar su integridad física con tal de ser hombres y mujeres libres en un sociedad democrática".
Sobre su eventual nueva protesta, explicó: "lo que tengo en mente en este momento es declararme en huelga de hambre si no me dejan salir, pero voy a consultarlo con un grupo de hermanos que trabajan conmigo, con mis familiares, con hermanos más veteranos que yo en esta lucha".
"Y la próxima semana determinaré que voy a hacer. Me siento mal, pero a mi nunca me ha interesado la salud sino siempre lo que me ha interesado es la causa", manifestó con voz firme y fluida.
En 2006 recibió el Premio de Derechos Humanos de la ciudad alemana de Weimar, por una huelga de hambre en la que exigió acceso libre a internet para todos los cubanos, pero las autoridades no le concedieron el permiso de salida necesario para viajar.
Fariñas aconsejó a la nueva ministra de Asuntos Exteriores de España, Trinidad Jiménez, que trate de hacer "todo lo contrario" de lo que realizó su antecesor Miguel Angel Moratinos con respecto a la democracia, pues nunca se reunió con los disidentes en la isla.
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LA HABANA, CUBA (21/OCT/2010).- El disidente cubano Guillermo Fariñas, Premio Sajarov 2010 del Parlamento Europeo (PE), afirmó hoy que el premio mayor al que él aspira es a la democracia y la libertad en Cuba tras más de medio siglo de lo que describió como "dictadura comunista".
En entrevista con Notimex, dijo este jueves que "este es un premio táctico, es un premio flaco, en el sentido de que el premio que yo aspiro es a la democracia de Cuba, ese es el Premio Gordo de Cuba y por ese seguiré luchando aunque me cueste la vida".
Fariñas, de 48 años, adelantó que está sopesando, pese a su delicado estado de salud, realizar otra huelga de hambre, la número 24, si el gobierno cubano le impide viajar a Estrasburgo (Francia) el 15 de diciembre próximo para recibir el galardón.
En entrevista telefónica, el psicólogo y periodista independiente opinó que este es un premio "a todo el pueblo cubano y sobre todo a la lucha del pueblo cubano durante 52 años de dictadura comunista, es un premio a los presos políticos en prisión".
También para "los disidentes que están en las calles siendo golpeados, amenazados, detenidos arbitrariamente, es un premio a los exiliados que, a pesar tener mejores condiciones económicas que aquí en Cuba, no olvidan que tienen una patria sometida".
Para el activista, es un galardón a "todos los hombres y mujeres de buena voluntad de este planeta que se solidarizaron y denunciaron la violación de los derechos humanos en Cuba. Y lograron que el gobierno accediera a liberar a un número de presos políticos".
Esta fue una referencia a la excarcelación de decenas de presos políticos, 39 de los cuales ya viajaron a España, luego de un inédito diálogo entre la Iglesia católica y el gobierno del presidente Raúl Castro y por la cual realizó huelga de hambre durante 135 días.
Disidentes cubanos celebraron este jueves como propio el Premio Sajarov 2010 otorgado a Fariñas y expresaron a la Unión Europea (UE) su agradecimiento por el galardón, el tercero de este tipo que reciben activistas opositores al gobierno de la isla en ocho años.
Fariñas suspendió el 8 de julio pasado su ayuno, iniciado tras la muerte del preso opositor Orlando Zapata luego de 85 días en huelga de hambre, al anunciarse la gradual excarcelación de 52 opositores, remanentes del original bloque de 75 encacelados desde 2003.
Del hospital volvió a su casa en la ciudad de Santa Clara, 280 kilómetros al este de La Habana, desde donde ofreció sus declaraciones, tras una operación de vesícula y con un trombo en la yugular que -dijo- aun se mantiene y requiere largo tratamiento con anticoagulantes.
Dijo que la concesión del premio lo tomó por sorpresa "porque tenía información de España y Francia de que estaban haciendo gestiones en el Parlamento para tratar de neutralizar mi candidatura".
"Pero parece que Dios puso la mano y la causa de Cuba salió a la palestra pública", agregó sin precisar de donde provinieron las presuntas presiones.
Fariñas expresó su deseo de que este sea un mensaje al gobierno cubano de la UE, que el lunes debe reunirse para analizar la "Posición Común" adoptada en 1996 para presionar el respeto a la democracia y los derechos humanos en la isla.
"Yo le pediría no levantar la posición común porque el gobierno cubano liberó a algunas decenas de presos, pero no ha hecho nada por modificar las leyes que los llevaron a prisión", anotó.
En su criterio, "si esas leyes siguen ahí intocables en cualquier momento puede producirse otra ola represiva, igual o mayor que la de 2003", contra disidentes acusados de conspirar con Estados Unidos contra la seguridad del Estado y la soberanía económica de la nación.
Según el disidente isleño, siempre será posible que los cubanos obtengan el premio Sajarov que "lo van a dar donde se violan los derechos humanos y los hombres y mujeres van a tener que arriesgar su integridad física con tal de ser hombres y mujeres libres en un sociedad democrática".
Sobre su eventual nueva protesta, explicó: "lo que tengo en mente en este momento es declararme en huelga de hambre si no me dejan salir, pero voy a consultarlo con un grupo de hermanos que trabajan conmigo, con mis familiares, con hermanos más veteranos que yo en esta lucha".
"Y la próxima semana determinaré que voy a hacer. Me siento mal, pero a mi nunca me ha interesado la salud sino siempre lo que me ha interesado es la causa", manifestó con voz firme y fluida.
En 2006 recibió el Premio de Derechos Humanos de la ciudad alemana de Weimar, por una huelga de hambre en la que exigió acceso libre a internet para todos los cubanos, pero las autoridades no le concedieron el permiso de salida necesario para viajar.
Fariñas aconsejó a la nueva ministra de Asuntos Exteriores de España, Trinidad Jiménez, que trate de hacer "todo lo contrario" de lo que realizó su antecesor Miguel Angel Moratinos con respecto a la democracia, pues nunca se reunió con los disidentes en la isla.
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