Internacional
El Papa interviene en debate por la vida de la mujer en estado vegetativo
El gobierno del primer ministro Silvio Berlusconi aprobó un decreto para suspender la eutanasia. El presidente italiano se negó a firmar el decreto
ROMA, ITALIA.- El
Papa Benedicto XVI insistió el sábado en que se defienda la vida de una persona, incluso si está sufriendo, al intervenir en un debate nacional por el derecho de morir de una mujer en estado vegetativo desde hace 17 años.
Eluana Englaro, de 38 años, ha estado viviendo gracias a tubos de alimentación artificial desde 1992, cuando tenía 20 años de edad y sufrió un accidente automovilístico. Después de una batalla judicial de una década, empezó a reducirse su alimentación como preparativo para retirarle los tubos. Su padre reiteró el viernes que ese era el deseo de ella.
El Papa dijo que quería reafirmar enérgicamente “la dignidad absoluta y suprema de cada ser humano'', incluso cuando están “débiles y amortajados en el misterio del sufrimiento''.
En un intento por mantener a Englaro con vida, el gobierno de centroderecha del primer ministro Silvio Berluscon i aprobó el viernes un decreto de emergencia que dice que no puede suspenderse la alimentación y la hidratación artificiales para pacientes que dependen de ellas.
Sin embargo, en una confrontación rara entre las altas autoridades de Italia, el presidente Giorgio Napolitano se negó a firmar el decreto, alegando que era contrario a fallos judiciales que permitían que se retiraran los tubos de alimentación de Englaro y que violaba la separación fundamental entre los poderes ejecutivo y judicial.
El gobierno prevé ahora elevar un proyecto al parlamento, donde las fuerzas de Berlusconi tienen mayoría, para convertir el decreto en ley. Se espera que las cámaras analicen el tema el lunes, pero no quedó claro si el proyecto de ley pudiera ser aprobada a tiempo.
Si es aprobada con cambios, Napolitano podría pedirle al parlamento que la revise, pero si ambas cámaras la aprueban sin cambios por segunda vez, se volverá ley.
Eluana Englaro, de 38 años, ha estado viviendo gracias a tubos de alimentación artificial desde 1992, cuando tenía 20 años de edad y sufrió un accidente automovilístico. Después de una batalla judicial de una década, empezó a reducirse su alimentación como preparativo para retirarle los tubos. Su padre reiteró el viernes que ese era el deseo de ella.
El Papa dijo que quería reafirmar enérgicamente “la dignidad absoluta y suprema de cada ser humano'', incluso cuando están “débiles y amortajados en el misterio del sufrimiento''.
En un intento por mantener a Englaro con vida, el gobierno de centroderecha del primer ministro Silvio Berluscon i aprobó el viernes un decreto de emergencia que dice que no puede suspenderse la alimentación y la hidratación artificiales para pacientes que dependen de ellas.
Sin embargo, en una confrontación rara entre las altas autoridades de Italia, el presidente Giorgio Napolitano se negó a firmar el decreto, alegando que era contrario a fallos judiciales que permitían que se retiraran los tubos de alimentación de Englaro y que violaba la separación fundamental entre los poderes ejecutivo y judicial.
El gobierno prevé ahora elevar un proyecto al parlamento, donde las fuerzas de Berlusconi tienen mayoría, para convertir el decreto en ley. Se espera que las cámaras analicen el tema el lunes, pero no quedó claro si el proyecto de ley pudiera ser aprobada a tiempo.
Si es aprobada con cambios, Napolitano podría pedirle al parlamento que la revise, pero si ambas cámaras la aprueban sin cambios por segunda vez, se volverá ley.
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