Internacional

Derrota electoral amenaza las reformas de Nicolas Sarkozy

El partido del actual mandatario francés podría dirigirse a una contundente derrota en la segunda vuelta el próximo domingo

PARÍS, FRANCIA.- El presidente francés, Nicolas Sarkozy, encontrará más difícil sumar apoyos para su plan de reformar las pensiones y reducir el importante déficit presupuestario, tras la fuerte derrota sufrida por su partido en las elecciones regionales del domingo.

Los socialistas ganaron a la Unión para un Movimiento  Popular (UMP) de Sarkozy en la primera vuelta de los comicios, con lo que la formación de centroderecha parece dirigirse a la derrota en la segunda vuelta que se llevará a cabo el próximo domingo.

Los consejos regionales, que tienen competencias en cuestiones como los edificios escolares o el transporte local, apenas tienen voz en la economía y no desempeñan ningún papel en el Gobierno nacional.

Pero el resultado de las últimas elecciones importantes antes de que Sarkozy busque la reelección en 2012, probablemente envalentonará a los sindicatos, que se oponen a sus planes de reforma, lo que dificultará al Gobierno obtener apoyos.

Sarkozy ha prometido una reforma del sistema de pensiones, que afronta un agujero creciente en su financiación que está previsto que llegue a los 19 mil 833 millones de dólares en 2013, y se espera que eleve la edad de jubilación.

También debe controlar el gasto significativamente si quiere cumplir su compromiso ante sus socios europeos de recortar el déficit público por debajo de 8.2% de este año a por debajo del techo establecido por la Unión Europea de 3% en 2013.

La derrota en las elecciones regionales podría reforzar la precaución gubernamental mientras Sarkozy se prepara para lo que podría ser una campaña electoral mucho más dura de la que tuvo en 2007.

La oposición socialista ha tenido dificultades desde entonces, pero ahora, la líder del partido, Martine Aubry, parece haberle devuelto la confianza tras llegar al poder en 2008, y la izquierda se ha aprovechado del descontento por cuestiones como el desempleo o la inmigración.

Pensiones ahogan al presidente

A mediados de febrero el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, lanzó una maratónica carrera para reformar el sistema nacional de pensiones, la prioridad, entre todas sus reformas.

Un proyecto para cambiar el costoso sistema estaría listo para septiembre, en el marco de un plan impopular, pero difícil de evitar debido a los problemas que atraviesan las finanzas públicas.

Sarkozy prevé una baja en el número de trabajadores y un aumento en la cantidad de jubilados que conducirá a un déficit anual de 136 mil 100 millones de dólares en el sistema de pensiones para el año 2050.

Francia gasta 12.4% del Producto Interno Bruto en su sistema de pensiones, frente al promedio de la zona euro de 11.1%. Esto, sumado a una población cada vez más vieja y a los fuertes gastos del Gobierno para hacer frente a la crisis financiera, han incrementado la urgencia de un cambio.

Socialistas busca alianza con Europa Ecologista

De madrugada, poco después de enterarse de los resultados definitivos, socialistas y ecologistas franceses, vencedores de las eleccionesregionales, comenzaron a negociar para llegar unidos a la segunda vuelta. El objetivo era claro: arrasar el domingo que viene en la segunda vuelta, apropiarse de las 22 regiones en liza, borrar a la derecha de Sarkozy de todo territorio regional. Cuentan con posibilidades.

En primer lugar, por sus excelentes resultados: 29.4% de votos para el Partido Socialista (PS) francés, que resucita reconvertido en la primera fuerza política del país, 12.5% para Europa Ecologista, firmemente enraizada ya en el mapa político francés.

En eso están. Reunidos en un hotel del centro de París, dirigentes socialistas, ecologistas y también, del Frente de Izquierda, un heterogéneo grupo que aúna, entre otros, al Partido Comunista Francés, y que con 6.2% de los votos cuenta también --aunque menos-- para la victoria final, negociaron a tres bandas. Hoy termina el plazo para presentar las listas comunes. Todo apunta a que la izquierda francesa llegará unida el domingo y pasará como un huracán por las urnas.
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